Comunicaciones Libres y Casos Clínicos
Ambliopía y glaucoma congénito unilateral
Dres.: Clara Berrozpe Villabona, Jorge Peraza Nieves, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Dres.: Clara Berrozpe Villabona, Jorge Peraza Nieves, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Objetivo: Analizar la incidencia y los factores de riesgo de ambliopía, y la efectividad del tratamiento con oclusiones en pacientes con glaucoma congénito unilateral en la edad pediátrica.
Método: Estudio de serie de casos, 16 pacientes fueron seleccionados. Los datos recogidos fueron a) Al diagnóstico del glaucoma: edad, presión intraocular (PIO) y cirugía inicial; b) Durante el seguimiento clínico: defecto refractivo, estrabismo, ambliopía [edad de diagnóstico, agudeza visual (AV), tratamiento con oclusiones] y longitud axial; d) Al final del seguimiento: número total de cirugías.
Resultados: 32 ojos con una media de 10 años de seguimiento fueron evaluados. No existió diferencia estadísticamente significativa entre la progresión de la ambliopía y las variables: número de cirugías, primera cirugía, edad al diagnóstico, PIO y agudeza visual inicial. La efectividad del tratamiento con oclusiones: 85% de nuestros pacientes presentaron mejoría de AV desde la visita inicial a la primera visita de seguimiento, con mejoría máxima de 4 líneas de AV. 70% tuvo mejoría de AV desde la visita inicial a la segunda visita de seguimiento, con mejoría máxima de 3 líneas de AV.
Conclusiones: El defecto visual en el glaucoma congénito puede ser debido a factores orgánicos y funcionales (ambliopía). En nuestros casos, la mejora de AV en los pacientes tratados con oclusiones fue de 1 a 4 líneas de AV. Los factores predictores de una pobre respuesta al tratamiento con oclusiones fueron: leucomas corneales y estrías de Haab, alto astigmatismo, mal control de PIO y cirugías y una inadecuada adherencia al tratamiento.
Método: Estudio de serie de casos, 16 pacientes fueron seleccionados. Los datos recogidos fueron a) Al diagnóstico del glaucoma: edad, presión intraocular (PIO) y cirugía inicial; b) Durante el seguimiento clínico: defecto refractivo, estrabismo, ambliopía [edad de diagnóstico, agudeza visual (AV), tratamiento con oclusiones] y longitud axial; d) Al final del seguimiento: número total de cirugías.
Resultados: 32 ojos con una media de 10 años de seguimiento fueron evaluados. No existió diferencia estadísticamente significativa entre la progresión de la ambliopía y las variables: número de cirugías, primera cirugía, edad al diagnóstico, PIO y agudeza visual inicial. La efectividad del tratamiento con oclusiones: 85% de nuestros pacientes presentaron mejoría de AV desde la visita inicial a la primera visita de seguimiento, con mejoría máxima de 4 líneas de AV. 70% tuvo mejoría de AV desde la visita inicial a la segunda visita de seguimiento, con mejoría máxima de 3 líneas de AV.
Conclusiones: El defecto visual en el glaucoma congénito puede ser debido a factores orgánicos y funcionales (ambliopía). En nuestros casos, la mejora de AV en los pacientes tratados con oclusiones fue de 1 a 4 líneas de AV. Los factores predictores de una pobre respuesta al tratamiento con oclusiones fueron: leucomas corneales y estrías de Haab, alto astigmatismo, mal control de PIO y cirugías y una inadecuada adherencia al tratamiento.
Citicolina oral para ambliopía infantil
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, Susana Perucho Martínez, José Alberto Reche Sainz, Elena Martín Giral
Madrid
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, Susana Perucho Martínez, José Alberto Reche Sainz, Elena Martín Giral
Madrid
Objetivo: Describir los resultados de la administración de citicolina en una serie de casos de niños con ambliopía y mala respuesta a terapias convencionales.
Método: Serie de casos prospectiva con 12 niños con ambliopía unilateral y mala respuesta a corrección refractiva, oclusiones, corrección del estrabismo y/o terapia visual. Con el consentimiento de los padres para la participación en el estudio, se investigó la agudeza visual con optotipos de Snellen y el grosor de la capa de células ganglionares a nivel macular con tomografía de coherencia óptica al inicio y a los dos meses del tratamiento con citicolina oral.
Resultados: Seis niños y seis niñas de entre 4 y 13 años (media de 7,8) recibieron citicolina oral (20mg/kg/día) durante dos meses. Todos los niños completaron el estudio. Las causas de ambliopía fueron: 10 refractiva, 1 estrábica, 1 estrábica y refractiva y 1 por opacidad de medios y refractiva. La agudeza visual inicial media en el ojo dominado fue 0,525 y la final de 0,625 (p<0,05 prueba T Student para datos pareados). En el ojo dominante no se observaron diferencias en la agudeza visual. El grosor de la capa de células ganglionares no mostró diferencias significativas antes y después del tratamiento. No se notificaron efectos adversos de ninguna índole.
Conclusiones: La citicolina oral presenta propiedades neuromoduladoras ampliamente descritas en la literatura. En nuestra serie de casos se aprecia un efecto favorable sobre la agudeza visual en ambliopías unilaterales que no habían respondido previamente a las terapias habituales. No se observaron cambios a nivel estructural mediante tomografía de coherencia óptica.
Método: Serie de casos prospectiva con 12 niños con ambliopía unilateral y mala respuesta a corrección refractiva, oclusiones, corrección del estrabismo y/o terapia visual. Con el consentimiento de los padres para la participación en el estudio, se investigó la agudeza visual con optotipos de Snellen y el grosor de la capa de células ganglionares a nivel macular con tomografía de coherencia óptica al inicio y a los dos meses del tratamiento con citicolina oral.
Resultados: Seis niños y seis niñas de entre 4 y 13 años (media de 7,8) recibieron citicolina oral (20mg/kg/día) durante dos meses. Todos los niños completaron el estudio. Las causas de ambliopía fueron: 10 refractiva, 1 estrábica, 1 estrábica y refractiva y 1 por opacidad de medios y refractiva. La agudeza visual inicial media en el ojo dominado fue 0,525 y la final de 0,625 (p<0,05 prueba T Student para datos pareados). En el ojo dominante no se observaron diferencias en la agudeza visual. El grosor de la capa de células ganglionares no mostró diferencias significativas antes y después del tratamiento. No se notificaron efectos adversos de ninguna índole.
Conclusiones: La citicolina oral presenta propiedades neuromoduladoras ampliamente descritas en la literatura. En nuestra serie de casos se aprecia un efecto favorable sobre la agudeza visual en ambliopías unilaterales que no habían respondido previamente a las terapias habituales. No se observaron cambios a nivel estructural mediante tomografía de coherencia óptica.
El papel de la citicolina en la neuropatía óptica glaucomatosa progresiva
Dres.: Susana Perucho Martínez, Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, Beatriz Villarrubia Torcal, Elena Martín Giral
Madrid
Dres.: Susana Perucho Martínez, Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, Beatriz Villarrubia Torcal, Elena Martín Giral
Madrid
Objetivo: Conocer si el efecto neuroprotector de la citicolina puede estabilizar el VFI (Visual Field Index) de la perimetría de los pacientes con glaucoma en fase de progresión a pesar del buen control tensional.
Método: Fueron incluidos 15 pacientes diagnosticados de glaucoma de ángulo abierto (GAA) moderado/severo en fase de progresión (-1dB/año) a pesar del correcto control tensional. Recibieron citicolina oral (Cebrolux® 800mg) y se reevaluaron los parámetros de progresión y agudeza visual (AV) a los dos meses de tratamiento. Asimismo completaron un test de capacitación visual validado (FV14).
Resultados: La mediana de edad de los pacientes fue 71,5 años. La AV media antes del tratamiento fue 0.6. En la mayoría de los casos el VFI a los dos meses de tratamiento mejoró, pero este cambio no fue estadísticamente significativo (p 0.4) Sin embargo sí podemos demostrar la estabilidad del VFI en glaucomas en fase de progresión tras el tratamiento con citicolina. La AV media tras el tratamiento fue de 0,7. El test de función visual VF14 mejoró la capacitación en todos los pacientes.
Conclusiones: La citicolina, como molécula neuroprotectora, podría no solo mejorar los resultados de lo potenciales evocados visuales (PEV) y el electrorretinograma (ERG) sino que estabilizaría el VFI en pacientes con glaucoma en progresión como terapia adyuvante a los fármacos y cirugías hipotensoras.
Método: Fueron incluidos 15 pacientes diagnosticados de glaucoma de ángulo abierto (GAA) moderado/severo en fase de progresión (-1dB/año) a pesar del correcto control tensional. Recibieron citicolina oral (Cebrolux® 800mg) y se reevaluaron los parámetros de progresión y agudeza visual (AV) a los dos meses de tratamiento. Asimismo completaron un test de capacitación visual validado (FV14).
Resultados: La mediana de edad de los pacientes fue 71,5 años. La AV media antes del tratamiento fue 0.6. En la mayoría de los casos el VFI a los dos meses de tratamiento mejoró, pero este cambio no fue estadísticamente significativo (p 0.4) Sin embargo sí podemos demostrar la estabilidad del VFI en glaucomas en fase de progresión tras el tratamiento con citicolina. La AV media tras el tratamiento fue de 0,7. El test de función visual VF14 mejoró la capacitación en todos los pacientes.
Conclusiones: La citicolina, como molécula neuroprotectora, podría no solo mejorar los resultados de lo potenciales evocados visuales (PEV) y el electrorretinograma (ERG) sino que estabilizaría el VFI en pacientes con glaucoma en progresión como terapia adyuvante a los fármacos y cirugías hipotensoras.
Alteraciones del desarrollo embrionario ocular: de la papila de Bergmeister al punto de Mittendorf
Dres.: Enrique Santos Bueso, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, M.ª José Vinuesa Silva, Julián García Sánchez
Madrid
Dres.: Enrique Santos Bueso, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, M.ª José Vinuesa Silva, Julián García Sánchez
Madrid
La irrigación vascular del globo ocular durante el desarrollo embrionario corresponde a la arteria hialoidea embrionaria -rama de la arteria oftálmica dorsal primitiva- que, desde la décima semana de gestación, regresa de forma progresiva hasta desaparecer en el momento del nacimiento. La regresión incompleta de esta arteria hialoidea origina una serie de estructuras intraoculares que no suelen tener repercusión clínica pero que pueden generar dudas en el diagnóstico y, en los casos más graves, producir complicaciones intraoculares. La permanencia completa de la arteria hialoidea embrionaria después del nacimiento se denomina canal de Cloquet o conducto de Stilling y comunica el cristalino con la papila atravesando el vítreo. El resto glial de este canal o conducto en la cápsula posterior del cristalino se denomina punto de Mittendorf y en la cabeza del nervio óptico, papila de Bergmeister. Otras estructuras que pueden encontrarse en la cámara posterior son el espacio de Berger, el espacio de Erggelet y de Martegiani o el ligamento de Wieger. Repasamos estas estructuras con la presentación de varios casos clínicos y su correspondiente iconografía.
Escleroqueratectomía superficial en el manejo del quiste dermoide corneal
Dres.: M.ª Luisa Merino Suarez, Javier Belmonte Martín, José Belmonte Martínez
Alicante
Dres.: M.ª Luisa Merino Suarez, Javier Belmonte Martín, José Belmonte Martínez
Alicante
Objetivo: Determinar la idoneidad de la técnica de escleroqueratectomía superficial para el tratamiento del quiste dermoide limbar(QD).
Métodos: Se realizó un estudio retrospectivo de una serie de QD intervenidos desde 1991 hasta la actualidad. Los parámetros analizados fueron: edad en el momento de la cirugía, sexo, enfermedades asociadas, clasificación del QD, localización, tamaño, motivo de la cirugía, agudeza visual (AV) postoperatoria, tiempo de seguimiento y complicaciones.
Resultados: Un total de 10 QD de 8 pacientes fueron intervenidos, 2 casos bilaterales. La edad media en la cirugía fue de 2,5 ±1,7 años; 7 pacientes (87,5%) eran varones y 1 mujer (12,5%). Un paciente asociaba un síndrome de Gonderhart, y otro un quiste lipodermoide en cola de ceja. El 85,7% afectaron al ojo izquierdo, mientras que el 12,5% al ojo derecho. 7 casos (87,5%) se clasificaban de tipo II, siendo el resto (12,5%) de tipo III. Se localizaron en limbo inferotemporal en 7 pacientes (87,5%) y a las 6 horas en 1 paciente (12,5%). La media del área fue 38,47 ± 41,40 mm2. El motivo de la cirugía fue el crecimiento de la masa en todos los pacientes excepto en uno justificado por molestias de folículos pilosos. La media de AV postoperatoria fue 0,9 ±0,10, siendo el tiempo medio de seguimiento 11 ± 2 años. No se detectaron complicaciones severas; sin embargo, apareció un leve adelgazamiento corneal crónico en un paciente y un pseudopterigion no invasivo en otro.
Conclusión: Los QD son tumores congénitos benignos compuestos por elementos de origen ectodérmico y mesodérmico pudiendo contener folículos pilosos, glándulas sebáceas, etc. Se localizan preferentemente en limbo inferotemporal. Se pueden asociar con síndrome de Goldenhart y síndrome de nevus epidérmico. En aquellos QD de pequeño tamaño que no evidencien crecimiento se puede contemplar la abstención terapéutica. Generalmente, el volumen de la masa y su crecimiento hacen necesario la intervención. Dado que la mayoría de los quistes se encuentran confinados en el espesor corneoescleral, consideramos que la escisión simple es la técnica idónea por su sencillez, accesibilidad para cualquier oftalmólogo y buenos resultados anatómicos y funcionales.
Métodos: Se realizó un estudio retrospectivo de una serie de QD intervenidos desde 1991 hasta la actualidad. Los parámetros analizados fueron: edad en el momento de la cirugía, sexo, enfermedades asociadas, clasificación del QD, localización, tamaño, motivo de la cirugía, agudeza visual (AV) postoperatoria, tiempo de seguimiento y complicaciones.
Resultados: Un total de 10 QD de 8 pacientes fueron intervenidos, 2 casos bilaterales. La edad media en la cirugía fue de 2,5 ±1,7 años; 7 pacientes (87,5%) eran varones y 1 mujer (12,5%). Un paciente asociaba un síndrome de Gonderhart, y otro un quiste lipodermoide en cola de ceja. El 85,7% afectaron al ojo izquierdo, mientras que el 12,5% al ojo derecho. 7 casos (87,5%) se clasificaban de tipo II, siendo el resto (12,5%) de tipo III. Se localizaron en limbo inferotemporal en 7 pacientes (87,5%) y a las 6 horas en 1 paciente (12,5%). La media del área fue 38,47 ± 41,40 mm2. El motivo de la cirugía fue el crecimiento de la masa en todos los pacientes excepto en uno justificado por molestias de folículos pilosos. La media de AV postoperatoria fue 0,9 ±0,10, siendo el tiempo medio de seguimiento 11 ± 2 años. No se detectaron complicaciones severas; sin embargo, apareció un leve adelgazamiento corneal crónico en un paciente y un pseudopterigion no invasivo en otro.
Conclusión: Los QD son tumores congénitos benignos compuestos por elementos de origen ectodérmico y mesodérmico pudiendo contener folículos pilosos, glándulas sebáceas, etc. Se localizan preferentemente en limbo inferotemporal. Se pueden asociar con síndrome de Goldenhart y síndrome de nevus epidérmico. En aquellos QD de pequeño tamaño que no evidencien crecimiento se puede contemplar la abstención terapéutica. Generalmente, el volumen de la masa y su crecimiento hacen necesario la intervención. Dado que la mayoría de los quistes se encuentran confinados en el espesor corneoescleral, consideramos que la escisión simple es la técnica idónea por su sencillez, accesibilidad para cualquier oftalmólogo y buenos resultados anatómicos y funcionales.
Cómo actuar ante una sospecha de disgenesia del polo anterior
Dras.: Ana Morales Becerra, Cristina Gómez Cabrera, Luz Ángela Muñoz Jiménez, Julia Escudero Gómez
Málaga
Dras.: Ana Morales Becerra, Cristina Gómez Cabrera, Luz Ángela Muñoz Jiménez, Julia Escudero Gómez
Málaga
Introducción: Las malformaciones del segmento anterior son alteraciones en el patrón normal de desarrollo. Pueden involucrar exclusivamente una estructura como la córnea o implicar todas las estructuras de la cámara anterior y frecuentemente se ven acompañadas de glaucoma, que es la consecuencia del fallo en la función de las estructuras involucradas. Su etiología puede estar relacionada con distintos factores como son: genéticos, infecciosos, inflamatorios, tóxicos, metabólicos o traumáticos y la afectación dependerá en gran medida de la fase del desarrollo embrionario en la cual ejerzan su influencia.
Casos clínicos: Presentamos una revisión de casos de disgenesias del polo anterior. La mayoría de los casos estudiados tenían una edad inferior a los tres meses en el momento de la consulta y presentaban a la exploración opacidad corneal de predominio central, adherencia de iris a la córnea, diámetro corneal y longitud axial dentro de los valores compatibles con la normalidad y en algunos casos encontramos presión intraocular aumentada y afectación de cristalino. Uno de los pacientes presentaba dichos hallazgos en un ojo, pero en el otro presentaba una disgenesia grave del polo anterior que afectaba a córnea, iris y cristalino con estafiloma anterior.
Conclusión: Ante un paciente con sospecha de una disgenesia del polo anterior se debe hacer un correcto diagnóstico diferencial mediante los datos de la biomicroscopía, longitud axial, diámetro corneal, presión intraocular, ecografía, y nunca debemos olvidarnos de descartar la posibilidad de un glaucoma asociado.
Casos clínicos: Presentamos una revisión de casos de disgenesias del polo anterior. La mayoría de los casos estudiados tenían una edad inferior a los tres meses en el momento de la consulta y presentaban a la exploración opacidad corneal de predominio central, adherencia de iris a la córnea, diámetro corneal y longitud axial dentro de los valores compatibles con la normalidad y en algunos casos encontramos presión intraocular aumentada y afectación de cristalino. Uno de los pacientes presentaba dichos hallazgos en un ojo, pero en el otro presentaba una disgenesia grave del polo anterior que afectaba a córnea, iris y cristalino con estafiloma anterior.
Conclusión: Ante un paciente con sospecha de una disgenesia del polo anterior se debe hacer un correcto diagnóstico diferencial mediante los datos de la biomicroscopía, longitud axial, diámetro corneal, presión intraocular, ecografía, y nunca debemos olvidarnos de descartar la posibilidad de un glaucoma asociado.
Megalocórnea: diagnóstico diferencial
Dras.: Ana Morales Becerra, Cristina Gómez Cabrera, Luz Ángela Muñoz Jiménez, M.ª Isabel Pérez Cabeza
Málaga
Dras.: Ana Morales Becerra, Cristina Gómez Cabrera, Luz Ángela Muñoz Jiménez, M.ª Isabel Pérez Cabeza
Málaga
Introducción: La megalocórnea se refiere a un aumento del diámetro corneal (tamaños mayores de 11 mm en menores de 1 año y por encima de 13 mm en mayores de 1 año). Puede presentarse con tres patrones: megalocórnea esencial, megaloftalmo anterior y buftalmo en glaucoma congénito. La diferenciación es habitualmente difícil, pero es muy importante un diagnóstico precoz para la elección de un tratamiento adecuado y prevenir la ceguera.
Casos clínicos: Se presentan 3 casos clínicos de niños menores de 1 año que acudieron a urgencias por referir aumento del tamaño ocular y con síntomas poco floridos. Tras un adecuado estudio: agudeza visual, biomicroscopía, presión intraocular, fondo de ojo, longitud axial, paquimetría, biometría, queratometría y gonioscopia se realizó diagnóstico diferencial presentando cada uno un patrón diferente de megalocórnea. Llevando a cabo el estudio adecuado, se pudo instaurar un tratamiento precoz y conseguir una evolución favorable.
Conclusión: Ante un niño con un diámetro corneal mayor de lo normal, resulta imprescindible conocer el significado clínico que este signo posee. La presencia o no de glaucoma congénito será la cuestión principal que debemos plantearnos. Los otros dos cuadros importantes a estudiar son la megalocórnea esencial y megaloftalmo anterior. Estos síndromes comparten características morfológicas y, por ello, es importante no confundir los diagnósticos pues el manejo de una y otra patología es diferente.
Casos clínicos: Se presentan 3 casos clínicos de niños menores de 1 año que acudieron a urgencias por referir aumento del tamaño ocular y con síntomas poco floridos. Tras un adecuado estudio: agudeza visual, biomicroscopía, presión intraocular, fondo de ojo, longitud axial, paquimetría, biometría, queratometría y gonioscopia se realizó diagnóstico diferencial presentando cada uno un patrón diferente de megalocórnea. Llevando a cabo el estudio adecuado, se pudo instaurar un tratamiento precoz y conseguir una evolución favorable.
Conclusión: Ante un niño con un diámetro corneal mayor de lo normal, resulta imprescindible conocer el significado clínico que este signo posee. La presencia o no de glaucoma congénito será la cuestión principal que debemos plantearnos. Los otros dos cuadros importantes a estudiar son la megalocórnea esencial y megaloftalmo anterior. Estos síndromes comparten características morfológicas y, por ello, es importante no confundir los diagnósticos pues el manejo de una y otra patología es diferente.
Alteraciones de la motilidad ocular en paciente con hemiatrofia cerebral
Dras.: Casilda González Gil, M.ª del Mar González Manrique, Mercedes Milner Bañón, Silvia Vírseda Moreno
Madrid
Dras.: Casilda González Gil, M.ª del Mar González Manrique, Mercedes Milner Bañón, Silvia Vírseda Moreno
Madrid
Introducción: Paciente de 7 meses de edad remitida por el Servicio de Pediatría para valorar nistagmus y alteración de los movimientos oculares; estaba siendo estudiada en dicho servicio por microcefalia, hemiparesia derecha, epilepsia parcial sintomática y retraso psicomotor.
Caso Clínico: En la primera exploración realizada en consulta se observó un déficit de la mirada conjugada a la derecha, tortícolis horizontal y nistagmus disociado, de mayor intensidad y frecuencia en ojo izquierdo. Las hendiduras palpebrales eran asimétricas (más pequeña la del ojo izquierdo) y presentaba una ametropía bilateral leve. En el fondo de ojo ambas papilas eran normales y simétricas. La resonancia magnética mostró una hemiatrofia cerebral izquierda de predominio occipito-parietal, de probable origen vascular. En las sucesivas revisiones el nistagmus fue disminuyendo progresivamente de intensidad, sin llegar a desaparecer. Existía una gran dominancia del ojo derecho con exotropía variable del ojo izquierdo, por lo que se pautaron oclusiones horarias extensas del ojo derecho durante meses. Al año de edad comenzó a observarse una leve palidez papilar en el ojo izquierdo que se hizo más evidente con el tiempo.
Conclusión: A pesar del tratamiento oclusor la agudeza visual del ojo izquierdo sólo llegó a 0,1, mientras que en ojo derecho era de 1,5 (Test de Pigassou). La dextroversión fue mejorando notablemente, y con ello la posición de tortícolis horizontal, que aún mantiene. En cuanto a la exotropía, hemos optado por una actitud expectante, tanto por la edad temprana de la paciente como por su variabilidad.
Caso Clínico: En la primera exploración realizada en consulta se observó un déficit de la mirada conjugada a la derecha, tortícolis horizontal y nistagmus disociado, de mayor intensidad y frecuencia en ojo izquierdo. Las hendiduras palpebrales eran asimétricas (más pequeña la del ojo izquierdo) y presentaba una ametropía bilateral leve. En el fondo de ojo ambas papilas eran normales y simétricas. La resonancia magnética mostró una hemiatrofia cerebral izquierda de predominio occipito-parietal, de probable origen vascular. En las sucesivas revisiones el nistagmus fue disminuyendo progresivamente de intensidad, sin llegar a desaparecer. Existía una gran dominancia del ojo derecho con exotropía variable del ojo izquierdo, por lo que se pautaron oclusiones horarias extensas del ojo derecho durante meses. Al año de edad comenzó a observarse una leve palidez papilar en el ojo izquierdo que se hizo más evidente con el tiempo.
Conclusión: A pesar del tratamiento oclusor la agudeza visual del ojo izquierdo sólo llegó a 0,1, mientras que en ojo derecho era de 1,5 (Test de Pigassou). La dextroversión fue mejorando notablemente, y con ello la posición de tortícolis horizontal, que aún mantiene. En cuanto a la exotropía, hemos optado por una actitud expectante, tanto por la edad temprana de la paciente como por su variabilidad.
Retroceso asimétrico de ambos rectos horizontales como tratamiento del up-shoot y down-shoot en el Síndrome de Duane tipo II. A propósito de un caso
Dres.: Idoia Rodríguez Maiztegui, Juan José Rodríguez Ezcurra
Barcelona
Dres.: Idoia Rodríguez Maiztegui, Juan José Rodríguez Ezcurra
Barcelona
Introducción: Los up-shoot y down-shoot son movimientos verticales anómalos del ojo en intento de aducción (ADD), presentes en un 25% de casos con Síndrome de Duane (SD), siendo más frecuentes en el SD con exotropia (XT). Como mecanismos implicados en su etiopatogenia, se han propuesto dos teorías: el efecto «brida» por co-contracción de ambos rectos horizontales (teoría mecánica), o la co-contracción de los rectos verticales por inervación anómala de los mismos por una rama medial del III nervio (teoría inervacional). Para su tratamiento, se han descrito diferentes técnicas quirúrgicas: retroceso del músculo recto lateral (RL) del ojo afecto con Y-splitting, retroceso de ambos rectos horizontales, desinserción del RL y anclaje a la pared orbitaria lateral. Presentamos un caso de SD tipo II y su tratamiento quirúrgico.
Caso Clínico: Varón de 7 años de edad con SD tipo II en ojo izquierdo (OI), con XT en posición primaria de mirada (PPM), severo up-shoot, down-shoot y retracción del globo ocular en ADD, así como tortícolis compensatorio horizontal. Se procede a tratamiento quirúrgico mediante retroceso del RL en OI asociado a retroceso del recto medio (RM) ipsilateral. Dada la exotropía de gran magnitud en PPM se asocia retroceso del recto lateral en el ojo contralateral. Cabe destacar como hallazgo intraoperatorio, un test de ducción forzada pasiva positivo (+++) en ADD así como un engrosamiento de la fascia y septo intermuscular entre el RL y el recto superior (RS) en OI. En el postoperatorio se evidencia resolución de los movimientos verticales anómalos, con mejoría de la desviación en PPM, la retracción ocular y el tortícolis.
Conclusión: El retroceso asimétrico de ambos rectos horizontales se ha mostrado como una técnica segura y eficaz en el tratamiento del up-shoot y down-shoot asociado a retracción del globo ocular en el SD.
Caso Clínico: Varón de 7 años de edad con SD tipo II en ojo izquierdo (OI), con XT en posición primaria de mirada (PPM), severo up-shoot, down-shoot y retracción del globo ocular en ADD, así como tortícolis compensatorio horizontal. Se procede a tratamiento quirúrgico mediante retroceso del RL en OI asociado a retroceso del recto medio (RM) ipsilateral. Dada la exotropía de gran magnitud en PPM se asocia retroceso del recto lateral en el ojo contralateral. Cabe destacar como hallazgo intraoperatorio, un test de ducción forzada pasiva positivo (+++) en ADD así como un engrosamiento de la fascia y septo intermuscular entre el RL y el recto superior (RS) en OI. En el postoperatorio se evidencia resolución de los movimientos verticales anómalos, con mejoría de la desviación en PPM, la retracción ocular y el tortícolis.
Conclusión: El retroceso asimétrico de ambos rectos horizontales se ha mostrado como una técnica segura y eficaz en el tratamiento del up-shoot y down-shoot asociado a retracción del globo ocular en el SD.
Toxina botulínica en diplopía del adulto no paralítica
Dres.: Elena Escobar Martín, Olga Seijas Leal, Naon Kim, Julio Yangüela Rodilla
Madrid
Dres.: Elena Escobar Martín, Olga Seijas Leal, Naon Kim, Julio Yangüela Rodilla
Madrid
Introducción: El empleo de toxina botulínica A como tratamiento en diplopía del adulto no parética, no está ampliamente difundido. Describimos 4 casos clínicos en los que se observa la utilidad de este tratamiento.
Casos Clínicos: Se presentan 4 pacientes, con edades comprendidas entre 38 y 58 años, todos ellos con diplopia de larga evolucion no parética, 2 de ellos secundarios a cirugía refractiva. En cuanto al tipo de desviación, 3 de los sujetos presentaban endotropía de entre 10 y 14? y un caso de diplopia vertical de 2?. El resultado ha sido favorable en 3 de los casos, en los que ha sido necesaria una sola inyección para conseguir la desaparición de la diplopia con un tiempo de evolución de 17 meses de media (rango +/-7meses) mientras que uno de los pacientes ha precisado 2 inyecciones, obteniéndose tan solo una respuesta parcial. Como complicaciones tan solo se ha observado la fase de hipercorrección inicial y ptosis secundaria en el caso de la paciente con diplopía vertical.
Conclusión: En nuestra experiencia, la toxina botulínica puede ser un tratamiento útil en casos de diplopía del adulto por estrabismos latentes descompensados de ángulo pequeño o moderado, bien sea secundarios a cirugía refractiva o por otras causas. De los 4 casos presentados, 3 presentan una buena respuesta a la inyección de toxina botulínica con una única dosis tras un tiempo de evolución de 17 meses (rango +/- 7 meses). Este tratamiento es poco invasivo y aprovecha el potencial de visión binocular.
Casos Clínicos: Se presentan 4 pacientes, con edades comprendidas entre 38 y 58 años, todos ellos con diplopia de larga evolucion no parética, 2 de ellos secundarios a cirugía refractiva. En cuanto al tipo de desviación, 3 de los sujetos presentaban endotropía de entre 10 y 14? y un caso de diplopia vertical de 2?. El resultado ha sido favorable en 3 de los casos, en los que ha sido necesaria una sola inyección para conseguir la desaparición de la diplopia con un tiempo de evolución de 17 meses de media (rango +/-7meses) mientras que uno de los pacientes ha precisado 2 inyecciones, obteniéndose tan solo una respuesta parcial. Como complicaciones tan solo se ha observado la fase de hipercorrección inicial y ptosis secundaria en el caso de la paciente con diplopía vertical.
Conclusión: En nuestra experiencia, la toxina botulínica puede ser un tratamiento útil en casos de diplopía del adulto por estrabismos latentes descompensados de ángulo pequeño o moderado, bien sea secundarios a cirugía refractiva o por otras causas. De los 4 casos presentados, 3 presentan una buena respuesta a la inyección de toxina botulínica con una única dosis tras un tiempo de evolución de 17 meses (rango +/- 7 meses). Este tratamiento es poco invasivo y aprovecha el potencial de visión binocular.
Ectopía lentis. Manejo y evolución, a propósito de un caso
Dres.: Ángela Barrajón Rodríguez, Sonia López-Romero Moraleda, Fernando González del Valle, Esperanza López Mondejar
Toledo
Dres.: Ángela Barrajón Rodríguez, Sonia López-Romero Moraleda, Fernando González del Valle, Esperanza López Mondejar
Toledo
Introducción: La ectopia lentis es una condición en la que el cristalino se encuentra desplazado con respecto a su emplazamiento originario debido a la ruptura y/o debilidad de las fibras zonulares, pudiendo ser congénita o adquirida.
Caso Clínico: Presentamos el caso de un niño de 2 años remitido por diminución de agudeza visual secundaria a subluxación cristaliniana congénita bilateral, resultando realmente en una afaquia funcional. Se decide intervenir en tiempos quirúrgicos sucesivos, realizándose facoaspiración, colocación de anillo de Cionni con anclaje escleral e implante de lente intraocular de 3 piezas, luxándose la óptica mediante maniobra de Gimbel tras capsulorrexis posterior intraquirúrgica y alineándose con el eje visual, consiguiendo así corregir la subluxación del saco cristaliniano. Tras una evolución postquirúrgica satisfactoria bilateral, se establece un microestrabismo, con dominancia de ojo izquierdo y una ambliopía leve contralateral. Se prescribe refracción de lejos y de cerca existiendo buena adaptación, no así a la oclusión con parche, por lo que se opta por unas gafas electrónicas programadas para la penalización intermitente del ojo izquierdo de manera personalizada.
Conclusiones: Pensamos que la mejor alternativa para tratar la afaquia y favorecer la recuperación visual es el implante de una lente en cámara posterior. Por ello, usando el procedimiento descrito, los resultados pueden ser funcionalmente mejores. Proponemos esta técnica como una alternativa en el tratamiento quirúrgico de la ectopia lentis en edad pediátrica, sin olvidar la necesidad del manejo médico para conseguir el mejor desarrollo de la agudeza visual.
Caso Clínico: Presentamos el caso de un niño de 2 años remitido por diminución de agudeza visual secundaria a subluxación cristaliniana congénita bilateral, resultando realmente en una afaquia funcional. Se decide intervenir en tiempos quirúrgicos sucesivos, realizándose facoaspiración, colocación de anillo de Cionni con anclaje escleral e implante de lente intraocular de 3 piezas, luxándose la óptica mediante maniobra de Gimbel tras capsulorrexis posterior intraquirúrgica y alineándose con el eje visual, consiguiendo así corregir la subluxación del saco cristaliniano. Tras una evolución postquirúrgica satisfactoria bilateral, se establece un microestrabismo, con dominancia de ojo izquierdo y una ambliopía leve contralateral. Se prescribe refracción de lejos y de cerca existiendo buena adaptación, no así a la oclusión con parche, por lo que se opta por unas gafas electrónicas programadas para la penalización intermitente del ojo izquierdo de manera personalizada.
Conclusiones: Pensamos que la mejor alternativa para tratar la afaquia y favorecer la recuperación visual es el implante de una lente en cámara posterior. Por ello, usando el procedimiento descrito, los resultados pueden ser funcionalmente mejores. Proponemos esta técnica como una alternativa en el tratamiento quirúrgico de la ectopia lentis en edad pediátrica, sin olvidar la necesidad del manejo médico para conseguir el mejor desarrollo de la agudeza visual.
Drusas de nervio óptico en un paciente de 12 años
Dres.: Enrique Santos Bueso, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, M.ª José Vinuesa Silva, Julián García Sánchez
Madrid
Dres.: Enrique Santos Bueso, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, M.ª José Vinuesa Silva, Julián García Sánchez
Madrid
Las drusas del nervio óptico (DNO) son estructuras formadas por aminoácidos, ácidos ribonucleicos y calcio que evolucionan de forma dinámica, principalmente a partir de la segunda década de la vida, desencadenando graves alteraciones campimétricas. Suelen ser bilaterales y asimétricas, de patogénesis desconocida e incidencia de 3-4/1000 habitantes, con predilección por el sexo femenino. Las DNO en la infancia suelen ser un hallazgo casual aunque pueden presentar síntomas como fotopsias, restricciones campimétricas o disminución de la agudeza visual (AV)1-4. El diagnóstico se confirma mediante ecografía modo B que objetiva lesiones hiperreflectantes en la papila con sombra acústica posterior así como con la autofluorescencia típica de las DNO. Paciente de 12 años derivado a consulta por visión de miodesopsias y disminución de visión de varios meses de evolución. No presentaba ningún antecedente personal ni familiar de interés ni ninguna alergia conocida. En la exploración presentaba AV de 0,8 en ambos ojos (AO). La biomicroscopía, motilidad ocular extrínseca e intrínseca y presión intraocular eran normales. En el fondo de ojo se apreciaban DNO en AO confirmadas mediante ecografía y autofluorescencia. La campimetría mostraba disminución de la sensibilidad generalizada de predominio en ojo derecho. Las DNO son poco frecuentes en la edad pediátrica y se desarrollan progresivamente produciendo un deterioro del campo visual. En el seguimiento de las DNO se utilizan la campimetría y la tomografía de coherencia óptica. Como conclusiones destacar la importancia del conocimiento de las DNO para el diagnóstico diferencial del pseudopapiledema en niños.
Papilitis secundaria a toxoplasmosis paramacular. Retinocoroiditis de Jensen
Dres.: Enrique Santos Bueso, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, M.ª José Vinuesa Silva, Julián García Sánchez
Madrid
Dres.: Enrique Santos Bueso, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, M.ª José Vinuesa Silva, Julián García Sánchez
Madrid
Paciente de 12 años de edad que refería visión borrosa por el ojo izquierdo (OI) de una semana de evolución. No refería ningún antecedente personal ni familiar de interés ni ninguna alergia. Presentaba una AV de 1,0 en ojo derecho y 0,3 en OI. La presión intraocular, motilidad ocular extrínseca e intrínseca eran normales. En el fondo de ojo destacaba un foco blanquecino sobreelevado paramacular inferior con edema perilesional y papilitis asociada. En la tomografía de coherencia óptica destacaban dos focos paramaculares activos con edema perilesional.La toxoplasmosis ocular (TO), producida por el parásito Toxoplasma gondii, es la forma de uveítis más frecuente, congénita o adquirida. La TO congénita es bilateral en más del 85% de los casos, comprometiendo el área macular, y por tanto la agudeza visual (AV), en el 55%. En la TO adquirida el 70% es unilateral. La lesión activa en forma de focos sobreelevados blanquecinos evoluciona hacia la atrofia con destrucción de la retina y coroides profundizando hasta esclera. Además suelen comprometerse el polo anterior y posterior incluso con papilitis1 por retinitis adyacente conocida como coroiditis de Jensen.
10 casos clínicos de neurofibromatosis tipo I y glioma de la vía óptica en niños
Dres.: Natalia Blanco Calvo, Belén Gutiérrez Partida, Ana Clement Corral, Diego Puertas Bordallo
Madrid
Dres.: Natalia Blanco Calvo, Belén Gutiérrez Partida, Ana Clement Corral, Diego Puertas Bordallo
Madrid
Introducción: La Neurofibromatosis tipo I (NF-1) es una enfermedad hereditaria, autosómica dominante, en el 50-70% de los casos y que presenta una incidencia de aproximadamente uno por cada 3.500 a 4.000 nacidos vivos. Se debe a una alteración en el cromosoma de supresión tumoral 17q 11.2 y habitualmente se diagnostica en la infancia. Tienen predisposición para desarrollar glioma de la vía óptica (GVO), presente en un 15-20% de los pacientes. De ellos un 20-30% desarrollará sintomatología clínica y será causa de una importante morbilidad durante los primeros años de vida.
Casos Clínicos: Presentamos 10 casos clínicos, 5 niños y 5 niñas de edades comprendidas entre los 6 meses y los 6 años de edad, que presentan NF-1 y GVO y de los cuales 4 asocian manifestaciones oftalmológicas que comprometen la función visual requiriendo 3 de ellos tratamiento con quimioterapia y 1 de ellos resección tumoral y quimioterapia.
Conclusiones: Los gliomas de la vía óptica asociados a NF-1 están clasificados como astrocitomas pilocíticos que son tumores grado 1 que se diagnostican más frecuentemente en niños menores de 5 años afectados de NF-1 y en términos generales son lesiones que permanecen estables por periodos largos de tiempo por lo que el pronóstico global de estos pacientes es relativamente bueno. Debido a la alta incidencia de este tumor en pacientes con NF-1, el screening de la vía óptica está indicado en el momento del diagnóstico de esta enfermedad. El tratamiento más apropiado es controvertido y debe ser individualizado en cada paciente pero, en general, si no existe afectación se puede plantear un tratamiento conservador.
Casos Clínicos: Presentamos 10 casos clínicos, 5 niños y 5 niñas de edades comprendidas entre los 6 meses y los 6 años de edad, que presentan NF-1 y GVO y de los cuales 4 asocian manifestaciones oftalmológicas que comprometen la función visual requiriendo 3 de ellos tratamiento con quimioterapia y 1 de ellos resección tumoral y quimioterapia.
Conclusiones: Los gliomas de la vía óptica asociados a NF-1 están clasificados como astrocitomas pilocíticos que son tumores grado 1 que se diagnostican más frecuentemente en niños menores de 5 años afectados de NF-1 y en términos generales son lesiones que permanecen estables por periodos largos de tiempo por lo que el pronóstico global de estos pacientes es relativamente bueno. Debido a la alta incidencia de este tumor en pacientes con NF-1, el screening de la vía óptica está indicado en el momento del diagnóstico de esta enfermedad. El tratamiento más apropiado es controvertido y debe ser individualizado en cada paciente pero, en general, si no existe afectación se puede plantear un tratamiento conservador.
Papiledema unilateral secundario a melanocitoma meningeo
Dres.: Borja Maroto Rodríguez, José Alberto Reche Sainz, Fredy Ruiz Aimituma, Raquel Lapuente Monjas
Madrid
Dres.: Borja Maroto Rodríguez, José Alberto Reche Sainz, Fredy Ruiz Aimituma, Raquel Lapuente Monjas
Madrid
Introducción: El melanocitoma meningeo es un tumor originado en los melanocitos de la leptomeninge. Es una lesión infrecuente, benigna y de curso prolongado que generalmente ocurre en la medula espinal y región infratentorial. Presentamos un caso de afectación cerebral y extraaxial que desarrolla hipertensión intracraneal (HTIC) con papiledema unilateral.
Caso Clínico: Varón de 52 años con cefalea, inestabilidad de la marcha y diplopia. En las pruebas de neuroimagen se objetivan múltiples lesiones milimétricas intracraneales y extraaxiales con engrosamiento y realce patológico en el espacio subaracnoideo, así como en los pares craneales bajos, nervio y cintilla óptica derecha. La exploración oftalmológica mostraba agudeza visual conservada, pupilas normales y diplopia binocular horizontal en dextroversión. Papila OD normal. En OI hemorragia en astilla peripapilar en temporal con borramiento papilar 360º. Campo visual sin alteraciones. Se realiza biopsia de lesión a nivel de L4 con apertura dural. La anatomía patológica identifica neoplasia melanocítica compatible con melanocitoma confirmándose con la inmunohistoquímica. Al mes presenta resolución de la cefalea, la diplopía y el papiledema del OI.
Conclusión: Hay pocos casos descritos de melanocitoma meníngeo diseminado con HTIC. Se trata de un tumor benigno cuyo tratamiento es la resección quirúrgica total, no obstante hay un porcentaje no despreciable de recidiva local, diseminación o trasformación maligna. Nuestro paciente presenta una HTIC secundaria a un melanocitoma meningeo que se manifiesta con cefalea, diplopía horizontal en dextroversión por la probable afectación del VI par derecho y papiledema unilateral, que se resuelve tras la apertura dural.
Caso Clínico: Varón de 52 años con cefalea, inestabilidad de la marcha y diplopia. En las pruebas de neuroimagen se objetivan múltiples lesiones milimétricas intracraneales y extraaxiales con engrosamiento y realce patológico en el espacio subaracnoideo, así como en los pares craneales bajos, nervio y cintilla óptica derecha. La exploración oftalmológica mostraba agudeza visual conservada, pupilas normales y diplopia binocular horizontal en dextroversión. Papila OD normal. En OI hemorragia en astilla peripapilar en temporal con borramiento papilar 360º. Campo visual sin alteraciones. Se realiza biopsia de lesión a nivel de L4 con apertura dural. La anatomía patológica identifica neoplasia melanocítica compatible con melanocitoma confirmándose con la inmunohistoquímica. Al mes presenta resolución de la cefalea, la diplopía y el papiledema del OI.
Conclusión: Hay pocos casos descritos de melanocitoma meníngeo diseminado con HTIC. Se trata de un tumor benigno cuyo tratamiento es la resección quirúrgica total, no obstante hay un porcentaje no despreciable de recidiva local, diseminación o trasformación maligna. Nuestro paciente presenta una HTIC secundaria a un melanocitoma meningeo que se manifiesta con cefalea, diplopía horizontal en dextroversión por la probable afectación del VI par derecho y papiledema unilateral, que se resuelve tras la apertura dural.
Hipoplasia foveal: 3 casos clínicos
Dras.: Sofía de Manuel Triantafilo, Josefina Bañuelos Bañuelos, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, Pilar Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Dras.: Sofía de Manuel Triantafilo, Josefina Bañuelos Bañuelos, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, Pilar Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Objetivo: Describir las características de agudeza visual (AV), fondo de ojo (FO), autofluorescencia (AF) y tomografía de coherencia óptica (OCT) en 3 pacientes diagnosticados de hipoplasia foveal bilateral.
Método: Se presentan 3 pacientes diagnosticados de hipoplasia foveal de 5, 4 y 11 años, en seguimiento por baja AV. Los dos primeros pacientes no presentaban antecedentes familiares ni personal de interés, mientras que la última paciente refería historia de albinismo en su familia.
Resultados: La AV de la primera paciente no mejoró de 0,5 en ambos ojos (AO), en el segundo paciente de 0,6 en AO y en la tercera paciente de 0,6 en AO. La exploración de segmento anterior era normal y en el FO había ausencia de brillo foveal en todos ellos. Además, en la tercera paciente, se evidenciaba hipoplasia de ambos nervios ópticos junto con hipopigmentación retiniana bilateral. La imagen de AF presentaba atenuación de la autofluorescencia foveal y en la imagen de OCT se observaba ausencia de depresión foveal central, continuidad de las capas internas de la retina a nivel foveal y un grosor normal de la capa de fotorreceptores.
Conclusiones: La hipoplasia foveal se describe como una ausencia de depresión foveal con continuidad de las capas de la retina neurosensorial en dicha zona foveal. Característica de pacientes con aniridia, microftalmia, acromatopsia, albinismo y retinopatía del prematuro, es rara como hallazgo aislado. La OCT es una herramienta rápida y no invasiva de gran importancia en el diagnóstico de hipoplasia foveal en pacientes con baja AV.
Método: Se presentan 3 pacientes diagnosticados de hipoplasia foveal de 5, 4 y 11 años, en seguimiento por baja AV. Los dos primeros pacientes no presentaban antecedentes familiares ni personal de interés, mientras que la última paciente refería historia de albinismo en su familia.
Resultados: La AV de la primera paciente no mejoró de 0,5 en ambos ojos (AO), en el segundo paciente de 0,6 en AO y en la tercera paciente de 0,6 en AO. La exploración de segmento anterior era normal y en el FO había ausencia de brillo foveal en todos ellos. Además, en la tercera paciente, se evidenciaba hipoplasia de ambos nervios ópticos junto con hipopigmentación retiniana bilateral. La imagen de AF presentaba atenuación de la autofluorescencia foveal y en la imagen de OCT se observaba ausencia de depresión foveal central, continuidad de las capas internas de la retina a nivel foveal y un grosor normal de la capa de fotorreceptores.
Conclusiones: La hipoplasia foveal se describe como una ausencia de depresión foveal con continuidad de las capas de la retina neurosensorial en dicha zona foveal. Característica de pacientes con aniridia, microftalmia, acromatopsia, albinismo y retinopatía del prematuro, es rara como hallazgo aislado. La OCT es una herramienta rápida y no invasiva de gran importancia en el diagnóstico de hipoplasia foveal en pacientes con baja AV.
Un paciente con vítreo primario hiperplásico persistente: un caso clínico
Dres.: Luis Violante, Sónia Campos, Fausto Carvalheira, Joao Paulo Castro Sousa
Portugal
Dres.: Luis Violante, Sónia Campos, Fausto Carvalheira, Joao Paulo Castro Sousa
Portugal
Introducción: El vítreo primario hiperplásico persistente (VPHP) es una anomalía congénita, generalmente unilateral, que se producen en los niños nacidos a término con peso normal. Tiene no hereditaria, secundaria a la regresión incompleta del sistema vascular fetal, dando como resultado tejido fibrovascular retrolental o posterior y complicaciones asociadas.
Caso Clínico: caso de persistente hiperplásico primario vítreo posterior (VPHP) en un paciente de tres años de edad, con baja visión en el ojo derecho, denominado por la escuela para la evaluación oftalmológica. El PVPH puede abarcar un amplio espectro de anomalías oculares que implican la retina, el nervio vítreo, óptico, mácula, cristalino, iris, cuerpo ciliar, así como anormalidades tales como microftalmia y microcórnea.
Conclusiones: Hacemos hincapié en la importancia de la evaluación ocular temprana en los niños, a fin de evitar un diagnóstico tardío y el tratamiento que afecta el pronóstico visual y así minimizar daños futuros a la salud de estos niños.
Caso Clínico: caso de persistente hiperplásico primario vítreo posterior (VPHP) en un paciente de tres años de edad, con baja visión en el ojo derecho, denominado por la escuela para la evaluación oftalmológica. El PVPH puede abarcar un amplio espectro de anomalías oculares que implican la retina, el nervio vítreo, óptico, mácula, cristalino, iris, cuerpo ciliar, así como anormalidades tales como microftalmia y microcórnea.
Conclusiones: Hacemos hincapié en la importancia de la evaluación ocular temprana en los niños, a fin de evitar un diagnóstico tardío y el tratamiento que afecta el pronóstico visual y así minimizar daños futuros a la salud de estos niños.
Identificación y medida de la distancia al limbo de los músculos rectos horizontales mediante tomografía de coherencia óptica
Dres.: Lucía de Pablo Gómez de Liaño, José Fernández-Vigo Escribano, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Ávila
Dres.: Lucía de Pablo Gómez de Liaño, José Fernández-Vigo Escribano, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Ávila
Propósito: Identificar los músculos rectos horizontales mediante tomografía de coherencia óptica (OCT) de segmento anterior, y medir la distancia desde la inserción muscular al limbo esclerocorneal.
Método: Estudio transversal realizado en 60 ojos de 30 sujetos sanos. Se empleó la OCT Spectralis® (Heidelberg engineering) con la cual se identificaron los músculos rectos horizontales realizándose la medida desde la inserción al limbo esclerocorneal. Se valoró además la reproducibilidad de las medidas tanto intra como interobservador.
Resultados: La edad media fue de 51 años (rango 25-75) siendo un 65% mujeres. Se pudo identificar y medir la distancia en el 88% de los casos. El recto lateral se observó a una distancia media de 6,4mm del limbo (rango 5,9-7,1) mientras que el recto medio se observó a 5,2mm del limbo (rango 4,1-5,9). Se obtuvo una alta reproducibilidad tanto intra como interobservador (CCI?0.90).
Conclusiones: La OCT es una técnica eficaz y reproducible para la identificación y medida de la distancia al limbo de los músculos rectos horizontales.
Método: Estudio transversal realizado en 60 ojos de 30 sujetos sanos. Se empleó la OCT Spectralis® (Heidelberg engineering) con la cual se identificaron los músculos rectos horizontales realizándose la medida desde la inserción al limbo esclerocorneal. Se valoró además la reproducibilidad de las medidas tanto intra como interobservador.
Resultados: La edad media fue de 51 años (rango 25-75) siendo un 65% mujeres. Se pudo identificar y medir la distancia en el 88% de los casos. El recto lateral se observó a una distancia media de 6,4mm del limbo (rango 5,9-7,1) mientras que el recto medio se observó a 5,2mm del limbo (rango 4,1-5,9). Se obtuvo una alta reproducibilidad tanto intra como interobservador (CCI?0.90).
Conclusiones: La OCT es una técnica eficaz y reproducible para la identificación y medida de la distancia al limbo de los músculos rectos horizontales.
Manejo de diplopía binocular en un hospital comarcal
Dres.: Araceli Trueba Lawand, Inmaculada Gómez Álvarez, M.ª Jesús Romero Rivero, Florencio González Márquez
Sevilla
Dres.: Araceli Trueba Lawand, Inmaculada Gómez Álvarez, M.ª Jesús Romero Rivero, Florencio González Márquez
Sevilla
Introducción: La diplopía binocular es causa ocasional de frecuentación a urgencias y que obliga a descartar focalidad neurológica. Por tal motivo se decide desarrollar un protocolo para optimizar el manejo de estos pacientes.
Objetivo: Implantación de un protocolo conjunto de atención a pacientes con diplopía, de los Servicios implicados de Urgencias, Medicina Interna y Oftalmología, en un hospital comarcal sin servicio de Neurología. Análisis descriptivo de todos los casos de pacientes con diplopía binocular atendidos durante un período de 5 años.
Metodología: Recogida prospectiva en una base de datos, desarrollada específicamente para este fin, de todos los casos de pacientes con sintomatología de diplopía binocular procedentes de los Servicios de Urgencias , Medicina Interna y Oftalmología de un hospital comarcal, desde enero 2010 a diciembre 2014. En el proceso de implantación del protocolo se impartió formación al personal implicado, así como establecimiento de líneas de manejo de estos pacientes.
Resultados: Se recogieron más de 200 casos, presentando datos generales, diagnóstico, evolución y tratamiento (pendiente datos definitivos). Un porcentaje pequeño de pacientes precisó derivación al hospital de referencia.
Conclusiones: Sugerimos que la implantación de un protocolo de actuación en pacientes con diplopía binocular permite una adecuada orientación diagnóstica y terapéutica en la gran mayoría de los pacientes. Un pequeño porcentaje precisó derivacion a centro de referencia para atención especializada.
Objetivo: Implantación de un protocolo conjunto de atención a pacientes con diplopía, de los Servicios implicados de Urgencias, Medicina Interna y Oftalmología, en un hospital comarcal sin servicio de Neurología. Análisis descriptivo de todos los casos de pacientes con diplopía binocular atendidos durante un período de 5 años.
Metodología: Recogida prospectiva en una base de datos, desarrollada específicamente para este fin, de todos los casos de pacientes con sintomatología de diplopía binocular procedentes de los Servicios de Urgencias , Medicina Interna y Oftalmología de un hospital comarcal, desde enero 2010 a diciembre 2014. En el proceso de implantación del protocolo se impartió formación al personal implicado, así como establecimiento de líneas de manejo de estos pacientes.
Resultados: Se recogieron más de 200 casos, presentando datos generales, diagnóstico, evolución y tratamiento (pendiente datos definitivos). Un porcentaje pequeño de pacientes precisó derivación al hospital de referencia.
Conclusiones: Sugerimos que la implantación de un protocolo de actuación en pacientes con diplopía binocular permite una adecuada orientación diagnóstica y terapéutica en la gran mayoría de los pacientes. Un pequeño porcentaje precisó derivacion a centro de referencia para atención especializada.
Miopización tras cirugía de exotropía de gran ángulo en un paciente adulto
Dres.: Verónica Castro Navarro, Paula Palomares Fort, Alicia Gracia García, Enrique Cervera Taulet
Valencia
Dres.: Verónica Castro Navarro, Paula Palomares Fort, Alicia Gracia García, Enrique Cervera Taulet
Valencia
Introducción: Tras la cirugía de estrabismo pueden presentarse alteraciones refractivas.
Caso Clínico: Varón de 36 años con exotropía desde los 14 años, sin antecedentes médicos ni quirúrgicos de interés. Al inicio, presenta una mejor agudeza visual corregida (MAVC) 20/20 en ambos ojos (AO) y una refracción sin cicloplejia de +0.25 (0.25*170º) en su ojo derecho (OD) y +0.75 (-4.25*170º) en su ojo izquierdo (OI). La exploración de polo anterior, fundoscopía y motilidad ocular extrínseca es normal AO. La prueba de oclusión prismada cuantifica valores estables de -70 dioptrías prismáticas (dP) con dominancia del OD. Se realiza retroinserción de 7 mm de músculos rectos laterales (RL) AO y resección de 7mm de músculo recto medio OI. Al mes, se objetiva ortotropia y una autorefracción sin cicloplejía de -5.50 (-0.75*170º) OD y -2.25 (-5.00*170º) OI, que mejora con cicloplejia a +0.00 (-0.75*2) OD y +0.25 (-4.50*170) OI. Cuatro meses postquirúrgicos, se mantiene el cambio miópico. A los 5 meses postquirúrgicos, la MAVC es 20/20 AO en ortotropia y la autorefracción sin cicloplejia es +0.25 (-0.50*170º) OD y +0.50 (-4.25*170º) OI. Asimismo, se normaliza la topografía corneal con Galilei objetivando una disminución de la potencia corneal y un aumento del aplanamiento corneal AO.
Conclusión: Los cambios refractivos secundarios a la cirugía de estrabismo acontecen frecuentemente en desviaciones de gran ángulo. Son generalmente transitorios y asintomáticos. La cicloplejía es de utilidad en estos casos. La influencia de la tensión muscular en la topografía corneal se considera un factor patogénico esencial.
Caso Clínico: Varón de 36 años con exotropía desde los 14 años, sin antecedentes médicos ni quirúrgicos de interés. Al inicio, presenta una mejor agudeza visual corregida (MAVC) 20/20 en ambos ojos (AO) y una refracción sin cicloplejia de +0.25 (0.25*170º) en su ojo derecho (OD) y +0.75 (-4.25*170º) en su ojo izquierdo (OI). La exploración de polo anterior, fundoscopía y motilidad ocular extrínseca es normal AO. La prueba de oclusión prismada cuantifica valores estables de -70 dioptrías prismáticas (dP) con dominancia del OD. Se realiza retroinserción de 7 mm de músculos rectos laterales (RL) AO y resección de 7mm de músculo recto medio OI. Al mes, se objetiva ortotropia y una autorefracción sin cicloplejía de -5.50 (-0.75*170º) OD y -2.25 (-5.00*170º) OI, que mejora con cicloplejia a +0.00 (-0.75*2) OD y +0.25 (-4.50*170) OI. Cuatro meses postquirúrgicos, se mantiene el cambio miópico. A los 5 meses postquirúrgicos, la MAVC es 20/20 AO en ortotropia y la autorefracción sin cicloplejia es +0.25 (-0.50*170º) OD y +0.50 (-4.25*170º) OI. Asimismo, se normaliza la topografía corneal con Galilei objetivando una disminución de la potencia corneal y un aumento del aplanamiento corneal AO.
Conclusión: Los cambios refractivos secundarios a la cirugía de estrabismo acontecen frecuentemente en desviaciones de gran ángulo. Son generalmente transitorios y asintomáticos. La cicloplejía es de utilidad en estos casos. La influencia de la tensión muscular en la topografía corneal se considera un factor patogénico esencial.
Resultados en transposiciones musculares sin desinserción con fijación escleral posterior
Dres.: Javier García-Montesinos Gutiérrez, Verónica Sánchez Gutiérrez, José M.ª Rodríguez Sánchez, Ane Pérez Sarriegui
Madrid
Dres.: Javier García-Montesinos Gutiérrez, Verónica Sánchez Gutiérrez, José M.ª Rodríguez Sánchez, Ane Pérez Sarriegui
Madrid
Introducción: La transposición muscular es un procedimiento reservado para parálisis oculomotoras con mala función muscular. Las técnicas de transposición completa son más efectivas, pero aumentan el riesgo de isquemia del segmento anterior, sobre todo, en pacientes ancianos, con patología vascular o ya intervenidos. Por ello, en estos casos son preferibles técnicas que preserven la vasculatura del segmento anterior, como las transposiciones sin desinserción muscular. Foster sugirió la fijación escleral del musculo transpuesto con una sutura no reabsorbible para aumentar la efectividad en las transposiciones completas. Sin embargo, hasta nuestro conocimiento, esta modificación no ha sido evaluada en técnicas sin desinserción muscular.
Métodos: Revisión retrospectiva de 6 casos de parálisis oculomotoras previamente intervenidas, con desviación residual, en los que se realiza transposición sin desinserción (técnica de Jensen) con modificación de Foster. Se valoraron el torticolis, limitación, desviación, complicaciones y tratamientos pre y post cirugía.
Resultados: La media de cirugías previas fue de 1.5 (rango 1-3) y de botox previos 1 (rango 1-2). La limitación preoperatoria media fue 3.5 (±0.54)+/4+ y la desviación preoperatoria media de 36.16 (±19.85) dioptrías prismáticas (DP). El seguimiento medio fue de 3 (±2.28) meses. Tras la cirugía la limitación fue de 2.41 (±0.49)+/4+ (p=0.02) y la desviación de 5.5 (±8.5) DP (p=0.02). En los cuatro pacientes que presentaban torticolis preoperatorio, éste mejoró o se corrigió. En cinco pacientes se consiguió un alineamiento ocular satisfactorio. Dos pacientes requirieron 1 inyección de botox en recto medio. No se registró ninguna complicación durante el seguimiento.
Conclusiones: La transposición de Jesen con modificación de Foster podría ser una técnica segura y eficaz para el tratamiento de las parálisis oculomotoras en pacientes previamente intervenidos.
Métodos: Revisión retrospectiva de 6 casos de parálisis oculomotoras previamente intervenidas, con desviación residual, en los que se realiza transposición sin desinserción (técnica de Jensen) con modificación de Foster. Se valoraron el torticolis, limitación, desviación, complicaciones y tratamientos pre y post cirugía.
Resultados: La media de cirugías previas fue de 1.5 (rango 1-3) y de botox previos 1 (rango 1-2). La limitación preoperatoria media fue 3.5 (±0.54)+/4+ y la desviación preoperatoria media de 36.16 (±19.85) dioptrías prismáticas (DP). El seguimiento medio fue de 3 (±2.28) meses. Tras la cirugía la limitación fue de 2.41 (±0.49)+/4+ (p=0.02) y la desviación de 5.5 (±8.5) DP (p=0.02). En los cuatro pacientes que presentaban torticolis preoperatorio, éste mejoró o se corrigió. En cinco pacientes se consiguió un alineamiento ocular satisfactorio. Dos pacientes requirieron 1 inyección de botox en recto medio. No se registró ninguna complicación durante el seguimiento.
Conclusiones: La transposición de Jesen con modificación de Foster podría ser una técnica segura y eficaz para el tratamiento de las parálisis oculomotoras en pacientes previamente intervenidos.
Miopexia retroequatorial del recto superior: su aplicación en diferentes formas de estrabismo
Dres.: Jorge Breda, Paulo Costa, Augusto Magalhaes
Portugal
Dres.: Jorge Breda, Paulo Costa, Augusto Magalhaes
Portugal
Introducción: La miopexia retroequatorial es una técnica cirúgica usada con el objetivo de debilitar la fuerza rotatoria de un músculo, siempre que un ojo es estimulado en el sentido de su campo de acción. Se utiliza en los rectos mediales como cirugía primaria de corrección de una endotropía, en desvíos convergentes de ángulo variable, en inconcomitancias lejos/cerca, en parálisis del VI par y en sindromas de bloqueo de nistagmos. Ha sido descrita su aplicación en el recto superior (RS) en casos de desvío vertical disociado o doble parálisis de los elevadores.
Objetivos: Evaluar la técnica en el RS en desvío vertical, asociado a formas de desvío horizontal, para mejoría estética o para anular a diplopía.
Material y Métodos: Ha sido aplicada en el RS de un ojo en ocho pacientes portadores de cuatro patologías. Uno con estrabismo restrictivo secundario a distiroidismo, tres con parálisis del III par, uno con estrabismo divergente consecutivo y DVD, y tres tenían estrabismo convergente y DVD. En todos los casos la cirugía ha sido efectuada sin desinserción muscular y ejecutada con una doble sutura no reabsorbible en 2/3 del ancho del musculo y aplicada a 15 mm de su inserción. Ha recorrido más de un año entre el procedimiento y su evaluación final.
Resultados: El enfermo con distiroidismo y desvío vertical tenía síntomas de diplopía vertical, que ha quedado anulada. De los tres enfermos con parálisis del III par, el desvío quedo anulado en el que tenía apenas envolvimiento del ramo superior. En los restantes, ha quedado estéticamente mejorado. El enfermo con estrabismo consecutivo y DVD quedo con el desvío vertical neutralizado. DVD ha sido también anulada en los restantes tres pacientes, en que estaba asociado a desvío convergente.
Conclusión: Como la resección/retroinsercción muscular implica corte de las arterias ciliares con posible isquemia se debe ponderar la miopexia siempre que es necesario actuar en varios músculos.
Objetivos: Evaluar la técnica en el RS en desvío vertical, asociado a formas de desvío horizontal, para mejoría estética o para anular a diplopía.
Material y Métodos: Ha sido aplicada en el RS de un ojo en ocho pacientes portadores de cuatro patologías. Uno con estrabismo restrictivo secundario a distiroidismo, tres con parálisis del III par, uno con estrabismo divergente consecutivo y DVD, y tres tenían estrabismo convergente y DVD. En todos los casos la cirugía ha sido efectuada sin desinserción muscular y ejecutada con una doble sutura no reabsorbible en 2/3 del ancho del musculo y aplicada a 15 mm de su inserción. Ha recorrido más de un año entre el procedimiento y su evaluación final.
Resultados: El enfermo con distiroidismo y desvío vertical tenía síntomas de diplopía vertical, que ha quedado anulada. De los tres enfermos con parálisis del III par, el desvío quedo anulado en el que tenía apenas envolvimiento del ramo superior. En los restantes, ha quedado estéticamente mejorado. El enfermo con estrabismo consecutivo y DVD quedo con el desvío vertical neutralizado. DVD ha sido también anulada en los restantes tres pacientes, en que estaba asociado a desvío convergente.
Conclusión: Como la resección/retroinsercción muscular implica corte de las arterias ciliares con posible isquemia se debe ponderar la miopexia siempre que es necesario actuar en varios músculos.
Aplicaciones clínicas de la toxina botulínica en el estrabismo: estudio de las inyecciones realizadas durante 1 año en un hospital general
Dres.: Elena Jarrín Hernández, Laura Yebra González, Esther Arranz Márquez, Javier García Gil de Bernabé
Madrid
Dres.: Elena Jarrín Hernández, Laura Yebra González, Esther Arranz Márquez, Javier García Gil de Bernabé
Madrid
Objetivo: Analizar las indicaciones de inyección de toxina botulínica en la consulta de Estrabología, el resultado y la evolución posterior.
Método: Estudio retrospectivo de los 28 pacientes (17 adultos y 11 niños) con estrabismo tratados con toxina botulínica en 2013 en el Hospital Rey Juan Carlos (Móstoles).
Resultados: La edad media del grupo de niños fue 4.42 años (s=3.48). Seis eran niñas (54,5%). Recibieron 1.45 inyecciones de mediade 1 a 4), 72.7% una única inyección. La mayoría (9, 81.8%) fueron tratados por endotropia: congénita (2), parcialmente acomodativa (6) y asociada a nistagmus (1); un estrabismo divergente intermitente y un nistagmus aislado. Dos casos (18,2%) precisaron cirugía. Las diferencias entre tropia y foria pre y postintervención fueron estadísticamente significativas, así como las diferencias entre el tortícolis pre y post. En 4 casos se pudo detectar mejoría en la estereoagudeza. La edad media de los adultos fue 58,71 años (s=18,07). Once eran varones (64%). Recibieron una media de 1,59 inyecciones. La mayoría (8, 47,1%) presentaban endotropia (1 congénita, 6 paresias VI, una descompensación postfaco), 4 (26,5%) exotropia, (una paresia del III, 2 estrabismos divergentes intermitentes y una exotropia consecutiva), 4 (26,5%) hipertropia (una asociada a nistagmus y 3 paresias del IV) y uno (5,9%) nistagmus aislado. Cinco (29,4%) tuvieron que ser intervenidos de estrabismo. Ocho pacientes (49,1%) presentaban diplopía en PPM. Se corrigió en 6 casos con toxina y dos precisaron cirugía. Siete (41,2%) presentaban tortícolis, que mejoró en todos los casos. No apreciamos diferencias estadísticamente significativas en las tropias y forias pre-post toxina.
Conclusiones: La toxina botulínica es un fármaco muy útil para el tratamiento del estrabismo, con mejores resultados sensoriales y motores en los niños, pero eficaz como tratamiento sintomático en adultos.
Método: Estudio retrospectivo de los 28 pacientes (17 adultos y 11 niños) con estrabismo tratados con toxina botulínica en 2013 en el Hospital Rey Juan Carlos (Móstoles).
Resultados: La edad media del grupo de niños fue 4.42 años (s=3.48). Seis eran niñas (54,5%). Recibieron 1.45 inyecciones de mediade 1 a 4), 72.7% una única inyección. La mayoría (9, 81.8%) fueron tratados por endotropia: congénita (2), parcialmente acomodativa (6) y asociada a nistagmus (1); un estrabismo divergente intermitente y un nistagmus aislado. Dos casos (18,2%) precisaron cirugía. Las diferencias entre tropia y foria pre y postintervención fueron estadísticamente significativas, así como las diferencias entre el tortícolis pre y post. En 4 casos se pudo detectar mejoría en la estereoagudeza. La edad media de los adultos fue 58,71 años (s=18,07). Once eran varones (64%). Recibieron una media de 1,59 inyecciones. La mayoría (8, 47,1%) presentaban endotropia (1 congénita, 6 paresias VI, una descompensación postfaco), 4 (26,5%) exotropia, (una paresia del III, 2 estrabismos divergentes intermitentes y una exotropia consecutiva), 4 (26,5%) hipertropia (una asociada a nistagmus y 3 paresias del IV) y uno (5,9%) nistagmus aislado. Cinco (29,4%) tuvieron que ser intervenidos de estrabismo. Ocho pacientes (49,1%) presentaban diplopía en PPM. Se corrigió en 6 casos con toxina y dos precisaron cirugía. Siete (41,2%) presentaban tortícolis, que mejoró en todos los casos. No apreciamos diferencias estadísticamente significativas en las tropias y forias pre-post toxina.
Conclusiones: La toxina botulínica es un fármaco muy útil para el tratamiento del estrabismo, con mejores resultados sensoriales y motores en los niños, pero eficaz como tratamiento sintomático en adultos.
Inyección de toxina botulínica en endotropía de pequeña magnitud
Dras.: Rosario Gómez de Liaño Sánchez, Rut González Jiménez, Elena Piedrahita, Pilar Zuloaga
Madrid
Dras.: Rosario Gómez de Liaño Sánchez, Rut González Jiménez, Elena Piedrahita, Pilar Zuloaga
Madrid
Analizar el efecto corrector de la inyección de toxina botulínica (TB) en pacientes con estrabismo de pequeña magnitud y compararlo con los resultados de la cirugía (Cx).
Material y Métodos: Estudio retrospectivo una serie consecutiva de pacientes con endotropía adquirida iniciada entre 1 y 4 años y tratados por debajo de la edad de 6. Fueron 243 niños. La desviación inicial en el grupo de TB era 26,21 +- 12,64 PD y de 33,73 +-11,15 en el grupo de Cx. 103 pacientes fueron tratados con TB (22 de ellos en dos ocasiones) 117 pacientes operados (5 entre 2 y 4 veces) y 23 pacientes con TB y Cx.
Resultados: La tasa de éxito motor no difirió significativamente entre los dos tipos de técnicas en pacientes con desviaciones de hasta 20 dp. (TB 81,8%, Cx 84,2%) o hasta 25 dp. (TB 74,5% vs. Cx 83,92%) mientras que en pacientes por encima de 25 dp. La Cx ofreció una tasa superior de alineamiento motor (Fisher 0,069). Tampoco encontramos diferencias significativas en los resultados sensoriales en pacientes por debajo de 25 dp. El análisis univariante y multivariante demostró diferencias significativas de buen pronóstico en: la menor magnitud del estrabismo (TB, P<0.084), ET parcialmente acomodativa TB: OR1,281 P
Conclusiones: La utilización de la TB en la endotropía adquirida hasta 20 a 25 dp supone una alternativa a la cirugía del estrabismo ofreciendo semejantes resultados.
Material y Métodos: Estudio retrospectivo una serie consecutiva de pacientes con endotropía adquirida iniciada entre 1 y 4 años y tratados por debajo de la edad de 6. Fueron 243 niños. La desviación inicial en el grupo de TB era 26,21 +- 12,64 PD y de 33,73 +-11,15 en el grupo de Cx. 103 pacientes fueron tratados con TB (22 de ellos en dos ocasiones) 117 pacientes operados (5 entre 2 y 4 veces) y 23 pacientes con TB y Cx.
Resultados: La tasa de éxito motor no difirió significativamente entre los dos tipos de técnicas en pacientes con desviaciones de hasta 20 dp. (TB 81,8%, Cx 84,2%) o hasta 25 dp. (TB 74,5% vs. Cx 83,92%) mientras que en pacientes por encima de 25 dp. La Cx ofreció una tasa superior de alineamiento motor (Fisher 0,069). Tampoco encontramos diferencias significativas en los resultados sensoriales en pacientes por debajo de 25 dp. El análisis univariante y multivariante demostró diferencias significativas de buen pronóstico en: la menor magnitud del estrabismo (TB, P<0.084), ET parcialmente acomodativa TB: OR1,281 P
Conclusiones: La utilización de la TB en la endotropía adquirida hasta 20 a 25 dp supone una alternativa a la cirugía del estrabismo ofreciendo semejantes resultados.
¿Qué es un estrabismo dinámico?
Dr.: José Perea García
Toledo
Dr.: José Perea García
Toledo
Objetivo: Exponer el concepto dinámico del estrabismo demostrando, a través de casos clínicos, situaciones que no pueden valorarse por métodos convencionales de exploración de la motilidad ocular.
Método: En la búsqueda dinámica se han estudiado 1000 pacientes (normales y con muy variadas patologías). El procedimiento de estudio utilizado ha sido la video-oculografía con el dispositivo VOG Perea.
Resultados: El resultado lleva al concepto de “dinámico”, entendido por primera vez por Curt Cüppers en el año 1973.
Conclusiones: La vídeo-oculografía es imprescindible para conocer la intimidad de los movimientos oculares, tanto en fisiología como en patología. En este trabajo no existe interés comercial ni se ha recibido apoyo económico alguno.
Método: En la búsqueda dinámica se han estudiado 1000 pacientes (normales y con muy variadas patologías). El procedimiento de estudio utilizado ha sido la video-oculografía con el dispositivo VOG Perea.
Resultados: El resultado lleva al concepto de “dinámico”, entendido por primera vez por Curt Cüppers en el año 1973.
Conclusiones: La vídeo-oculografía es imprescindible para conocer la intimidad de los movimientos oculares, tanto en fisiología como en patología. En este trabajo no existe interés comercial ni se ha recibido apoyo económico alguno.
Movimientos sacádicos en adolescentes con enfermedad mental de alto riesgo: estudio preliminar
Dres.: Joan Prat Bartomeu, Lluis San, Jordina Tor, Laia Prat
Barcelona
Dres.: Joan Prat Bartomeu, Lluis San, Jordina Tor, Laia Prat
Barcelona
Objetivo: La alteración de los movimientos oculares de seguimiento lento (SPEM) ha demostrado ser un biomarcador en la esquizofrenia. Estudiamos dicha alteración en adolescentes con enfermedad mental de alto riesgo (EMAR).
Material y Métodos: Estudio prospectivo casos control. La muestra consiste en 5 adolescentes con EMAR, 8 progenitores y 5 adolescentes control. Se presenta un test de 0,5 grados de arco en movimiento en una pantalla de 23 pulgadas a velocidades de 5 y 15 grados por segundo. Las trayectorias son un triángulo, una de tipo sinusoide y unos movimientos tipo pétalos de flor. El paciente se explora a 60 cm mediante el videooculógrafo gazelab a 20 fps. La duración de la prueba es de 2 minutos. Se contabiliza el número de sacádicos durante la exploración considerando positiva una amplitud mayor de 30 grados/seg.
Resultados: El grupo control obtuvo un resultado entre 2 y 6 sacádicos/min, 4 de los 5 EMAR obtuvieron entre 10 y 37 sac/min, 1 de las 4 madres marcó 10 sac/min y los 3 padres también dieron positivo entre 15 y 26 sac/min. No hubo diferencias en el recuento de sacádicos según la velocidad del test y el trayecto utilizados.
Conclusiones: La alteración de los SPEM parece ser un biomarcador útil en la predicción de futuros trastornos psicóticos en adolescentes de riesgo. Es necesario continuar los estudios con muestras de mayor tamaño para confirmar dichas sospechas.
Material y Métodos: Estudio prospectivo casos control. La muestra consiste en 5 adolescentes con EMAR, 8 progenitores y 5 adolescentes control. Se presenta un test de 0,5 grados de arco en movimiento en una pantalla de 23 pulgadas a velocidades de 5 y 15 grados por segundo. Las trayectorias son un triángulo, una de tipo sinusoide y unos movimientos tipo pétalos de flor. El paciente se explora a 60 cm mediante el videooculógrafo gazelab a 20 fps. La duración de la prueba es de 2 minutos. Se contabiliza el número de sacádicos durante la exploración considerando positiva una amplitud mayor de 30 grados/seg.
Resultados: El grupo control obtuvo un resultado entre 2 y 6 sacádicos/min, 4 de los 5 EMAR obtuvieron entre 10 y 37 sac/min, 1 de las 4 madres marcó 10 sac/min y los 3 padres también dieron positivo entre 15 y 26 sac/min. No hubo diferencias en el recuento de sacádicos según la velocidad del test y el trayecto utilizados.
Conclusiones: La alteración de los SPEM parece ser un biomarcador útil en la predicción de futuros trastornos psicóticos en adolescentes de riesgo. Es necesario continuar los estudios con muestras de mayor tamaño para confirmar dichas sospechas.
Estudio retrospectivo de cirugía pediátrica de estrabismo en un año
Dres.: Celia Martín Villaescusa, Mercedes Rivera Zori, Belén Gutiérrez Partida, Diego Puertas Bordallo
Madrid
Dres.: Celia Martín Villaescusa, Mercedes Rivera Zori, Belén Gutiérrez Partida, Diego Puertas Bordallo
Madrid
Objetivo: Analizar las cirugías de estrabismo en pacientes pediátricos intervenidos en un año.
Método: Estudio descriptivo retrospectivo. Se incluyeron 156 pacientes registrados en nuestro centro en el año 2013. Se analizaron datos demográficos, tipo de estrabismo, tipo de cirugía, reintervenciones y complicaciones.
Resultados: el 51,3% fueron varones y el 48,7% restante mujeres. La edad de la cirugía estaba comprendida entre el año de edad y los 18 años (con una media de 9,08±4,02), siendo los 5 años lo más frecuente (10,9%), seguido de los 6 años (10,3%) y los 10 años (10,3%). Los distintos diagnósticos recogidos fueron estrabismo convergente, estrabismo divergente, hipertropia, DVD, parálisis IV par, parálisis III par, parálisis VI par, síndrome Duane, síndrome Brown, nistagmus. El más frecuente fue el estrabismo convergente con 90 pacientes (57,3%). Las cirugías realizadas fueron, por orden de frecuencia, cirugía clásica (retroinserción recto medio y resección recto lateral) 28%, retroinserción rectos medios 26,1%, técnica «APT» 17,2%, retroinserción recto superior 8,9%, retroinserción rectos laterales 8,3%, resección recto medio y retroinserción recto lateral 5,7%.
Conclusiones: El estrabismo es una patología que con frecuencia requiere cirugía en una o varias ocasiones. Son múltiples las posibles técnicas quirúrgicas. Presentamos nuestra muestra anual de cirugías.
Método: Estudio descriptivo retrospectivo. Se incluyeron 156 pacientes registrados en nuestro centro en el año 2013. Se analizaron datos demográficos, tipo de estrabismo, tipo de cirugía, reintervenciones y complicaciones.
Resultados: el 51,3% fueron varones y el 48,7% restante mujeres. La edad de la cirugía estaba comprendida entre el año de edad y los 18 años (con una media de 9,08±4,02), siendo los 5 años lo más frecuente (10,9%), seguido de los 6 años (10,3%) y los 10 años (10,3%). Los distintos diagnósticos recogidos fueron estrabismo convergente, estrabismo divergente, hipertropia, DVD, parálisis IV par, parálisis III par, parálisis VI par, síndrome Duane, síndrome Brown, nistagmus. El más frecuente fue el estrabismo convergente con 90 pacientes (57,3%). Las cirugías realizadas fueron, por orden de frecuencia, cirugía clásica (retroinserción recto medio y resección recto lateral) 28%, retroinserción rectos medios 26,1%, técnica «APT» 17,2%, retroinserción recto superior 8,9%, retroinserción rectos laterales 8,3%, resección recto medio y retroinserción recto lateral 5,7%.
Conclusiones: El estrabismo es una patología que con frecuencia requiere cirugía en una o varias ocasiones. Son múltiples las posibles técnicas quirúrgicas. Presentamos nuestra muestra anual de cirugías.
Diferencias entre las incisiones conjuntivales en la cirugía de estrabismo horizontal: minimally invasive strabismus surgery (MISS) versus incisiones clásicas
Dras.: M.ª Pilar Merino Sanz, Pilar Gómez de Liaño Sánchez, Irene Blanco Domínguez
Madrid
Dras.: M.ª Pilar Merino Sanz, Pilar Gómez de Liaño Sánchez, Irene Blanco Domínguez
Madrid
Objetivo: Describir los resultados postoperatorios entre las incisiones conjuntivales clásicas y la MISS (minimally invasive strabismus surgery) en cirugía de estrabismo.
Material y Método: Estudio prospectivo de pacientes menores de 14 años con estrabismo horizontal. Se incluyeron aquellos operados con cirugía simétrica sobre RM o RL de AO. En un ojo se realizó cirugía con MISS y en el contralateral otra incisión conjuntival: fornix o limbar. Se evaluaron AV pre y postoperatoria, hiperemia y edema conjuntival 1º día y 7-10 días de la cirugía, y tiempo quirúrgico (TQ). Todas las cirugías fueron realizadas por dos cirujanos después de una curva de aprendizaje de 4 años en la técnica MISS.
Resultados: 11 casos (7 M) de edad media: 6,45±3,35 años fueron operados en 11 meses con diagnóstico de estrabismo horizontal (XTI, ETR, ETI+V, ETC+V, ETI, XT, XTC). En 6 se operaron ambos RM, y en 5 los RL. En 10 casos se realizó recesión (media: 4,5 mm) y en 1 plegamiento (7 mm). En los 11 se utilizó MISS OD, y en OI incisión fornix en 10, y limbar en 1. La AV preoperatoria fue 0,7 en el grupo MISS, vs 0,74 en el no MISS (P= 0,032). La AV postoperatoria del 1º día fue 0,75 en el MISS vs 0,66 en el no MISS (P= 0,013). La diferencia entre la hiperemia conjuntival no fue estadísticamente significativa el 1º día, pero si a la semana a favor de la MISS (P= 0,04). No hubo diferencias estadísticamente significativas respecto al TQ.
Conclusiones: El TQ en MISS disminuye con la experiencia. La hiperemia, y el edema conjuntival son < en MISS al 1º día, y a la 1ª semana. La AV 1º día postoperatorio mejora en MISS.
Material y Método: Estudio prospectivo de pacientes menores de 14 años con estrabismo horizontal. Se incluyeron aquellos operados con cirugía simétrica sobre RM o RL de AO. En un ojo se realizó cirugía con MISS y en el contralateral otra incisión conjuntival: fornix o limbar. Se evaluaron AV pre y postoperatoria, hiperemia y edema conjuntival 1º día y 7-10 días de la cirugía, y tiempo quirúrgico (TQ). Todas las cirugías fueron realizadas por dos cirujanos después de una curva de aprendizaje de 4 años en la técnica MISS.
Resultados: 11 casos (7 M) de edad media: 6,45±3,35 años fueron operados en 11 meses con diagnóstico de estrabismo horizontal (XTI, ETR, ETI+V, ETC+V, ETI, XT, XTC). En 6 se operaron ambos RM, y en 5 los RL. En 10 casos se realizó recesión (media: 4,5 mm) y en 1 plegamiento (7 mm). En los 11 se utilizó MISS OD, y en OI incisión fornix en 10, y limbar en 1. La AV preoperatoria fue 0,7 en el grupo MISS, vs 0,74 en el no MISS (P= 0,032). La AV postoperatoria del 1º día fue 0,75 en el MISS vs 0,66 en el no MISS (P= 0,013). La diferencia entre la hiperemia conjuntival no fue estadísticamente significativa el 1º día, pero si a la semana a favor de la MISS (P= 0,04). No hubo diferencias estadísticamente significativas respecto al TQ.
Conclusiones: El TQ en MISS disminuye con la experiencia. La hiperemia, y el edema conjuntival son < en MISS al 1º día, y a la 1ª semana. La AV 1º día postoperatorio mejora en MISS.
Cierre conjuntival en cirugía de estrabismo con Tissucol
Dra.: Marta Galdós Iztueta
Vizcaya
Dra.: Marta Galdós Iztueta
Vizcaya
Objetivo: Estudio prospectivo para evaluar la eficacia y la recuperación postoperatoria subjetiva y objetiva en una serie de 20 pacientes con estrabismos verticales, horizontales y oblicuos.
Material Métodos: Se realizó el cierre conjuntival mediante tissucol en lugar de sutura en 35 músculos intervenidos de 20 pacientes (9 adultos y 11 niños). La cirugía se realizó base limbo en la mayoría de los casos, a excepción de 4 casos en que se realizó incisión en fornix (4 músculos oblicuos inferiores). Los músculos intervenidos fueron: 3 rectos superiores (2 retroinserciones y 1 resección), 2 rectos inferiores (2 retroinserciones), 15 rectos medios (12 retroinserciones y 3 resecciones), 10 rectos laterales (9 retroinserciones, 1 resección), 4 oblicuos inferiores y 1 oblicuo superior. Se realizaron 2 visitas postoperatorias el primer mes.
Resultados: El tissucol selló eficazmente la incisión quirúrgica en 33 de los 35 músculos operados, precisándo resutura un paciente intervenido de ambos músculos oblicuos. En las 31 cirugías realizadas base limbo presentó un éxito en cierre del tapete conjuntival del 100%, con reducción significativa del roce ocasionado por los puntos, presentando fotofocia y lagrimeo leve en los primera semana postquirúrgica. Además en 1 mes de seguimiento, la cicatriz conjuntival presenta un resultado anatómico muy bueno. Sin embargo, en las primeras 2 semanas se observaron dehiscencias de la conjuntiva de varios mm en 5 pacientes (2 adultos con enfermedad de Graves; 1 con parálisis de III pc y cirugía amplia vertical y 2 niños en los que la conjuntiva se retraía sobre la tenon subyacente) pero en todos los casos la conjuntiva epitelizó correctamente sin precisar resutura.
Discusión: El cierre de la incisión limbica conjuntival con tissucol en la cirugía de estrabismo de músculos rectos (horizontales y verticales) es una alternativa eficaz, que disminuye las molestias postoperatorias de la sutura, y presenta un buen resultado anatómico. Las dehiscencias conjuntivales aparecen con mayor frecuencia, no obstante no modifican la correcta epitelización conjuntival a largo plazo y pueden evitarse con exéresis de la tenon subconjuntival a nivel del tapete conjuntival. Las incisiones en fornix para cirugía de músculos oblicuos inferiores sin embargo, son susceptibles de abrirse en el postoperatorio, por lo que en esta situación es preferible el cierre de la incisión conjuntival con sutura.
Material Métodos: Se realizó el cierre conjuntival mediante tissucol en lugar de sutura en 35 músculos intervenidos de 20 pacientes (9 adultos y 11 niños). La cirugía se realizó base limbo en la mayoría de los casos, a excepción de 4 casos en que se realizó incisión en fornix (4 músculos oblicuos inferiores). Los músculos intervenidos fueron: 3 rectos superiores (2 retroinserciones y 1 resección), 2 rectos inferiores (2 retroinserciones), 15 rectos medios (12 retroinserciones y 3 resecciones), 10 rectos laterales (9 retroinserciones, 1 resección), 4 oblicuos inferiores y 1 oblicuo superior. Se realizaron 2 visitas postoperatorias el primer mes.
Resultados: El tissucol selló eficazmente la incisión quirúrgica en 33 de los 35 músculos operados, precisándo resutura un paciente intervenido de ambos músculos oblicuos. En las 31 cirugías realizadas base limbo presentó un éxito en cierre del tapete conjuntival del 100%, con reducción significativa del roce ocasionado por los puntos, presentando fotofocia y lagrimeo leve en los primera semana postquirúrgica. Además en 1 mes de seguimiento, la cicatriz conjuntival presenta un resultado anatómico muy bueno. Sin embargo, en las primeras 2 semanas se observaron dehiscencias de la conjuntiva de varios mm en 5 pacientes (2 adultos con enfermedad de Graves; 1 con parálisis de III pc y cirugía amplia vertical y 2 niños en los que la conjuntiva se retraía sobre la tenon subyacente) pero en todos los casos la conjuntiva epitelizó correctamente sin precisar resutura.
Discusión: El cierre de la incisión limbica conjuntival con tissucol en la cirugía de estrabismo de músculos rectos (horizontales y verticales) es una alternativa eficaz, que disminuye las molestias postoperatorias de la sutura, y presenta un buen resultado anatómico. Las dehiscencias conjuntivales aparecen con mayor frecuencia, no obstante no modifican la correcta epitelización conjuntival a largo plazo y pueden evitarse con exéresis de la tenon subconjuntival a nivel del tapete conjuntival. Las incisiones en fornix para cirugía de músculos oblicuos inferiores sin embargo, son susceptibles de abrirse en el postoperatorio, por lo que en esta situación es preferible el cierre de la incisión conjuntival con sutura.
Cirugía de estrabismo minimamente invasiva (MISS) en desviaciones horizontales: nuestra experiencia
Dras.: Irene Blanco Domínguez, M.ª Pilar Merino Sanz, Pilar Gómez de Liaño Sánchez, Gema Franco Iglesias
Madrid
Dras.: Irene Blanco Domínguez, M.ª Pilar Merino Sanz, Pilar Gómez de Liaño Sánchez, Gema Franco Iglesias
Madrid
Objetivo: Estudiar los resultados de la cirugía de estrabismo mínimamente invasiva (MISS) en las desviaciones horizontales.
Método: Se presenta la primera serie de casos consecutivos intervenidos en nuestro hospital mediante MISS desde Febrero de 2010 a Marzo de 2014.
Resultados: Se incluyeron 40 ojos de 26 pacientes (edad media: 7,77 años (DS:4,96); 34,61%: hombres). En total se intervinieron 43 músculos, 20 rectos medios y 23 rectos laterales, realizándose 28 retroinserciones (rango:3-7,5mm), 6 resecciones (rango: 6-7mm) y 9 plegamientos (rango:6,5-7,5mm). Se encontraron diferencias estadísticamente significativas (p0,05) en la agudeza visual al día siguiente de la cirugía y a los 6 meses. Un 29,27% de los ojos presentó hiperemia leve, un 48,78% moderada y un 21,95% severa al primer día de postoperatorio, pasando el cuarto día al 63,41%, 31,70% y 4,87% respectivamente. Como complicaciones se presentaron 4 casos de sangrado conjuntival intraoperatorio,1 caso de penetración escleral y 2 casos de prolapso de Tenon. En tan solo un caso hubo que reconvertir a otra incisión por mala visualización. El rango del tiempo quirúrgico osciló entre 30 y 15 minutos por músculo.
Conclusiones: La técnica MISS ha obtenido buenos resultados en la cirugía del estrabismo horizontal. La inflamación conjuntival es leve en la mayoría de los casos a los 4 días de la cirugía. La AV se mantiene estable y el tiempo quirúrgico va disminuyendo una vez superada la curva de aprendizaje.
Método: Se presenta la primera serie de casos consecutivos intervenidos en nuestro hospital mediante MISS desde Febrero de 2010 a Marzo de 2014.
Resultados: Se incluyeron 40 ojos de 26 pacientes (edad media: 7,77 años (DS:4,96); 34,61%: hombres). En total se intervinieron 43 músculos, 20 rectos medios y 23 rectos laterales, realizándose 28 retroinserciones (rango:3-7,5mm), 6 resecciones (rango: 6-7mm) y 9 plegamientos (rango:6,5-7,5mm). Se encontraron diferencias estadísticamente significativas (p0,05) en la agudeza visual al día siguiente de la cirugía y a los 6 meses. Un 29,27% de los ojos presentó hiperemia leve, un 48,78% moderada y un 21,95% severa al primer día de postoperatorio, pasando el cuarto día al 63,41%, 31,70% y 4,87% respectivamente. Como complicaciones se presentaron 4 casos de sangrado conjuntival intraoperatorio,1 caso de penetración escleral y 2 casos de prolapso de Tenon. En tan solo un caso hubo que reconvertir a otra incisión por mala visualización. El rango del tiempo quirúrgico osciló entre 30 y 15 minutos por músculo.
Conclusiones: La técnica MISS ha obtenido buenos resultados en la cirugía del estrabismo horizontal. La inflamación conjuntival es leve en la mayoría de los casos a los 4 días de la cirugía. La AV se mantiene estable y el tiempo quirúrgico va disminuyendo una vez superada la curva de aprendizaje.
Tratamiento quirúrgico rehabilitador en el estrabismo de la orbitopatía tiroidea
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, José Alberto Reche Sainz, Raquel Lapuente Monjas, Javier San Román Llorens
Madrid
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, José Alberto Reche Sainz, Raquel Lapuente Monjas, Javier San Román Llorens
Madrid
Introducción: La orbitopatía tiroidea es una enfermedad autoinmune con diana selectiva en la grasa y musculatura extraocular que produce una importante afectación en la calidad de vida de los pacientes. Actualmente su tratamiento presenta un alto grado de complejidad que requiere especialización por parte de los servicios en su abordaje.
Material y Métodos: Estudio descriptivo transversal de tipo serie de casos. La muestra se compoen de 20 pacientes con orbitopatía tiroidea (15 mujeres) con edad media 56 años y seguimiento medio de 4 años. Se estudia el efecto del tratamiento rehabilitador global (descompresión, cirugía de músculos extraoculares y cirugía palpebral) en el alineamiento ocular final. Un 80% presentan diplopia inicial, tras el tratamiento quirúrgico, con toxina botulínica o con prismas sólo un 10% presentan falta de alineamiento ocular satisfactorio final. Nueve pacientes se sometieron a descompresión orbitaria, ésta indujo diplopia iatrogénica en tres de ellos (33,3%). Trece pacientes (65%) fueron sometidos a intervención sobre la musculatura extraocular con buen alineamiento ocular en posición primaria en todos ellos. Cuatro pacientes (20%) requieren una gafa prismada para neutralizar la diplopia. La satisfacción subjetiva tras el tratamiento rehabilitador fue muy alta.
Conclusiones: La orbitopatía tiroidea es una enfermedad con diana en tejidos orbitarios que requiere en muchos casos un tratamiento quirúrgico y médico complejo, con mútiples intervenciones y una alta coordinación entre los especialistas en estrabismo y oculoplástica. El tratamiento presenta una alta tasa de satisfacción y corrección objetiva de los síntomas en la mayoría de los pacientes.
Material y Métodos: Estudio descriptivo transversal de tipo serie de casos. La muestra se compoen de 20 pacientes con orbitopatía tiroidea (15 mujeres) con edad media 56 años y seguimiento medio de 4 años. Se estudia el efecto del tratamiento rehabilitador global (descompresión, cirugía de músculos extraoculares y cirugía palpebral) en el alineamiento ocular final. Un 80% presentan diplopia inicial, tras el tratamiento quirúrgico, con toxina botulínica o con prismas sólo un 10% presentan falta de alineamiento ocular satisfactorio final. Nueve pacientes se sometieron a descompresión orbitaria, ésta indujo diplopia iatrogénica en tres de ellos (33,3%). Trece pacientes (65%) fueron sometidos a intervención sobre la musculatura extraocular con buen alineamiento ocular en posición primaria en todos ellos. Cuatro pacientes (20%) requieren una gafa prismada para neutralizar la diplopia. La satisfacción subjetiva tras el tratamiento rehabilitador fue muy alta.
Conclusiones: La orbitopatía tiroidea es una enfermedad con diana en tejidos orbitarios que requiere en muchos casos un tratamiento quirúrgico y médico complejo, con mútiples intervenciones y una alta coordinación entre los especialistas en estrabismo y oculoplástica. El tratamiento presenta una alta tasa de satisfacción y corrección objetiva de los síntomas en la mayoría de los pacientes.
Patología ocular en los bufones de la corte de Felipe IV
Dres.: Enrique Santos Bueso, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, M.ª José Vinuesa Silva, Julián García Sánchez
Madrid
Dres.: Enrique Santos Bueso, Rosario Gómez de Liaño Sánchez, M.ª José Vinuesa Silva, Julián García Sánchez
Madrid
El pintor barroco Diego Rodríguez de Silva y Velázquez (Sevilla, 1599-Madrid, 1660), considerado una de las figuras más importantes de la historia de la pintura universal, fue pintor de cámara de la Corte de Felipe IV. Representó en numerosas obras a todos los miembros de la Corte, entre ellos los bufones que estaban integrados en la vida del Rey. Influenciado por Caravaggio y el tenebrismo, Velázquez realizó numerosos retratos de bufones que se encuentran actualmente en el Museo Nacional del Prado, como El Bufón «Calabacillas», Francisco Lezcano –El Niño de Vallecas-, El bufón don Diego de Acedo –el Primo-, don Sebastián de Morra, don Antonio el inglés, Pablo de Valladolid –Pablillos-, don Cristóbal de Castañeda y Pernía y el bufón llamado don Juan de Austria. La minusvalía de los bufones, paradójicamente les permitía vivir en los palacios, muy por encima de las posibilidades de la gran mayoría de los habitantes de la época al estar integrados en la vida de la Corte. Revisamos la posible patología ocular de los bufones de la Corte española haciendo un diagnóstico de presunción en función de las representaciones pictóricas.
Cirugía de cataratas pediátricas: estudio retrospectivo de nuestro servicio de oftalmología infantil (2000-2014)
Dres.: Belén Gutiérrez Partida, Ana Clement Corral, Isabel Valls Ferrán, Diego Puertas Bordallo
Madrid
Dres.: Belén Gutiérrez Partida, Ana Clement Corral, Isabel Valls Ferrán, Diego Puertas Bordallo
Madrid
Objetivo: Descripción de las características de las cataratas infantiles operadas en nuestro servicio.
Método: Estudio retrospectivo descriptivo. Se han incluido 130 pacientes (209 ojos) operados entre 2000 y 2014. Entre las variables analizadas se encuentran: motivo de consulta, edad de diagnóstico, asociación a enfermedades sistémicas, antecedentes familiares, tiempo de seguimiento, sexo, tipo de catarata (según edad de diagnóstico, morfología y uni o bilateralidad), agudeza visual, tiempo de seguimiento, técnica quirúrgica, implante de lente, tipo de lente, complicaciones intraoperatorias y post-quirúrgicas.
Resultados: El 41,4% de los pacientes operados presenta cataratas unilaterales y el 58.6% bilaterales. Se incluyen cataratas congénitas, infantiles,juveniles y secundarias. Los motivos de consulta principales fueron: leucocoria, baja agudeza visual y estrabismo. La media de edad al diagnóstico es de 27,60±33,60 meses. El tiempo de seguimiento es de 28±25,26 meses. El tipo de catarata más frecuente es la nuclear y difusa total en las bilaterales y la nuclear con componente posterior en las unilaterales. Existen al menos 6 variantes de técnicas quirúrgicas empleadas. El 50% de las cirugías fueron realizadas mediante técnica de microincisión con el sistema Accurus 23 g. Las complicaciones más frecuentes fueron la opacificación del eje visual, membranas inflamatorias, corectopias por bridas vítreas y sinequias posteriores. A más largo plazo el desarrollo de glaucoma en afáquicos toma un papel importante. Casi un 20% de los ojos necesitó reapertura quirúrgica del eje visual.
Conclusiones: En 14 años de cirugía de catarata en edad pediátrica, el desarrollo de la microincisión combinado al sistema de vitrectomía 23 g en los últimos años ha facilitado la cirugía de este tipo de catarata, siendo igual de importante e incluso más el seguimiento post-operatorio y rehabilitación visual.
Método: Estudio retrospectivo descriptivo. Se han incluido 130 pacientes (209 ojos) operados entre 2000 y 2014. Entre las variables analizadas se encuentran: motivo de consulta, edad de diagnóstico, asociación a enfermedades sistémicas, antecedentes familiares, tiempo de seguimiento, sexo, tipo de catarata (según edad de diagnóstico, morfología y uni o bilateralidad), agudeza visual, tiempo de seguimiento, técnica quirúrgica, implante de lente, tipo de lente, complicaciones intraoperatorias y post-quirúrgicas.
Resultados: El 41,4% de los pacientes operados presenta cataratas unilaterales y el 58.6% bilaterales. Se incluyen cataratas congénitas, infantiles,juveniles y secundarias. Los motivos de consulta principales fueron: leucocoria, baja agudeza visual y estrabismo. La media de edad al diagnóstico es de 27,60±33,60 meses. El tiempo de seguimiento es de 28±25,26 meses. El tipo de catarata más frecuente es la nuclear y difusa total en las bilaterales y la nuclear con componente posterior en las unilaterales. Existen al menos 6 variantes de técnicas quirúrgicas empleadas. El 50% de las cirugías fueron realizadas mediante técnica de microincisión con el sistema Accurus 23 g. Las complicaciones más frecuentes fueron la opacificación del eje visual, membranas inflamatorias, corectopias por bridas vítreas y sinequias posteriores. A más largo plazo el desarrollo de glaucoma en afáquicos toma un papel importante. Casi un 20% de los ojos necesitó reapertura quirúrgica del eje visual.
Conclusiones: En 14 años de cirugía de catarata en edad pediátrica, el desarrollo de la microincisión combinado al sistema de vitrectomía 23 g en los últimos años ha facilitado la cirugía de este tipo de catarata, siendo igual de importante e incluso más el seguimiento post-operatorio y rehabilitación visual.
Espiral de Tillaux: revisión de la inserción de los músculos rectos
Dres.: Gonzalo García de Oteyza Delbes, Andrea Laiseca García, Maddi Alonso Agesta
Barcelona
Dres.: Gonzalo García de Oteyza Delbes, Andrea Laiseca García, Maddi Alonso Agesta
Barcelona
La espiral de Tillaux fue descrita por primera vez por Paul Jules Tillaux, un médico parisino, en 1877. Desde entonces la espiral se ha convertido en un término clásico en el lenguaje estrabológico. Se han realizado algunas revisiones de los resultados obtenidos por Tillaux pero muy pocas en las últimas décadas. A partir de 250 ojos de cadáver, revisamos las distancias limbo-inserción de los músculos rectos y analizamos las diferencias encontradas respecto a otros trabajos.
Agenesia del cuerpo calloso asociada al síndrome de fibrosis congénita: 2 casos clínicos
Dras.: Elena Jurado González, Ana Wert Espinosa
Madrid
Dras.: Elena Jurado González, Ana Wert Espinosa
Madrid
Introducción: La agenesia del cuerpo calloso es una malformación cerebral que puede ocurrir aislada o asociada a otros síndromes congénitos tales como el de Aicardi. El cuerpo calloso conecta los hemisferios cerebrales y así facilita la integración sensorial y motora. El síndrome de fibrosis congénita (FCME) se caracteriza por una limitación severa de los movimientos oculares y fibrosis en grado variable de los músculos extraoculares. La clínica depende de los músculos afectados. Está causado por inervación aberrante de los mismos. Ambos pueden estar asociados a trastornos oculares o sistémicos como hipoplasia del nervio óptico, retraso mental o epilepsia.
Caso Clínico: Presentamos dos niños de 6 y 4 años de edad. El primer paciente presentaba ptosis leve del párpado superior derecho, hipotropia de 15 grados y déficit marcado de la elevación en dicho ojo. El segundo paciente presentaba ptosis leve en su ojo izquierdo, hipotropia de 20 grados, limitación severa de la elevación con nistagmus de retracción convergencia asociado y limitación modera de la abducción en dicho ojo. En ambos la resonancia magnética cerebral mostró agenesia del cuerpo calloso. El test de ducción resultó positivo. Se les intervino de retroceso de recto inferior, presentando un postoperatorio inmediato en ortotropia pero con evolución progresiva a partir de los 3 meses postquirúrgicos hacia la hipotropia. Sólo en un caso se realizó cirugía palpebral.
Conclusión: El FCME se puede asociar a la agenesia del cuerpo calloso, asociación apenas descrita en la literatura. Aunque el postoperatorio inmediato resultó plenamente satisfactorio, observamos una regresión meses después.
Caso Clínico: Presentamos dos niños de 6 y 4 años de edad. El primer paciente presentaba ptosis leve del párpado superior derecho, hipotropia de 15 grados y déficit marcado de la elevación en dicho ojo. El segundo paciente presentaba ptosis leve en su ojo izquierdo, hipotropia de 20 grados, limitación severa de la elevación con nistagmus de retracción convergencia asociado y limitación modera de la abducción en dicho ojo. En ambos la resonancia magnética cerebral mostró agenesia del cuerpo calloso. El test de ducción resultó positivo. Se les intervino de retroceso de recto inferior, presentando un postoperatorio inmediato en ortotropia pero con evolución progresiva a partir de los 3 meses postquirúrgicos hacia la hipotropia. Sólo en un caso se realizó cirugía palpebral.
Conclusión: El FCME se puede asociar a la agenesia del cuerpo calloso, asociación apenas descrita en la literatura. Aunque el postoperatorio inmediato resultó plenamente satisfactorio, observamos una regresión meses después.
Mucopolisacaridosis tipo VI: ¿cuál es el camino de la ceguera?
Dres.: Augusto Magalhaes, Jorge Breda, Elisa Leao, Esmeralda Silva
Portugal
Dres.: Augusto Magalhaes, Jorge Breda, Elisa Leao, Esmeralda Silva
Portugal
Introducción: La mucopolisacaridosis (MPS) del Tipo VI (S. Maroteaux-Lamy), resulta de la actividad deficiente de la enzima N-acetilgalactosamina-4-sulfatase con prejuzgo de la cascada de degradación del sulfato de dermatán. El envolvimiento clínico es multisistémico, pero con un padrón de desarrollo intelectual normal. Las alteraciones oftalmológicas son precoces e se agravan con la evolución de la enfermedad/edad. Las causas de disminución de la acuidad visual son la hipotransparencia corneana y la patología del niervo óptico. El glaucoma es apuntado como principal causa de enfermedad del niervo óptico. Sin embargo, las córneas de estos enfermos están muy espesadas pelo que es difícil valorizar las tensiones oculares; por otro lado la atrofia óptica es muy precoz, lo que presupone la posibilidad de otra causa concomitante para la evolución para atrofia óptica.
Métodos: Fueran estudiados 5 enfermos con MPS VI, edad media 14A. El diagnóstico laboratorial fue realizado con el adosamiento de GAGs urinarios, la actividad de la ARS-B en los leucocitos y la caracterización mutacional. La evaluación de los niervos ópticos se procedió por RM de alto campo, en los planes axial, sagital y coronal, con cortes de 3 mm de espesura. Fueran medidos la espesura del niervo óptico y de la vaina por consenso de dos neuroradiólogos y realizada la media aritmética de cada medición en los 3 planes.
Resultados: Fueran estudiados 10 órbitas de 5 enfermos. En todos los enfermos fue encontrada una disminución marcada de la espesura del niervo óptico e un aumento de la espesura de la vaina. El coeficiente entre el diámetro de la vaina y la espesura del niervo óptico parece relacionarse con la acuidad visual de estos enfermos.
Discusión: La dilatación constante de los espacios de circulación del liquor asociada a la presencia de atrofia óptica permite considerar la posibilidad de la hidrocefalia ser una causa importante de atrofia del niervo óptico.
Métodos: Fueran estudiados 5 enfermos con MPS VI, edad media 14A. El diagnóstico laboratorial fue realizado con el adosamiento de GAGs urinarios, la actividad de la ARS-B en los leucocitos y la caracterización mutacional. La evaluación de los niervos ópticos se procedió por RM de alto campo, en los planes axial, sagital y coronal, con cortes de 3 mm de espesura. Fueran medidos la espesura del niervo óptico y de la vaina por consenso de dos neuroradiólogos y realizada la media aritmética de cada medición en los 3 planes.
Resultados: Fueran estudiados 10 órbitas de 5 enfermos. En todos los enfermos fue encontrada una disminución marcada de la espesura del niervo óptico e un aumento de la espesura de la vaina. El coeficiente entre el diámetro de la vaina y la espesura del niervo óptico parece relacionarse con la acuidad visual de estos enfermos.
Discusión: La dilatación constante de los espacios de circulación del liquor asociada a la presencia de atrofia óptica permite considerar la posibilidad de la hidrocefalia ser una causa importante de atrofia del niervo óptico.
Seguridad en el tratamiento vía oral con propranolol del hemangioma capilar orbito-palpebral
Dres.: Ester Casas Gimeno, Joan Prat Bartomeu
Barcelona
Dres.: Ester Casas Gimeno, Joan Prat Bartomeu
Barcelona
Introducción: El hemangioma infantil (IH) es un tumor común en los niños. Se han propuesto diferentes opciones terapéuticas pero no se ha descrito ningún protocolo a nivel internacional. El uso del propranolol, un fármaco beta-bloqueante no selectivo ha demostrado una gran respuesta en los IH. Los principales efectos sistémicos de los beta-bloqueantes son la disminución en la TA, la frecuencia cardiaca, el broncoespasmo y la hipoglicemia.
Objetivo: Estudiar la seguridad del propranolol como fármaco de uso compasivo en el tratamiento oral del IH. Métodos: Estudio prospectivo. Se pauta el propranolol vía oral. La dosis inicial es 1mg/ kg/ día, con supervisión de constantes vitales. Se realizan incrementos semanales mínimos de 0.5 mg/kg/día hasta llegar a la dosis máxima que oscila entre los 2 y 3 mg/Kg/día. Sólo los pacientes con riesgo cardiovascular se remiten previamente para estudio cardiológico.
Resultados: 27 pacientes son seleccionados para tratamiento con propranolol entre 2012 i 2014 según nuestros criterios de inclusión . Todos han sido tratados con propranolol oral siguiendo nuestro protocolo de manera ambulatoria. Un caso de hipoglicemia leve ha indicado la retirada parcial del fármaco, no se ha observado ningún otro caso de efectos colaterales o secundarios del fármaco.
Conclusiones: En nuestra práctica clínica el uso del propranolol oral es seguro y efectivo para el tratamiento del IH orbito-palpebral complicado.
Objetivo: Estudiar la seguridad del propranolol como fármaco de uso compasivo en el tratamiento oral del IH. Métodos: Estudio prospectivo. Se pauta el propranolol vía oral. La dosis inicial es 1mg/ kg/ día, con supervisión de constantes vitales. Se realizan incrementos semanales mínimos de 0.5 mg/kg/día hasta llegar a la dosis máxima que oscila entre los 2 y 3 mg/Kg/día. Sólo los pacientes con riesgo cardiovascular se remiten previamente para estudio cardiológico.
Resultados: 27 pacientes son seleccionados para tratamiento con propranolol entre 2012 i 2014 según nuestros criterios de inclusión . Todos han sido tratados con propranolol oral siguiendo nuestro protocolo de manera ambulatoria. Un caso de hipoglicemia leve ha indicado la retirada parcial del fármaco, no se ha observado ningún otro caso de efectos colaterales o secundarios del fármaco.
Conclusiones: En nuestra práctica clínica el uso del propranolol oral es seguro y efectivo para el tratamiento del IH orbito-palpebral complicado.
Toxoplasmosis ocular congénita: seguimiento mediante OCT, a propósito de un caso. Introducción
Dres.: Lorena Fernández Montalvo, Hugo Ernesto Tapia Quijada, Elsa Font Juliá, Encarnación Mengual Verdú
Alicante
Dres.: Lorena Fernández Montalvo, Hugo Ernesto Tapia Quijada, Elsa Font Juliá, Encarnación Mengual Verdú
Alicante
Introducción: La toxoplasmosis ocular es la causa más frecuente de uveítis posterior de etiología conocida, con frecuentes recaídas que dan lugar a una importante disminución de la AV. La manifestación ocular más frecuente es la coriorretinitis. El diagnóstico se basa en el aspecto clínico de las lesiones oculares (lesión retiniana que suele ser contigua a otra lesión cicatricial) y resultados positivos para la enfermedad en el estudio serológico. La necesidad y duración del tratamiento debe ser personalizado y determinado por factores como la localización de las lesiones, grado de respuesta inflamatoria, pérdida de AV y estado inmune del paciente. La OCT nos es muy útil tanto en el diagnóstico como en el seguimiento del proceso
Caso Clínico: Paciente de 13 años que acude a nuestra consulta urgente, refiriendo disminución de AV en el ojo derecho de cuatro días de evolución.Nació y creció en Argentina. Presenta una AV de CD en OD y de la unidad en el OI. A la exploración, bajo biomicroscopía, se objetiva un Tyndall de una (+) en el OD, siendo el resto del polo anterior normal. En el estudio fundoscópico deOD, se observa una cicatriz toxoplásmica a nivel de la arcada temporo-superior con un foco de coriorretinitis en la misma arcada adyacente al nervio óptico, siendo el OI normal. En la OCT se observa edema macular y papilar en elOD.Se confirma el diagnóstico de toxoplasmosis mediante serología. Tras la instauración de tratamiento el cuadro mejora progresivamente, tanta subjetiva (mejoría de la AV) como objetivamente(OCT)
Conclusión: Las lesiones en el área macular no son infrecuentes, probablemente como resultado del atrapamiento de parásitos libres o macrófagos conteniéndolos en los capilares terminales de la retina perifoveal. Puede producirse un edema macular quístico cuando las lesiones se producen en éste área, como ocurre con nuestra paciente. Gracias a la OCT podemos valorar la evolución de las mismas y la eficacia del tratamiento de forma sencilla y no invasiva.
Caso Clínico: Paciente de 13 años que acude a nuestra consulta urgente, refiriendo disminución de AV en el ojo derecho de cuatro días de evolución.Nació y creció en Argentina. Presenta una AV de CD en OD y de la unidad en el OI. A la exploración, bajo biomicroscopía, se objetiva un Tyndall de una (+) en el OD, siendo el resto del polo anterior normal. En el estudio fundoscópico deOD, se observa una cicatriz toxoplásmica a nivel de la arcada temporo-superior con un foco de coriorretinitis en la misma arcada adyacente al nervio óptico, siendo el OI normal. En la OCT se observa edema macular y papilar en elOD.Se confirma el diagnóstico de toxoplasmosis mediante serología. Tras la instauración de tratamiento el cuadro mejora progresivamente, tanta subjetiva (mejoría de la AV) como objetivamente(OCT)
Conclusión: Las lesiones en el área macular no son infrecuentes, probablemente como resultado del atrapamiento de parásitos libres o macrófagos conteniéndolos en los capilares terminales de la retina perifoveal. Puede producirse un edema macular quístico cuando las lesiones se producen en éste área, como ocurre con nuestra paciente. Gracias a la OCT podemos valorar la evolución de las mismas y la eficacia del tratamiento de forma sencilla y no invasiva.
Estudio de la postimagen tras la saturación de los fotorreceptores y sus aplicaciones en la patología del nervio óptico
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, José Alberto Reche Sainz, Susana Perucho Martínez, Elena Martín Giral
Madrid
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, José Alberto Reche Sainz, Susana Perucho Martínez, Elena Martín Giral
Madrid
Introducción: Las neuropatías ópticas (NO) se caracterizan por el daño a las células ganglionares de la retina (CGR), una de cuyas funciones es integrar y procesar estímulos de los fotorreceptores. La postimagen tras la saturación de los fotorreceptores se forma gracias a la función integradora de las CGR, nos proponemos estudiar la utilidad de dichas postimagenes en la patología del nervio óptico.
Material y Métodos: Estudio observacional descriptivo y transversal. Se seleccionaron 35 pacientes afectos de NO unilateral de cualquier causa desde la base de datos del servicio de oftalmología. La edad media de la muestra fue de 35 años y 18 fueron mujeres. Se realizó una prueba de saturación de fotorreceptores en ambos ojos y se estudió la formación y el tiempo de permanencia de la postimagen comparando ambos ojos de un mismo sujeto.
Resultados: El ojo afecto de NO tenía significativamente más probabilidades de no ver postimagen tras saturar los fotorreceptores que el sano (p<0,05). En caso de ver la postimagen, el tiempo de permanencia de la misma era significativamente inferior al del ojo sano (p<0,05). No se encontraron diferencias por edad ni sexo.
Conclusiones: El estudio de la postimagen tras la saturación de los fotorreceptores es una prueba útil para el diagnóstico de NO de cualquier causa. Serían interesantes estudios más detallados que correlacionen este fenómeno con otros parámetros de función visual.
Material y Métodos: Estudio observacional descriptivo y transversal. Se seleccionaron 35 pacientes afectos de NO unilateral de cualquier causa desde la base de datos del servicio de oftalmología. La edad media de la muestra fue de 35 años y 18 fueron mujeres. Se realizó una prueba de saturación de fotorreceptores en ambos ojos y se estudió la formación y el tiempo de permanencia de la postimagen comparando ambos ojos de un mismo sujeto.
Resultados: El ojo afecto de NO tenía significativamente más probabilidades de no ver postimagen tras saturar los fotorreceptores que el sano (p<0,05). En caso de ver la postimagen, el tiempo de permanencia de la misma era significativamente inferior al del ojo sano (p<0,05). No se encontraron diferencias por edad ni sexo.
Conclusiones: El estudio de la postimagen tras la saturación de los fotorreceptores es una prueba útil para el diagnóstico de NO de cualquier causa. Serían interesantes estudios más detallados que correlacionen este fenómeno con otros parámetros de función visual.
¿Es la anisocoria un reto para el oftalmólogo? Revisión de la anisocoria hospitalaria
Dres.: José Javier San Román Llorens, José Alberto Reche Sainz, Raquel Lapuente Monjas, Nicolás Toledano Fernández
Madrid
Dres.: José Javier San Román Llorens, José Alberto Reche Sainz, Raquel Lapuente Monjas, Nicolás Toledano Fernández
Madrid
Objetivo: Describir y evaluar las distintas formas de anisocoria encontradas en nuestro hospital.
Método: Serie retrospectiva de casos. Se incluyeron los pacientes con anisocoria estudiados en nuestro hospital desde 2008-2014. Se excluyeron pacientes con traumatismos oculares, inflamación ocular y cirugías oftalmológicas previas. Evaluamos la edad, sexo, antecedentes, clínica, motilidad ocular, puilometría escotópica, fotópica así como los test farmacológicos utilizados.
Resultados: Se encontraron 25 pacientes con anisocoria. La edad media de diagnóstico fue 29 +- 19.75 años presentando un pico de incidencia pediátrico (8/25 rango: 2-6) y otro en adultos de edad media (12/25 rango 35-50). Observamos preferencia por el sexo femenino 3:1 (76 % mujeres 24% varones). La clínica asociada más frecuente fue la cefalea y dificultad de enfoque 51% y 36% relativamente. Realizamos test farmacológicos con pilocarpina 0.125%, apraclonidina, cocaína 4% , sin incidencias a excepción de una hipersensibilidad con crisis convulsivas en relación al uso de apraclonidina en un paciente pediátrico. Encontramos anisocoria esencial familiar en 2 pacientes (8%), síndrome de Horner en 4 (16%), pupila de Adie en 6 (24%), pupila de Argyll- Robertson en 1 paciente (4%) y anisocoria fisiológica en 12 (48%). La anisocoria fue la clave diagnóstica para un caso de sífilis terciaria y un gran bocio endotorácico en un caso de síndrome de Horner.
Conclusiones: La anisocoria es habitualmente un signo clínico benigno, no obstante la historia previa, exploración clínica y las pruebas diagnósticas complementarias resultan clave a la hora de despistar patologías sistémicas graves asociadas a esta entidad clínica.
Método: Serie retrospectiva de casos. Se incluyeron los pacientes con anisocoria estudiados en nuestro hospital desde 2008-2014. Se excluyeron pacientes con traumatismos oculares, inflamación ocular y cirugías oftalmológicas previas. Evaluamos la edad, sexo, antecedentes, clínica, motilidad ocular, puilometría escotópica, fotópica así como los test farmacológicos utilizados.
Resultados: Se encontraron 25 pacientes con anisocoria. La edad media de diagnóstico fue 29 +- 19.75 años presentando un pico de incidencia pediátrico (8/25 rango: 2-6) y otro en adultos de edad media (12/25 rango 35-50). Observamos preferencia por el sexo femenino 3:1 (76 % mujeres 24% varones). La clínica asociada más frecuente fue la cefalea y dificultad de enfoque 51% y 36% relativamente. Realizamos test farmacológicos con pilocarpina 0.125%, apraclonidina, cocaína 4% , sin incidencias a excepción de una hipersensibilidad con crisis convulsivas en relación al uso de apraclonidina en un paciente pediátrico. Encontramos anisocoria esencial familiar en 2 pacientes (8%), síndrome de Horner en 4 (16%), pupila de Adie en 6 (24%), pupila de Argyll- Robertson en 1 paciente (4%) y anisocoria fisiológica en 12 (48%). La anisocoria fue la clave diagnóstica para un caso de sífilis terciaria y un gran bocio endotorácico en un caso de síndrome de Horner.
Conclusiones: La anisocoria es habitualmente un signo clínico benigno, no obstante la historia previa, exploración clínica y las pruebas diagnósticas complementarias resultan clave a la hora de despistar patologías sistémicas graves asociadas a esta entidad clínica.
Pseudopapiledema por drusas enterradas de la cabeza del nervio óptico en población pediátrica
Dras.: Carmen Hernández Martínez, Ana Llorca Cardeñosa, Mariona Vidal Santacana
Murcia
Dras.: Carmen Hernández Martínez, Ana Llorca Cardeñosa, Mariona Vidal Santacana
Murcia
Objetivo: Describir características epidemiológicas y clínicas de un grupo de pacientes en edad pediátrica con el diagnóstico de pseudopapiledema por sospecha de drusas enterradas de la cabeza del nervio óptico y plantear un protocolo diagnóstico.
Método: Consiste en un estudio retrospectivo, observacional de un grupo de 18 niños, menores de 18 años y con el diagnóstico de pseudopapiledema. A todos ellos se les llevo a cabo una ecografía ocular (ECO) y otras pruebas diagnósticas como autofluorescencia (AF), angiografía fluoresceinica (AGF) y tomografía de coherencia óptica (OCT).
Resultados: La edad media era de 11,2 años (rango 5-18), once niños y siete niñas. Todos los casos eran bilaterales excepto tres y la agudeza visual era de la unidad en todos ellos. El diagnostico de drusas de la cabeza del nervio óptico se llevo a cabo en doce pacientes mediante la demostración de drusas calcificadas en la ECO en ocho niños (44%) y la presencia de tinción del nervio óptico en la AGF en otros cuatro niños (23%).
Conclusiones: El diagnóstico se confirma en la mayoría de veces mediante ECO, aunque otras pruebas como la AF,AGF y OCT pueden son necesarias. En ocasiones el diagnóstico no se puede confirmar y es requerido un seguimiento mediante retinografías seriadas que constaten la ausencia de cambios.
Método: Consiste en un estudio retrospectivo, observacional de un grupo de 18 niños, menores de 18 años y con el diagnóstico de pseudopapiledema. A todos ellos se les llevo a cabo una ecografía ocular (ECO) y otras pruebas diagnósticas como autofluorescencia (AF), angiografía fluoresceinica (AGF) y tomografía de coherencia óptica (OCT).
Resultados: La edad media era de 11,2 años (rango 5-18), once niños y siete niñas. Todos los casos eran bilaterales excepto tres y la agudeza visual era de la unidad en todos ellos. El diagnostico de drusas de la cabeza del nervio óptico se llevo a cabo en doce pacientes mediante la demostración de drusas calcificadas en la ECO en ocho niños (44%) y la presencia de tinción del nervio óptico en la AGF en otros cuatro niños (23%).
Conclusiones: El diagnóstico se confirma en la mayoría de veces mediante ECO, aunque otras pruebas como la AF,AGF y OCT pueden son necesarias. En ocasiones el diagnóstico no se puede confirmar y es requerido un seguimiento mediante retinografías seriadas que constaten la ausencia de cambios.
Caso clínico de papilitis autolimitada, hallazgo casual
Dras.: Alina Mugnani Deza, Ana Fernández Guardiola
Barcelona
Dras.: Alina Mugnani Deza, Ana Fernández Guardiola
Barcelona
Introducción: Según práctica estándar, aquellos pacientes con sospecha de papilitis deben ser evaluados inmediatamente para descartar causas subyacentes. Entre los estudios estipulados se incluyen examen físico y neuro-oftalmológico, pruebas hematológicas (PH), test de imagen y en algunos casos, punción lumbar (PL). Se presenta un caso en que las pruebas invasivas como PH y PL se han evitado, mediante observación, reduciendo las molestias al paciente y a sus familiares.
Caso Clínico: Niño de 11 años acude a la consulta de oftalmología para control rutinario. Al examen presentó una AVsc de 1.0 en el OD y 0.9 en el OI. Su AVcc subjetiva fue de +0.50 = 1.0 y + 0.75 = 1.0 respectivamente. La bio-microscopía fue normal y el fondo de ojos ( FO ) evidenció, papilitis en el OI. El test de Ishihara y ecografía ocular fueron normales, retinografía y OCT de nervio óptico alterados. Se solicitó interconsulta con neurología y RNM que fueron normales también. Debido a la inexistencia sintomatológica, se instauró conducta expectante y seguimiento mediante retinografía y OCT. Tras dos meses de observación, la papilitis remitió parcialmente y en el tercer mes, se resolvió completamente sin secuelas.
Conclusión: Como la papilitis en niños menores de 15 años, puede deberse a infecciones virales irrelevantes, en caso de signos de papilitis sin síntomas sistémicos o neuro-oftalmológicos, la observación del paciente parece ser una opción válida, no siendo necesarias pruebas invasivas como PH y PL.
Caso Clínico: Niño de 11 años acude a la consulta de oftalmología para control rutinario. Al examen presentó una AVsc de 1.0 en el OD y 0.9 en el OI. Su AVcc subjetiva fue de +0.50 = 1.0 y + 0.75 = 1.0 respectivamente. La bio-microscopía fue normal y el fondo de ojos ( FO ) evidenció, papilitis en el OI. El test de Ishihara y ecografía ocular fueron normales, retinografía y OCT de nervio óptico alterados. Se solicitó interconsulta con neurología y RNM que fueron normales también. Debido a la inexistencia sintomatológica, se instauró conducta expectante y seguimiento mediante retinografía y OCT. Tras dos meses de observación, la papilitis remitió parcialmente y en el tercer mes, se resolvió completamente sin secuelas.
Conclusión: Como la papilitis en niños menores de 15 años, puede deberse a infecciones virales irrelevantes, en caso de signos de papilitis sin síntomas sistémicos o neuro-oftalmológicos, la observación del paciente parece ser una opción válida, no siendo necesarias pruebas invasivas como PH y PL.
Gliomas del nervio óptico en relación a Neurofibromatosis tipo I, nuestra experiencia
Dres.: Andrés Aqueveque Bull, Josep Visa Nasarre
Barcelona
Dres.: Andrés Aqueveque Bull, Josep Visa Nasarre
Barcelona
Existen tres tipos de neurofibromatosis (NF): La tipo I, la tipo II y la schwanomatosis. La tipo I o enfermedad de von Ricklinghausen, es la más común. Su característica principal son las múltiples máculas y neurofibromas café con leche. Tiene una incidencia de 1 en 2600/3000 individuos. Aproximadamente el 50% de los casos son familiares y el resto, resultado de mutaciones de novo. El orden típico de aparición de las manifestaciones son las manchas café con leche, las pecas inguinales y/o axilares, los nódulos de Lisch (hamartomas del iris) y los neurofibromas. Las lesiones óseas (si aparecen) lo hacen generalmente durante el 1º año de vida. En cuanto al glioma sintomático de vía óptica, aparece generalmente a los 3 años de edad. Se dan en el 14-15% de los menores de 6 años de edad diagnosticados de NF I (rara vez en niños mayores y adultos). Suelen ser astrocitomas pliocíticos de bajo grado y pueden aparecer en cualquier parte de la vía visual anterior a las radiaciones ópticas, e involucrar a nervio óptico, quiasmas y/o cintillas ópticas. En el presente trabajo, se dará a conocer nuestra experiencia según la casuística de nuestro centro (H. Parc Taulí) en relación a la NF I y el desarrollo de gliomas de nervio óptico; como también, se hará una revisión del planteamiento terapéutico. Tenemos diagnosticados 36 casos de NF I, de los cuales hay seis pacientes (16.66 % del total de la muestra) que han desarrollado gliomas de nervio óptico (que concuerda con el 14-15% presentado en la mayoría de las series con suficiente casuística) y dos de ellos (5.55% del total de la muestra y el 33.33% del subgrupo de pacientes que desarrollan glioma en relación a NF 1) han desarrollado una afectación quiasmática concomitante (Un caso de glioma de quiasmas asociado a displasia, y el otro caso de glioma de quiasmas asociado a glioma de nervio óptico). Además, incluiremos el registro de las otras afectaciones oftalmológicas que de los pacientes diagnosticados de NF I.
Evolución oftalmológica de niños con glioma del nervio óptico
Dras.: Luz Ángela Muñoz Jiménez, Ana Morales Becerra, Cristina Gómez Cabrera, Julia Escudero Gómez
Málaga
Dras.: Luz Ángela Muñoz Jiménez, Ana Morales Becerra, Cristina Gómez Cabrera, Julia Escudero Gómez
Málaga
Introducción: Los gliomas de la vía óptica representan el 5 % de todos los tumores intracraneales pediátricos. Son tumores de la primera década y en un 25% de los casos están asociados a neurofibromatosis tipo I (uni o bilateral). La clínica depende de la localización y crecimiento del tumor pudiendo cursar con: disminución de la agudeza visual, defecto pupilar aferente, atrofia óptica, edema de papila, estrabismo, defectos en la visión del color o proptosis. Destaca la alta frecuencia de gliomas de vía óptica en niños con neurofibromatosis tipo 1, siendo tumores de buen pronóstico, mejor que en adultos o en sujetos sin la enfermedad.
Caso Clínico: Presentamos una revisión de casos de niños con diagnóstico de glioma de nervio óptico. Su debut fue en edades menores de los 10 años con manifestaciones clínicas secundarias a la compresión de estructuras adyacentes. Varios casos cursaron con exploración oftalmológica normal; mientras otros cursaron con estrabismo asociado a atrofia de nervio óptico secundaria a la compresión por el tumor. En la exploración oftalmológica presentan agudezas visuales inferiores a 0.1, polo anterior normal; en la imagen fundoscópica palidez papilar; campo visual abolido y tomografía de coherencia de espesor de fibras nerviosas con disminución acusada de la media de espesor. En estos casos en la resonancia magnética muestran engrosamiento tubular del nervio óptico. El diagnóstico precoz debido a la afectación oftalmológica permitió un mejor control.
Conclusión: El papel del oftalmólogo ante un niño con glioma del nervio óptico es muy importante tanto en la valoración inicial como el seguimiento debido a la importancia de los datos clínicos que se obtienen de la exploración que son de utilidad para la toma de decisiones terapéuticas.
Caso Clínico: Presentamos una revisión de casos de niños con diagnóstico de glioma de nervio óptico. Su debut fue en edades menores de los 10 años con manifestaciones clínicas secundarias a la compresión de estructuras adyacentes. Varios casos cursaron con exploración oftalmológica normal; mientras otros cursaron con estrabismo asociado a atrofia de nervio óptico secundaria a la compresión por el tumor. En la exploración oftalmológica presentan agudezas visuales inferiores a 0.1, polo anterior normal; en la imagen fundoscópica palidez papilar; campo visual abolido y tomografía de coherencia de espesor de fibras nerviosas con disminución acusada de la media de espesor. En estos casos en la resonancia magnética muestran engrosamiento tubular del nervio óptico. El diagnóstico precoz debido a la afectación oftalmológica permitió un mejor control.
Conclusión: El papel del oftalmólogo ante un niño con glioma del nervio óptico es muy importante tanto en la valoración inicial como el seguimiento debido a la importancia de los datos clínicos que se obtienen de la exploración que son de utilidad para la toma de decisiones terapéuticas.
Hipertensión intracraneal secundaria a trombosis del seno cavernoso: a propósito de un caso
Dras.: Cristina Gómez Cabrera, Ana Morales Becerra, Luz Ángela Muñoz Jiménez, M.ª Isabel Pérez Cabeza
Málaga
Dras.: Cristina Gómez Cabrera, Ana Morales Becerra, Luz Ángela Muñoz Jiménez, M.ª Isabel Pérez Cabeza
Málaga
Introducción: Los senos cavernosos son estructuras venosas durales situadas lateralmente a la silla turca, extendiéndose desde la fisura orbitaria superior hasta el ápex petroso del hueso temporal. La presencia de trombosis de seno cavernoso en edad pediátrica es poco frecuente en nuestro medio, la mayoría de estos cuadros ocurren habitualmente en adultos jóvenes.
Caso Clínico: Presentamos un caso de una niña diagnosticada de retraso madurativo secundario a cromosomopatía y remitida para valoración oftalmológica. Tras la exploración, es diagnosticada de endotropia, hipermetropía severa y ambliopía del ojo derecho y en el fondo de ojo se apreciaba papiledema y tortuosidad vascular con presencia de pulso venoso. Se solicitó TAC craneal y ecografía ocular objetivándose una hipertensión intracraneal. Para completar el estudio etiológico se realizó resonancia magnética con diagnóstico de trombosis del seno cavernoso y transverso. Iniciamos tratamiento con acetazolamida, furosemida y heparina con mejoría del edema de papila, pero persistía el aumento de la presión intracraneal a pesar del tratamiento por lo que finalmente requirió la realización de una derivación lumbo-peritoneal.
Conclusión: La trombosis del seno cavernoso es un padecimiento neurológico con múltiples manifestaciones clínicas, cuyo diagnóstico requiere de la destreza del clínico. Los objetivos de su evaluación incluyen confirmar que se trata de una trombosis del seno cavernoso así como establecer el tratamiento adecuado de forma precoz.
Caso Clínico: Presentamos un caso de una niña diagnosticada de retraso madurativo secundario a cromosomopatía y remitida para valoración oftalmológica. Tras la exploración, es diagnosticada de endotropia, hipermetropía severa y ambliopía del ojo derecho y en el fondo de ojo se apreciaba papiledema y tortuosidad vascular con presencia de pulso venoso. Se solicitó TAC craneal y ecografía ocular objetivándose una hipertensión intracraneal. Para completar el estudio etiológico se realizó resonancia magnética con diagnóstico de trombosis del seno cavernoso y transverso. Iniciamos tratamiento con acetazolamida, furosemida y heparina con mejoría del edema de papila, pero persistía el aumento de la presión intracraneal a pesar del tratamiento por lo que finalmente requirió la realización de una derivación lumbo-peritoneal.
Conclusión: La trombosis del seno cavernoso es un padecimiento neurológico con múltiples manifestaciones clínicas, cuyo diagnóstico requiere de la destreza del clínico. Los objetivos de su evaluación incluyen confirmar que se trata de una trombosis del seno cavernoso así como establecer el tratamiento adecuado de forma precoz.
Comunicaciones en Panel
P-01 Tipología de anomalías binoculares, oculomotoras y acomodativas referidas a consulta de terapia visual hospitalaria
Dres.: David Pablo Piñero Llorens, Carlos Laria Ochaita, Pedro Ruiz Fortes, Rafael Pérez Cambrodi
Alicante
Dres.: David Pablo Piñero Llorens, Carlos Laria Ochaita, Pedro Ruiz Fortes, Rafael Pérez Cambrodi
Alicante
Objetivo: Evaluar la distribución y tipología de anomalías binoculares, oculomotoras y acomodativas remitidas para la realización de rehabilitación visual programada a una consulta de terapia visual hospitalaria.
Material y métodos: Estudio retrospectivo que incluye un total de 65 pacientes referidos a la consulta de rehabilitación y terapia visual del Departamento de Oftalmología (OFTALMAR) del Hospital internacional Medimar de Alicante durante el período 2011-2014. Se ha comprobado en todos los casos el diagnóstico binocular, oculomotor y acomodativo que se realizó y se ha revisado si el paciente completó el proceso de terapia visual. Asimismo, también se comprobó si en algunos casos se había realizado cirugía de estrabismo previa y si la anomalía era consecuencia de cualquier tipo de cirugía ocular.
Resultados: La anomalía binocular más referida para la realización de terapia visual fue la insuficiencia de convergencia (32,3%), mientras que la anomalía acomodativa más frecuentemente tratada en la consulta de terapia visual fue la inflexibilidad acomodativa (29,2%). Cuadro combinado de insuficiencia de convergencia e inflexibilidad acomodativa se observó en 10 pacientes (15,4%). Otras anomalías binoculares tratadas fueron el exceso de divergencia (6,2%), la exoforia básica (6,2%), el exceso de convergencia (4,6%) y la endoforia básica (1,5%). A su vez, otras anomalías binoculares tratadas fueron el exceso acomodativo (4,6%) y la insuficiencia acomodativa (4,6%). Se trataron desviaciones residuales tras cirugías de estrabismo en 6 pacientes (9,2%), así como diplopías residuales tras cirugía de catarata (4,6%) y retinianas (4,6%). Tratamientos meramente oculomotores sólo se realizaron en 3 pacientes con problemas neurológicos.
Conclusiones: Existe una gran variedad de anomalías binoculares y acomodativas que se pueden beneficiar de la terapia visual programada, siendo la insuficiencia de convergencia y la inflexibilidad acomodativa de las más frecuentes.
Material y métodos: Estudio retrospectivo que incluye un total de 65 pacientes referidos a la consulta de rehabilitación y terapia visual del Departamento de Oftalmología (OFTALMAR) del Hospital internacional Medimar de Alicante durante el período 2011-2014. Se ha comprobado en todos los casos el diagnóstico binocular, oculomotor y acomodativo que se realizó y se ha revisado si el paciente completó el proceso de terapia visual. Asimismo, también se comprobó si en algunos casos se había realizado cirugía de estrabismo previa y si la anomalía era consecuencia de cualquier tipo de cirugía ocular.
Resultados: La anomalía binocular más referida para la realización de terapia visual fue la insuficiencia de convergencia (32,3%), mientras que la anomalía acomodativa más frecuentemente tratada en la consulta de terapia visual fue la inflexibilidad acomodativa (29,2%). Cuadro combinado de insuficiencia de convergencia e inflexibilidad acomodativa se observó en 10 pacientes (15,4%). Otras anomalías binoculares tratadas fueron el exceso de divergencia (6,2%), la exoforia básica (6,2%), el exceso de convergencia (4,6%) y la endoforia básica (1,5%). A su vez, otras anomalías binoculares tratadas fueron el exceso acomodativo (4,6%) y la insuficiencia acomodativa (4,6%). Se trataron desviaciones residuales tras cirugías de estrabismo en 6 pacientes (9,2%), así como diplopías residuales tras cirugía de catarata (4,6%) y retinianas (4,6%). Tratamientos meramente oculomotores sólo se realizaron en 3 pacientes con problemas neurológicos.
Conclusiones: Existe una gran variedad de anomalías binoculares y acomodativas que se pueden beneficiar de la terapia visual programada, siendo la insuficiencia de convergencia y la inflexibilidad acomodativa de las más frecuentes.
P-02 Programa de intervención de terapia visual
Dras.: Lucía Morchón Miranda, Rocío Rodríguez Rivera
Barcelona
Dras.: Lucía Morchón Miranda, Rocío Rodríguez Rivera
Barcelona
Objetivo: Evaluar las habilidades visoperceptivas, visomotoras y capacidad lectora en una clase de niños de 2.° curso de Primaria. Analizar la influencia de un programa de terapia visual.
Método: Se realizó un estudio prospectivo a un grupo de 25 niños (13 varones y 12 niñas) de 2.° curso de Primaria, dividiendolos en 2 grupos, un control (n =15) y el otro (n=10) de los que presentaban disminución de las habilidades estudiadas. Se evaluó la AV, MOE, Estereopsis, Visión de Color, Evaluación Postural y Velocidad Lectora, Evaluación de habilidades visoperceptivas con test de Skills (TVPS). Análisis estadístico SPSS (Wilcoxon y Mann-Whitney p<0.05). Se realizó terapia en casa con las tablas de Hart lejos/cerca, Diana, Tarjetas salvavidas y Cordón de Brok durante 3 meses. Se realizaron reevaluaciones a los 2 y 3 meses de la terapia.
Resultados: En las habilidades Visoperceptivas: discriminación visual, (p=0.5/p=0.4 memoria visual, (p=0.08 /p=0.05), Relaciones espaciales (p=0.03/p=0.08), figura fondo (p=0.02/p=0.11), cierre visual (p=0.005/p=0.6) Visomotoras: tiempo vertical (p=0.007/p=0.22), tiempo horizontal (p=0.005/p=0.22), ratio (p=0.007/p=0.22), Estereopsis (p=0.05/p=0.015) tanto en la Evaluación postural, como en la Capacidad Lectora los dos grupos presentaron diferencias significativas (p = 0.02/ p = 0.005).
Conclusiones: La terapia visual es efectiva como método de tratamiento ante determinados problemas visuales, mejorando además la estereopsis, postura y capacidad lectora incluso en los niños sin patología.
Método: Se realizó un estudio prospectivo a un grupo de 25 niños (13 varones y 12 niñas) de 2.° curso de Primaria, dividiendolos en 2 grupos, un control (n =15) y el otro (n=10) de los que presentaban disminución de las habilidades estudiadas. Se evaluó la AV, MOE, Estereopsis, Visión de Color, Evaluación Postural y Velocidad Lectora, Evaluación de habilidades visoperceptivas con test de Skills (TVPS). Análisis estadístico SPSS (Wilcoxon y Mann-Whitney p<0.05). Se realizó terapia en casa con las tablas de Hart lejos/cerca, Diana, Tarjetas salvavidas y Cordón de Brok durante 3 meses. Se realizaron reevaluaciones a los 2 y 3 meses de la terapia.
Resultados: En las habilidades Visoperceptivas: discriminación visual, (p=0.5/p=0.4 memoria visual, (p=0.08 /p=0.05), Relaciones espaciales (p=0.03/p=0.08), figura fondo (p=0.02/p=0.11), cierre visual (p=0.005/p=0.6) Visomotoras: tiempo vertical (p=0.007/p=0.22), tiempo horizontal (p=0.005/p=0.22), ratio (p=0.007/p=0.22), Estereopsis (p=0.05/p=0.015) tanto en la Evaluación postural, como en la Capacidad Lectora los dos grupos presentaron diferencias significativas (p = 0.02/ p = 0.005).
Conclusiones: La terapia visual es efectiva como método de tratamiento ante determinados problemas visuales, mejorando además la estereopsis, postura y capacidad lectora incluso en los niños sin patología.
P-03 Pre-estudio de OCT macular y de capa de fibras nerviosas en ambliopía. Nuestros resultados
Dras.: Eugenia Francés Caballero, Ainhoa Sanz Aguado, Hortensia Sánchez Tocino, Ana Villanueva Gómez
Valladolid
Dras.: Eugenia Francés Caballero, Ainhoa Sanz Aguado, Hortensia Sánchez Tocino, Ana Villanueva Gómez
Valladolid
Estudios previos con Tomografía de coherencia óptica (OCT) han encontrado resultados contradictorios sobre si los pacientes amblíopes presentan mayor grosor de capa de fibras nerviosas (CFNR) y grosor macular central . Algunos autores refieren estas diferencias sólo en ojos anisométropes.
Material y métodos: Estudio descriptivo sobre 45 niños, 14 no amblíopes y 31 amblíopes (21 de causa estrábica y 10 de causa anisometrópica). A todos se realiza OCT de CFNR y macular, se comparan los grosores en niños normales frente amblíopes, y en éstos en el ojo dominante frente el ojo amblíope; y por grupos de ambliopía.
Resultados: No existen diferencias significativas en el grosor macular central o en el de CFNR en los niños normales frente amblíopes. En amblíopes la media de grosor macular fue de 254,17 (desviación estándar (D.E.) 30.6) en el ojo ambliope y de 249,43 (D.E. 24) en el dominante, diferencias no significativas p=0,3. A nivel de CFNR el grosor medio fue de 95,5 (D.E. 13,5) en el ojo amblíope frente a 98,5 (D.E. 12.6) en el dominante, diferencias no significativas p=0,06. Tampoco se encontraron diferencias segmentando por grupos de ambliopía.
Discusión: No se han encontrado diferencias significativas en el grosor macular ni de CFNR en niños amblíopes respecto normales, ni entre ambos ojos de cada niño amblíope. Sí se ha visto una correlación alta entre los dos ojos de cada niño, con o sin ambliopía. La mayor parte de los niños amblíopes estaban tratados, presentaban buena agudeza visual y buena colaboración en el momento de realizar el OCT. Se precisaría más tamaño muestral y posiblemente ambliopías más profundas para encontrar resultados diferentes.
Material y métodos: Estudio descriptivo sobre 45 niños, 14 no amblíopes y 31 amblíopes (21 de causa estrábica y 10 de causa anisometrópica). A todos se realiza OCT de CFNR y macular, se comparan los grosores en niños normales frente amblíopes, y en éstos en el ojo dominante frente el ojo amblíope; y por grupos de ambliopía.
Resultados: No existen diferencias significativas en el grosor macular central o en el de CFNR en los niños normales frente amblíopes. En amblíopes la media de grosor macular fue de 254,17 (desviación estándar (D.E.) 30.6) en el ojo ambliope y de 249,43 (D.E. 24) en el dominante, diferencias no significativas p=0,3. A nivel de CFNR el grosor medio fue de 95,5 (D.E. 13,5) en el ojo amblíope frente a 98,5 (D.E. 12.6) en el dominante, diferencias no significativas p=0,06. Tampoco se encontraron diferencias segmentando por grupos de ambliopía.
Discusión: No se han encontrado diferencias significativas en el grosor macular ni de CFNR en niños amblíopes respecto normales, ni entre ambos ojos de cada niño amblíope. Sí se ha visto una correlación alta entre los dos ojos de cada niño, con o sin ambliopía. La mayor parte de los niños amblíopes estaban tratados, presentaban buena agudeza visual y buena colaboración en el momento de realizar el OCT. Se precisaría más tamaño muestral y posiblemente ambliopías más profundas para encontrar resultados diferentes.
P-04 Cribado de ambliopía en niños menores de tres años en centros infantiles del norte de la isla de Tenerife. Experiencia y viabilidad
Dres.: Paloma Ruiz de la Fuente Rodríguez, Luis García Catalá, Candelaria Pinto Herrera, Miguel Ángel Serrano García
Santa Cruz de Tenerife
Dres.: Paloma Ruiz de la Fuente Rodríguez, Luis García Catalá, Candelaria Pinto Herrera, Miguel Ángel Serrano García
Santa Cruz de Tenerife
Objetivo: Evaluar la aplicabilidad de pruebas de cribado de ambliopía en niños de 1 a 3 años realizadas en centros infantiles de la zona norte de la isla de Tenerife.
Método: 209 niños fueron examinados en 9 centros infantiles por sus educadoras, que tomaron la agudeza visual con el Test Pervin© a niños colaboradores o realizaron oclusión alterna en aquellos que no colaboraron (fase I). Los casos dudosos fueron reevaluados de nuevo en el propio centro, en presencia de un estudiante de sexto curso de medicina (fase II). Los casos aún considerados dudosos, fueron derivados al centro hospitalario de referencia para valoración por el Servicio de Oftalmología (fase III).
Resultados: 172 niños (82,3% de la muestra) resultaron colaboradores (30,14 ± 4,3 meses), de los que 145 superaron la prueba en la fase I y 24 en la fase II. Finalmente, 2 niños fueron remitidos al hospital (fase III), confirmándose en uno de ellos patología visual. El grupo de no colaboradores fue de 37 niños (17,7±2,2 meses). De ellos la prueba fue considerada no válida en 23 (62,9% del grupo). En 14 de ellos, la prueba fue válida y no mostró hallazgos susceptibles de ser patológicos.
Conclusiones: El test previn© es un método útil y sencillo para la toma de agudeza visual en niños a partir de 2 años, al realizarse en los propios centros educativos por parte de sus educadoras. Esta metodología, si bien discutible cómo único método de cribado, representa una opción a considerar como alerta clínica de ambliopía.
Método: 209 niños fueron examinados en 9 centros infantiles por sus educadoras, que tomaron la agudeza visual con el Test Pervin© a niños colaboradores o realizaron oclusión alterna en aquellos que no colaboraron (fase I). Los casos dudosos fueron reevaluados de nuevo en el propio centro, en presencia de un estudiante de sexto curso de medicina (fase II). Los casos aún considerados dudosos, fueron derivados al centro hospitalario de referencia para valoración por el Servicio de Oftalmología (fase III).
Resultados: 172 niños (82,3% de la muestra) resultaron colaboradores (30,14 ± 4,3 meses), de los que 145 superaron la prueba en la fase I y 24 en la fase II. Finalmente, 2 niños fueron remitidos al hospital (fase III), confirmándose en uno de ellos patología visual. El grupo de no colaboradores fue de 37 niños (17,7±2,2 meses). De ellos la prueba fue considerada no válida en 23 (62,9% del grupo). En 14 de ellos, la prueba fue válida y no mostró hallazgos susceptibles de ser patológicos.
Conclusiones: El test previn© es un método útil y sencillo para la toma de agudeza visual en niños a partir de 2 años, al realizarse en los propios centros educativos por parte de sus educadoras. Esta metodología, si bien discutible cómo único método de cribado, representa una opción a considerar como alerta clínica de ambliopía.
P-05 Experiencia piloto de rehabilitación visual de ambliopía en adulto mediante la aplicación informática Amblyopia iNet
Dres.: David Pablo Piñero Llorens, Carlos Laria Ochaita
Alicante
Dres.: David Pablo Piñero Llorens, Carlos Laria Ochaita
Alicante
Introducción: El desarrollo de las herramientas informáticas en los últimos años ha permitido que se introduzcan nuevas alternativas en el tratamiento de la ambliopía, las cuales se pueden combinar con la terapia de oclusión, la penalización o el uso de filtros de Bangerter. Se trata de la terapia activa con programas informáticos que ejercitan ciertas tareas que favorecen el incremento de la resolución espacial del ojo. Un ejemplo de estas herramientas informáticas es el software HTS Amblyopia iNet, el cual se ha mostrado efectivo para la rehabilitación de la ambliopía en niños (Avram y Stanila, Oftalmologia 2013). Este caso muestra el uso de satisfactoria de esta herramienta por primera vez para la rehabilitación de la ambliopía en un adulto.
Caso clínico: Se muestra el caso de un varón de 35 años de profesión piloto, can ambliopía desde pequeño en ojo izquierdo y operado de LASIK 15 años antes con el fin de eliminar la anisometropía refractiva miópica. En nuestra exploración, el paciente presenta agudeza visual de 0,7 y 1,0 con la corrección -0,50 -1,25 x 120º y +0,25 -0,50 x 90º en ojo derecho e izquierdo, respectivamente. El paciente presentaba una microendotropia en ojo derecho, ausencia de estereopsis y correspondencia retiniana anómala armónica. La sensibilidad al contraste con corrección se hallaba significativamente reducida en ojo derecho. Tras 1 mes de tratamiento con una programación específica para su caso, el paciente acude a consulta con agudeza visual de 1,0 en ambos ojos y refracción de -1,25 x 150º y +0,25 -0,50 x 90º en ojo derecho e izquierdo, respectivamente. Sólo se detectó una mínima diferencia entre ambos ojos en lo que respecta a la sensibilidad al contraste.Conclusiones: El uso del programa informático Amblyopia iNet podría ser una herramienta útil para la rehabilitación de la ambliopía en el adulto. Son necesarios estudios prospectivos y controlados que permitan avalar este resultado piloto.
Caso clínico: Se muestra el caso de un varón de 35 años de profesión piloto, can ambliopía desde pequeño en ojo izquierdo y operado de LASIK 15 años antes con el fin de eliminar la anisometropía refractiva miópica. En nuestra exploración, el paciente presenta agudeza visual de 0,7 y 1,0 con la corrección -0,50 -1,25 x 120º y +0,25 -0,50 x 90º en ojo derecho e izquierdo, respectivamente. El paciente presentaba una microendotropia en ojo derecho, ausencia de estereopsis y correspondencia retiniana anómala armónica. La sensibilidad al contraste con corrección se hallaba significativamente reducida en ojo derecho. Tras 1 mes de tratamiento con una programación específica para su caso, el paciente acude a consulta con agudeza visual de 1,0 en ambos ojos y refracción de -1,25 x 150º y +0,25 -0,50 x 90º en ojo derecho e izquierdo, respectivamente. Sólo se detectó una mínima diferencia entre ambos ojos en lo que respecta a la sensibilidad al contraste.Conclusiones: El uso del programa informático Amblyopia iNet podría ser una herramienta útil para la rehabilitación de la ambliopía en el adulto. Son necesarios estudios prospectivos y controlados que permitan avalar este resultado piloto.
P-06 La función visual de niños futbolistas
Dras.: Silvia Gamboa Saavedra, Lourdes Ruiz
Barcelona
Dras.: Silvia Gamboa Saavedra, Lourdes Ruiz
Barcelona
Propósito: La medición de la estereopsis de los niños que juegan al fútbol en equipos infantiles.
Métodos: 205 niños de 10 a 12 años, 115 jugadores de fútbol de equipos infantiles y 90 niños que no practican deporte. Fueron realizados numerosos test de función visual incluida la medición de la agudeza visual. La estereopsis fue medida de lejos y cerca. La estereopsis lejana fue medida con y sin control del tiempo.
Resultados: La agudeza visual de lejos fue medida en 410 ojos, con corrección óptica en los niños que lo requerían. La estereopsis de cerca estuvo entre 23 a 37 segundos de arco. Los resultados de la estereopsis sin control de tiempo estuvo entre 86 y 72 segundos de arco y bajo control de tiempo, fueron de 98 a 83 segundos de arco. Hemos encontrado diferencias entre niños pertenecientes a equipos infantiles de fútbol y niños que no hacen deporte, principalmente en los test de estereopsis sin control de tiempo.
Conclusiones: Los niños que juegan en los equipos infantiles de fútbol tienen mejor resultados en los ejercicios visuales. La agudeza visual media y la estereopsis a distancia es mejor en estos niños que en los que no practican deporte. Nuestros resultados están en congruencia con estudios previos y la literatura existente.
Métodos: 205 niños de 10 a 12 años, 115 jugadores de fútbol de equipos infantiles y 90 niños que no practican deporte. Fueron realizados numerosos test de función visual incluida la medición de la agudeza visual. La estereopsis fue medida de lejos y cerca. La estereopsis lejana fue medida con y sin control del tiempo.
Resultados: La agudeza visual de lejos fue medida en 410 ojos, con corrección óptica en los niños que lo requerían. La estereopsis de cerca estuvo entre 23 a 37 segundos de arco. Los resultados de la estereopsis sin control de tiempo estuvo entre 86 y 72 segundos de arco y bajo control de tiempo, fueron de 98 a 83 segundos de arco. Hemos encontrado diferencias entre niños pertenecientes a equipos infantiles de fútbol y niños que no hacen deporte, principalmente en los test de estereopsis sin control de tiempo.
Conclusiones: Los niños que juegan en los equipos infantiles de fútbol tienen mejor resultados en los ejercicios visuales. La agudeza visual media y la estereopsis a distancia es mejor en estos niños que en los que no practican deporte. Nuestros resultados están en congruencia con estudios previos y la literatura existente.
P-07 Foseta papilar con retinosquisis macular y agujero lamelar en paciente pediátrico
Dres.: Juan García Campos, Marta Diez Sotelo, Raquel Mansilla Cuñarro, M.ª José Blanco Tejeiro
La Coruña
Dres.: Juan García Campos, Marta Diez Sotelo, Raquel Mansilla Cuñarro, M.ª José Blanco Tejeiro
La Coruña
Introducción: La foseta papilar es una entidad rara, que se presenta en 1/11.000 individuos. Suele ser asintomática, sin embargo el 25-75% de los casos desarrollan desprendimientos maculares serosos, volviéndose sintomáticos entre la 3.ª y 4.ª décadas de la vida, aunque existen algunos casos publicados en niños. El tratamiento es la vitrectomía pars plana con/sin pelado de la membrana limitante interna, con/sin fotocoagulación e inyección de gas.
Caso clínico: Varón de 12 años con pérdida progresiva de agudeza visual en ojo izquierdo, que presentaba un Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad a tratamiento y tenia un defecto refractivo de +2.25 dioptrías esféricas en ojo derecho y +2.50 en ojo izquierdo. A la exploración se evidencia una AV de 1.0 en ojo derecho y de 0.3 en ojo izquierdo. La biomicroscopía del segmento anterior fue normal. En la fundoscopía se evidencia foseta papilar temporal en OI y un levantamiento macular circunscrito. Se realiza una tomografía de coherencia óptica (OCT) que muestra retinosquisis macular con desprendimiento foveal y agujero lamelar externo además de adherencias vítreo-retinianas a nivel de la papila. En revisiones posteriores, inicia resolución espontánea del cuadro, alcanzando una AV de 1 en OD y 0.9 en OI. En la OCT se observa resolucion de la retinosquisis y el desprendimiento neurosensorial, con persistencia de disrupción en la capa elipsoide.
Conclusiones: Presentamos un caso de foseta papilar con afectación macular y repercusión visual en un niño. Aunque existen casos publicados en la literatura en los que se ha producido una resolución espontánea de la maculopatía, esto ocurre con muy baja frecuencia, por lo que la cirugía mediante vitrectomía pars plana con/sin pelado de la membrana limitante interna, asociado o no a la fotocoagulación retiniana, sigue siendo el tratamiento de elección en esta patología.
Caso clínico: Varón de 12 años con pérdida progresiva de agudeza visual en ojo izquierdo, que presentaba un Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad a tratamiento y tenia un defecto refractivo de +2.25 dioptrías esféricas en ojo derecho y +2.50 en ojo izquierdo. A la exploración se evidencia una AV de 1.0 en ojo derecho y de 0.3 en ojo izquierdo. La biomicroscopía del segmento anterior fue normal. En la fundoscopía se evidencia foseta papilar temporal en OI y un levantamiento macular circunscrito. Se realiza una tomografía de coherencia óptica (OCT) que muestra retinosquisis macular con desprendimiento foveal y agujero lamelar externo además de adherencias vítreo-retinianas a nivel de la papila. En revisiones posteriores, inicia resolución espontánea del cuadro, alcanzando una AV de 1 en OD y 0.9 en OI. En la OCT se observa resolucion de la retinosquisis y el desprendimiento neurosensorial, con persistencia de disrupción en la capa elipsoide.
Conclusiones: Presentamos un caso de foseta papilar con afectación macular y repercusión visual en un niño. Aunque existen casos publicados en la literatura en los que se ha producido una resolución espontánea de la maculopatía, esto ocurre con muy baja frecuencia, por lo que la cirugía mediante vitrectomía pars plana con/sin pelado de la membrana limitante interna, asociado o no a la fotocoagulación retiniana, sigue siendo el tratamiento de elección en esta patología.
P-08 Deficiencia visual cerebral (DVC). Etiología y hallazgos oftalmológicos
Dres.: Juan García Campos, Marta Diez Sotelo, Raquel Mansilla Cuñarro, Sara Pose Bazarra
La Coruña
Dres.: Juan García Campos, Marta Diez Sotelo, Raquel Mansilla Cuñarro, Sara Pose Bazarra
La Coruña
Objetivo: Describir las causas y las alteraciones oftalmológicas en niños con DVC atendidos en un hospital de tercer nivel.
Método: Revisión de la historia clínica de pacientes con DVC atendidos en Oftalmología pediátrica en 2014. Recogida de datos demográficos, manifestaciones oculares, neurorradiológicas y electrofisiológicas. Evaluación oftalmológica funcional:Comportamiento visual (cuestionario PreViAs o Dutton), agudeza y campo visual por confrontación (STYCAR); y orgánica: motilidad, refracción, fondo de ojo.
Resultados: Se recogieron 50 pacientes entre 1 y 13 años, 23 (46%) mujeres y 27 (54%) varones. Etiología: encefalopatia hipoxico-isquémica 20 casos (40%), cromosomopatías 10 (20%), consumo de drogas materno 3 (6%), malformaciones cerebrales 3 (6%), hidrocefalia 2 (4%), epilepsia 2 (4%), encefalopatía hipoglucémica 2 (4%), tumor cerebral 1 (2%), infecciones del SNC 1 (2%), enfermedad metabólica 1 (2%), causa no filiada 5 (10%). Defectos neurológicos asociados 48 (96%): retraso psicomotor 34 (68%), prematuridad 17 (34%), hipoacusia 12 (24%), parálisis cerebral 16 (32%), convulsiones 5 (10%), trastornos del espectro autista 4 (8%), hidrocefalia 4 (8%), microcefalia 2 (4%). Manifestaciones oculares: déficit visual severo 24 (48%), leve-moderado 5 (10%), visión normal 20 (40%) y no colabora 1 (2%); estrabismo 40 (80%): endotropia 25 (50%) y exotropia 14 (28%), Nistagmo 4 (8%), movimientos oculares anómalos 5 (10%) y apraxia motora ocular 1 (2%); defectos refractivos significativos: 30 (60%), hipermetropía 14 (28%), miopía 3 (6%) y astigmatismo 12 (24%); alteración fondo de ojo 5 (10%): retinopatía 2 (4%), hipoplasia óptica 3 (6%). Alteraciones en RMN cerebral 25 (50%) y en PEV 5 (10%).
Conclusiones: Encefalopatía hipóxico-isquemica y cromosomopatías son las principales causas de DVC en esta serie, que se acompañan de un déficit visual grave y alteraciones de la motilidad en la mitad de los pacientes.
Método: Revisión de la historia clínica de pacientes con DVC atendidos en Oftalmología pediátrica en 2014. Recogida de datos demográficos, manifestaciones oculares, neurorradiológicas y electrofisiológicas. Evaluación oftalmológica funcional:Comportamiento visual (cuestionario PreViAs o Dutton), agudeza y campo visual por confrontación (STYCAR); y orgánica: motilidad, refracción, fondo de ojo.
Resultados: Se recogieron 50 pacientes entre 1 y 13 años, 23 (46%) mujeres y 27 (54%) varones. Etiología: encefalopatia hipoxico-isquémica 20 casos (40%), cromosomopatías 10 (20%), consumo de drogas materno 3 (6%), malformaciones cerebrales 3 (6%), hidrocefalia 2 (4%), epilepsia 2 (4%), encefalopatía hipoglucémica 2 (4%), tumor cerebral 1 (2%), infecciones del SNC 1 (2%), enfermedad metabólica 1 (2%), causa no filiada 5 (10%). Defectos neurológicos asociados 48 (96%): retraso psicomotor 34 (68%), prematuridad 17 (34%), hipoacusia 12 (24%), parálisis cerebral 16 (32%), convulsiones 5 (10%), trastornos del espectro autista 4 (8%), hidrocefalia 4 (8%), microcefalia 2 (4%). Manifestaciones oculares: déficit visual severo 24 (48%), leve-moderado 5 (10%), visión normal 20 (40%) y no colabora 1 (2%); estrabismo 40 (80%): endotropia 25 (50%) y exotropia 14 (28%), Nistagmo 4 (8%), movimientos oculares anómalos 5 (10%) y apraxia motora ocular 1 (2%); defectos refractivos significativos: 30 (60%), hipermetropía 14 (28%), miopía 3 (6%) y astigmatismo 12 (24%); alteración fondo de ojo 5 (10%): retinopatía 2 (4%), hipoplasia óptica 3 (6%). Alteraciones en RMN cerebral 25 (50%) y en PEV 5 (10%).
Conclusiones: Encefalopatía hipóxico-isquemica y cromosomopatías son las principales causas de DVC en esta serie, que se acompañan de un déficit visual grave y alteraciones de la motilidad en la mitad de los pacientes.
PANELES EN CASOS CLÍNICOS
CC-09 Pars planitis
Dres.: Pablo Plaza Ramos, Marta Bové Gurí, Alejandro Dávila Flores, M.ª Cristina Abascal Azanza
Navarra
Dres.: Pablo Plaza Ramos, Marta Bové Gurí, Alejandro Dávila Flores, M.ª Cristina Abascal Azanza
Navarra
Introducción: La pars planitis es una entidad cuya patogenia radica en la inflamación de la úvea intermedia y del vítreo anterior. Afecta con mas frecuencia a niños y adultos jóvenes, y suele ser un cuadro bilateral normalmente asimétrico. Su etiología mas frecuente es idiopática aunque la base de la enfermedad es de naturaleza autoinmune o infecciosa.
Caso Clínico: Varón de seis años de edad que acudió a urgencias por presentar pérdida gradual de visión bilateral con mayor predominio en ojo izquierdo. Tras objetivarse una baja agudeza visual bilateral, mas acusada en ojo izquierdo, a la exploración destacaba un Tyndall tanto en cámara anterior como en fondo de ojo. La turbidez vítrea predominaba en el ojo izquierdo y apenas permitía diferenciar el polo posterior. Tras evolución y analítica de control serológica, junto a marcadores de autoinmunidad sin hallazgos significativos se concluyó que se trataba de un cuadro de pars planitis idiopático. Ante la escasa mejoría de la sintomatología tras tratamiento corticoideo e inmunosupresor, se decide continuar con terapia biológica con Adalimumab, obteniendo una leve mejoría de los signos inflamatorios y se deja la vitrectomía como última opción terapeútica en caso de que persista la inflamación.
Conclusiones: Las pars planitis son entidades que muy frecuentemente se caracterizan por ser el reflejo de cuadros sistémicos, por lo que un abordaje junto a un médico internista puede ser de gran ayuda. La vitrectomía anterior puede ser una opción terapéutica muy válida aunque, de entrada, se prefiere un tratamiento conservador.
Caso Clínico: Varón de seis años de edad que acudió a urgencias por presentar pérdida gradual de visión bilateral con mayor predominio en ojo izquierdo. Tras objetivarse una baja agudeza visual bilateral, mas acusada en ojo izquierdo, a la exploración destacaba un Tyndall tanto en cámara anterior como en fondo de ojo. La turbidez vítrea predominaba en el ojo izquierdo y apenas permitía diferenciar el polo posterior. Tras evolución y analítica de control serológica, junto a marcadores de autoinmunidad sin hallazgos significativos se concluyó que se trataba de un cuadro de pars planitis idiopático. Ante la escasa mejoría de la sintomatología tras tratamiento corticoideo e inmunosupresor, se decide continuar con terapia biológica con Adalimumab, obteniendo una leve mejoría de los signos inflamatorios y se deja la vitrectomía como última opción terapeútica en caso de que persista la inflamación.
Conclusiones: Las pars planitis son entidades que muy frecuentemente se caracterizan por ser el reflejo de cuadros sistémicos, por lo que un abordaje junto a un médico internista puede ser de gran ayuda. La vitrectomía anterior puede ser una opción terapéutica muy válida aunque, de entrada, se prefiere un tratamiento conservador.
PCC-10 Angioma capilar orbitario
Dres.: Pablo Plaza Ramos, Marta Bové Gurí, Marta Echeverría Palacios, Cynthia Salinas Guerra
Navarra
Dres.: Pablo Plaza Ramos, Marta Bové Gurí, Marta Echeverría Palacios, Cynthia Salinas Guerra
Navarra
Introducción: Los angiomas son tumores vasculares de etiología benigna, mas frecuentes en la infancia y normalmente asintomáticos. Constituyen, de entrada, un reto en su diagnostico diferencial con los linfangiomas. Su tratamiento suele ser conservador salvo que produzcan una florida sintomatología, en cuyo caso se plantea la extirpación quirúrgica.
Caso Clínico: Paciente de diez meses que acudió a urgencias por apreciar sus padres un hematoma llamativo en párpado inferior izquierdo, totalmente asintomático. Tras descartar una posible etiología traumática, fue derivada a nuestro servicio y se valoró el diagnóstico diferencial entre hemangioma y linfangioma orbitario. Tras examen con lámpara de hendidura de polo anterior y fondo de ojo totalmente anodino, se descartó afectación del globo ocular izquierdo. Se realizó estudio de imagen que confirmó el diagnóstico de tumoración orbitaria extraconal en el margen antero inferior de la órbita izquierda compatible con angioma capilar. Se planteó por nuestra parte tratamiento con Propanolol oral y actualmente permanece a la espera de valoración por el servicio de Pediatría.
Conclusiones: Los angiomas palpebrales son entidades que deben ser abordadas de manera multidisciplinar, y cuyo tratamiento es, de entrada, conservador. El rol de los beta bloqueantes orales está siendo cada vez mas importante debido a sus buenos resultados y escasas complicaciones.
Caso Clínico: Paciente de diez meses que acudió a urgencias por apreciar sus padres un hematoma llamativo en párpado inferior izquierdo, totalmente asintomático. Tras descartar una posible etiología traumática, fue derivada a nuestro servicio y se valoró el diagnóstico diferencial entre hemangioma y linfangioma orbitario. Tras examen con lámpara de hendidura de polo anterior y fondo de ojo totalmente anodino, se descartó afectación del globo ocular izquierdo. Se realizó estudio de imagen que confirmó el diagnóstico de tumoración orbitaria extraconal en el margen antero inferior de la órbita izquierda compatible con angioma capilar. Se planteó por nuestra parte tratamiento con Propanolol oral y actualmente permanece a la espera de valoración por el servicio de Pediatría.
Conclusiones: Los angiomas palpebrales son entidades que deben ser abordadas de manera multidisciplinar, y cuyo tratamiento es, de entrada, conservador. El rol de los beta bloqueantes orales está siendo cada vez mas importante debido a sus buenos resultados y escasas complicaciones.
PCC-11 Heterocromía de iris: diagnóstico diferencial
Dres.: Tirsa Elvira López Arroquia, Manuel Morión Grande, Sonia López-Romero Moraleda, Carlos Jesús Doncel Fernández
Almería
Dres.: Tirsa Elvira López Arroquia, Manuel Morión Grande, Sonia López-Romero Moraleda, Carlos Jesús Doncel Fernández
Almería
Introducción: La heterocromía de iris puede aparecer de forma aislada o en el contexto de una condición patológica como rubeola congénita, síndrome de Horner, síndrome de Waardenburg, neurofibromatosis, hemocromatosis, hipomelanosis de Hito, colobomas o tumores de iris.
Casos Clínicos: Caso 1. Niña de 9 años con sordera neurosensorial, poliosis, heterocromía de iris y telecanto. Diagnosticada como Síndrome de Waardenburg tipo 1, dermatosis de herencia autosómica dominante que se presenta en 1 de cada 42000 nacimientos. Caso 2. Niño de 12 años con melanosis oculi, con heterocromía tanto de iris como del fondo de ojo y pigmentación difusa gris-azulada epiescleral en el ojo más oscuro.
Conclusión: La anamnesis detallada, así como una valoración oftalmológica y neurológica completa son necesarias en el diagnóstico diferencial de la heterocromía de iris en niños, que puede deberse a un amplio y variado rango de condiciones.
Casos Clínicos: Caso 1. Niña de 9 años con sordera neurosensorial, poliosis, heterocromía de iris y telecanto. Diagnosticada como Síndrome de Waardenburg tipo 1, dermatosis de herencia autosómica dominante que se presenta en 1 de cada 42000 nacimientos. Caso 2. Niño de 12 años con melanosis oculi, con heterocromía tanto de iris como del fondo de ojo y pigmentación difusa gris-azulada epiescleral en el ojo más oscuro.
Conclusión: La anamnesis detallada, así como una valoración oftalmológica y neurológica completa son necesarias en el diagnóstico diferencial de la heterocromía de iris en niños, que puede deberse a un amplio y variado rango de condiciones.
PCC-12 Síndrome de Pierre Robin y desprendimiento de retina
Dres.: Hugo Ernesto Tapia Quijada, Lorena Fernández Montalvo, Elsa Font Juliá, Encarnación Mengual Verdú
Alicante
Dres.: Hugo Ernesto Tapia Quijada, Lorena Fernández Montalvo, Elsa Font Juliá, Encarnación Mengual Verdú
Alicante
Introducción: El Síndrome de Pierre Robin (SPR) es un síndrome craneofacial caracterizado por micrognatia, paladar hendido y obstrucción respiratoria. Es una anomalia del primer arco branquial y se relaciona a problemas oftalmológicos principalmente esotropía, glaucoma y catarata congénita; también pero menos frecuente podrían presentar degeneraciones vítreo-retinianas y desprendimientos de retina. Presentamos el caso de un niño de 14 años con este síndrome que presenta desprendimiento de retina con desgarro gigante que fue intervenido quirúrgicamente en nuestro hospital
Caso Clínico: Paciente varón de 14 años que acude por urgencias por pérdida de visión en ojo izquierdo (OI), tenía como antecedente de SPR , operado de paladar hendido en la infancia. Al examen presentaba una agudeza visual (AV) con su corrección -2D de 1 en OD y cuenta dedos en OI, la presión intraocular y el polo anterior eran normales. El fondo de ojo mostraba en OD degeneraciones retinianas microquísticas en periferia superior e inferior así como desgarro en a las IX horas. Y en el OI desgarro gigante que comprometía todo la hemirretina superior y desprendimiento de retina con macula off. El paciente fue intervenido del OI para lo cual usamos banda para cerclaje escleral, vitrectomía vía pars plana (VPP), endolaser y aceite de silicona. Y dado el antecedente en OD en el mismo acto se realizó criopexia en zona de desgarro y también en zonas de degeneraciones perificas. La evolución ha sido favorable y actualmente presenta una AV en OI de 0,9 y continua controles en la unidad de Retina.
Conclusiones: El SPR suele presentar alteraciones oftalmológicas siendo una de las más graves los desgarros retinianos gigantes con desprendimiento de retina. En casos de desprendimiento de retina dentro del contexto de este síndrome es importante explorar.
Caso Clínico: Paciente varón de 14 años que acude por urgencias por pérdida de visión en ojo izquierdo (OI), tenía como antecedente de SPR , operado de paladar hendido en la infancia. Al examen presentaba una agudeza visual (AV) con su corrección -2D de 1 en OD y cuenta dedos en OI, la presión intraocular y el polo anterior eran normales. El fondo de ojo mostraba en OD degeneraciones retinianas microquísticas en periferia superior e inferior así como desgarro en a las IX horas. Y en el OI desgarro gigante que comprometía todo la hemirretina superior y desprendimiento de retina con macula off. El paciente fue intervenido del OI para lo cual usamos banda para cerclaje escleral, vitrectomía vía pars plana (VPP), endolaser y aceite de silicona. Y dado el antecedente en OD en el mismo acto se realizó criopexia en zona de desgarro y también en zonas de degeneraciones perificas. La evolución ha sido favorable y actualmente presenta una AV en OI de 0,9 y continua controles en la unidad de Retina.
Conclusiones: El SPR suele presentar alteraciones oftalmológicas siendo una de las más graves los desgarros retinianos gigantes con desprendimiento de retina. En casos de desprendimiento de retina dentro del contexto de este síndrome es importante explorar.
PCC-13 Enfermedad inflamatoria de la órbita pediátrica
Dres.: Patricia Ibáñez Ayuso, Laura Monje Fernández, Miguel Cordero Coma, M.ª Elena Galán Risueño
Burgos
Dres.: Patricia Ibáñez Ayuso, Laura Monje Fernández, Miguel Cordero Coma, M.ª Elena Galán Risueño
Burgos
El pseudotumor orbitario es una entidad clínica de naturaleza inflamatoria que puede manifestarse de forma aguda o crónica. La inflamación afecta a la órbita de forma difusa: dacrioadenitis, miositis, tenonitis, y vasculitis o neuritis. La miositis, es mas frecuente en mujeres, y afecta más el músculo recto medial. Se han descritos casos relacionados con enfermedades infecciosas, enfermedad de Lyme o herpes zoster y también puede ser manifestación de un proceso autoinmune sistémico y en caso de niños ser la presentación inicial de un linfoma. Mujer de 8 años que acude a urgencias por dolor ocular sobretodo OI y diplopía con antecedente 10 dias antes de cuadro gripal y conjuntivitis bilateral en tratamiento con antibiótico tópico y sistémico. A la exploración agudeza visual de OD 0.9-1, OI.0.9-1, restricción de los movimientos oculares sobretodo en abducción y exoftalmos. Se solicita TAC y analítica de urgencias. TAC: Engrosamiento difuso mas en recto medial izquierdo. Inicia tratamiento con corticoides con remisión completa del cuadro, se completa diagnóstico con biopsia de músculo medial izquierdo que descarta patología tumoral. El diagnóstico de la miositis se realiza a partir de los síntomas y signos clínicos complementados por TAC o RNM. La respuesta a los corticoides es por lo general buena e incluso hay casos con resolución espontánea; en otras ocasiones se requieren tratamientos más agresivos como inmunosupresores o radioterapia orbitaria. Debe realizarse siempre diagnostico diferencial con la miositis orbitaria de la enfermedad de Graves, causas infecciosas como la sarcoidosis, tumorales y autoinmunes.
PCC-14 Síndrome de Lowe: resultados oftalmológicos preliminares de un estudio multicéntrico y participativo
Dres.: Ana Llorca Cardeñosa, Jesús Peralta Calvo, Ana Wert Espinosa, Marta Morales Ballus
Barcelona
Dres.: Ana Llorca Cardeñosa, Jesús Peralta Calvo, Ana Wert Espinosa, Marta Morales Ballus
Barcelona
Introducción: El síndrome de Lowe o síndrome oculo-cerebro-renal de Lowe (OCRL) es una enfermedad poco frecuente secundaria a una mutación del gen OCRL1. Presenta un patrón hereditario ligado al X. Objetivos: Describir las manifestaciones oculares y extraoculares mediante la construcción de una base de datos mundial de pacientes diagnosticados de síndrome de Lowe.
Métodos: 37 familias y más de 200 doctores rellenaron online diversos formularios de cada uno de los pacientes, integrándose después todos los datos.
Resultados: 37 pacientes de 5 países con edades comprendidas entre 1 y 40 años en el momento del inicio del estudio fueron incluidos. Un 36% mostró mutaciones de novo del gen OCRL1. Los signos de la enfermedad más frecuentemente diagnosticados al nacimiento fueron la hipotonía (79%) y las cataratas bilaterales (71%). Las manifestaciones oftalmológicas se detectaron durante el primer mes de vida en un 70% de los casos (cataratas bilaterales en un 83,8% y glaucoma en un 16,2%). Todos los pacientes fueron sometidos como mínimo a una cirugía oftalmológica que se complicó en un 21%, destacando sobretodo las complicaciones hemorrágicas secundarias a la disfunción plaquetaria. El 100% de los pacientes presentaron cataratas bilaterales. El diagnóstico de glaucoma se realizó en un 45,94% de los casos, precisando más de la mitad tratamiento quirúrgico.
Conclusión: Este estudio describe las características clínicas de los pacientes diagnosticados de síndrome de Lowe englobados en nuestra base de datos. Resulta interesante para mejorar el conocimiento de la enfermedad, comprender la evolución, el tratamiento y la importancia del consejo genético.
Métodos: 37 familias y más de 200 doctores rellenaron online diversos formularios de cada uno de los pacientes, integrándose después todos los datos.
Resultados: 37 pacientes de 5 países con edades comprendidas entre 1 y 40 años en el momento del inicio del estudio fueron incluidos. Un 36% mostró mutaciones de novo del gen OCRL1. Los signos de la enfermedad más frecuentemente diagnosticados al nacimiento fueron la hipotonía (79%) y las cataratas bilaterales (71%). Las manifestaciones oftalmológicas se detectaron durante el primer mes de vida en un 70% de los casos (cataratas bilaterales en un 83,8% y glaucoma en un 16,2%). Todos los pacientes fueron sometidos como mínimo a una cirugía oftalmológica que se complicó en un 21%, destacando sobretodo las complicaciones hemorrágicas secundarias a la disfunción plaquetaria. El 100% de los pacientes presentaron cataratas bilaterales. El diagnóstico de glaucoma se realizó en un 45,94% de los casos, precisando más de la mitad tratamiento quirúrgico.
Conclusión: Este estudio describe las características clínicas de los pacientes diagnosticados de síndrome de Lowe englobados en nuestra base de datos. Resulta interesante para mejorar el conocimiento de la enfermedad, comprender la evolución, el tratamiento y la importancia del consejo genético.
PCC-15 Enfermedad de Stargardt; el niño que parecía un simulador
Dres.: M.ª Belén Gómez Navarro, Esther Rodrigo Morales, Jorge Salvador Sánchez, M.ª de la Cruz Sánchez Fernández
Almería
Dres.: M.ª Belén Gómez Navarro, Esther Rodrigo Morales, Jorge Salvador Sánchez, M.ª de la Cruz Sánchez Fernández
Almería
Introducción: La enfermedad de Stargardt es una distrofia macular hereditaria que se manifiesta durante la primera o segunda década con afectación bilateral de la visión que puede ser desproporcionada respecto a los cambios maculares observados pudiéndose sospechar que el niño está simulando.
Caso Clínico: Niño de 9 años que acude por disminución brusca de visión La exploración oftalmológica: agudeza visual corregida en ojo derecho 0.16 y ojo izquierdo 0.1, disminución generalizada de la sensibilidad en el campo visual, en alguna ocasión parece adoptar patrón neurológico; fallos aislados en el test de Ishihara. Resto de exploración oftalmológica es normal Interrogando por el entorno familiar: los padres se acaban de separar PEV: primero patologicos, posteriormente son normales ERG normal en dos ocasiones Sospechamos que se trata de un simulador Exploración sistémica normal salvo ANA +1/320 con patrón moteado y anti DNA (-) RMN normal Un año más tarde se evidencian en fondo de ojo pequeñas lesiones amarillentas y la angiografía confirma el diagnóstico de Enfermedad de Stargardt
Conclusiones: A diferencia de otros trastornos de origen psicológico, en la simulación existe ánimo de fraude consciente y razonado pero en los niños no es necesariamente un acto voluntario y los motivos suelen ser emocionales. La simulación es un diagnóstico de exclusión que sólo formularemos cuando tras exploración minuciosa no encontremos nada que justifique lo referido y siempre dispuestos, sobretodo en niños, a cambiar el diagnóstico.
Caso Clínico: Niño de 9 años que acude por disminución brusca de visión La exploración oftalmológica: agudeza visual corregida en ojo derecho 0.16 y ojo izquierdo 0.1, disminución generalizada de la sensibilidad en el campo visual, en alguna ocasión parece adoptar patrón neurológico; fallos aislados en el test de Ishihara. Resto de exploración oftalmológica es normal Interrogando por el entorno familiar: los padres se acaban de separar PEV: primero patologicos, posteriormente son normales ERG normal en dos ocasiones Sospechamos que se trata de un simulador Exploración sistémica normal salvo ANA +1/320 con patrón moteado y anti DNA (-) RMN normal Un año más tarde se evidencian en fondo de ojo pequeñas lesiones amarillentas y la angiografía confirma el diagnóstico de Enfermedad de Stargardt
Conclusiones: A diferencia de otros trastornos de origen psicológico, en la simulación existe ánimo de fraude consciente y razonado pero en los niños no es necesariamente un acto voluntario y los motivos suelen ser emocionales. La simulación es un diagnóstico de exclusión que sólo formularemos cuando tras exploración minuciosa no encontremos nada que justifique lo referido y siempre dispuestos, sobretodo en niños, a cambiar el diagnóstico.
PCC-16 Leucoma corneal vascularizado en conjuntivitis papilar: tratamiento con Anti-Vegf
Dres.: Lorena Fernández Montalvo, Hugo Ernesto Tapia Quijada, Elsa Font Juliá, Encarnación Mengual Verdú
Alicante
Dres.: Lorena Fernández Montalvo, Hugo Ernesto Tapia Quijada, Elsa Font Juliá, Encarnación Mengual Verdú
Alicante
Introducción: La neovascularización (NV) corneal es causa de pérdida de AV por el edema y la opacidad que produce. La córnea es una estructura avascular, sin embargo algunos procesos inflamatorios o la hipoxia provocan un desequilibrio a favor de la sobreexpresión de factores angiogénicos favoreciendo la neovascularización. El VEGF es uno de los más importantes. El Bevacizumab es un anticuerpo monoclonal recombinante humanizado que en aplicación tópica ocular suprime tanto la hemangiogénesis como la linfangiogénesis corneal. La oclusión del neovaso restablece el privilegio inmune de la córnea y mejora la AV al disminuir la opacidad corneal
Caso Clínico: Paciente de 8 años, con antecedentes de uso prolongado de glucorticoides tópicos por conjuntivitis papilar en ambos ojos, que acude vía urgencias por presentar una opacidad corneal en el ojo izquierdo desde hace una semana.Presenta una AV de unidad en OD y de 0.05 en el OI. A la exploración, bajo biomicroscopía, se objetiva inyección cilioconjuntival moderada, una úlcera corneal central de bordes infiltrados con penacho de neovasos que va desde el limbo nasal hasta zona pupilar en el OI, siendo el resto del polo anterior normal. El OD presentaba reacción tarsal papilar, sin otras alteraciones.No presentó alteraciones en el examen del segmento posterior de ambos ojos. Tras la curación de la úlcera corneal infiltrada se administraron tres dosis subconjuntivales de 2,5 mg de Bevacizumab, a lo largo de ocho meses junto con colirio de Bevacizumab cada 12 horas. A los dos meses de la tercera dosis la AVcsc era de 0.8. Al examen con la lámpara de hendidura los neovasos habían disminuido en calibre y extensión
Conclusión: La inyección subconjuntival junto con la administración tópica de Bevacizumab es bien tolerada en niños y permite una disminución importante de la neovascularización corneal. En nuestro caso se produjo un marcado aumento de la AV tras su administración junto con oclusiones horarias del ojo sano.
Caso Clínico: Paciente de 8 años, con antecedentes de uso prolongado de glucorticoides tópicos por conjuntivitis papilar en ambos ojos, que acude vía urgencias por presentar una opacidad corneal en el ojo izquierdo desde hace una semana.Presenta una AV de unidad en OD y de 0.05 en el OI. A la exploración, bajo biomicroscopía, se objetiva inyección cilioconjuntival moderada, una úlcera corneal central de bordes infiltrados con penacho de neovasos que va desde el limbo nasal hasta zona pupilar en el OI, siendo el resto del polo anterior normal. El OD presentaba reacción tarsal papilar, sin otras alteraciones.No presentó alteraciones en el examen del segmento posterior de ambos ojos. Tras la curación de la úlcera corneal infiltrada se administraron tres dosis subconjuntivales de 2,5 mg de Bevacizumab, a lo largo de ocho meses junto con colirio de Bevacizumab cada 12 horas. A los dos meses de la tercera dosis la AVcsc era de 0.8. Al examen con la lámpara de hendidura los neovasos habían disminuido en calibre y extensión
Conclusión: La inyección subconjuntival junto con la administración tópica de Bevacizumab es bien tolerada en niños y permite una disminución importante de la neovascularización corneal. En nuestro caso se produjo un marcado aumento de la AV tras su administración junto con oclusiones horarias del ojo sano.
PCC-17 Miopía galopante en un caso de microesferofaquia
Dras.: Sara Núñez Márquez, M.ª Paz Orts Vila, Elsa Font Juliá, Encarnación Mengual Verdú
Alicante
Dras.: Sara Núñez Márquez, M.ª Paz Orts Vila, Elsa Font Juliá, Encarnación Mengual Verdú
Alicante
Introducción: La esferofaquia o microesferofaquia es una alteración morfológica del cristalino que consiste en un aumento de su diámetro anteroposterior. Clínicamente se manifiesta con alta miopía, longitud axial generalmente normal y cámara estrecha debido a un desplazamiento anterior del complejo iris-cristaliniano. Suele presentarse asociado a síndromes sistémicos (Weill-Marchesani, Marfan, Klinefelter…) siendo la forma aislada muy infrecuente.
Caso Clínico: Niña de 6 años diagnosticada de microesferofaquia a raíz de una miopía progresiva. No presentaba antecedentes sistémicos ni oftalmológicos de interés. Estudio genético negativo. Agudeza visual (AV) 0,6 con -15 D en ambos ojos (AO) (binocular 0,7), presión intraocular (PIO) de 18mmHg AO, cámaras estrechas (2,12 mm en ojo derecho (OD) y 2,20 mm en ojo izquierdo (OI), longitud axial muy levemente aumentada para su edad (22,93 OD y 23,32 D OI) y atrofia generalizada del iris bilateral por el roce con el cristalino.
Conclusiones: Una complicación frecuente de la esferofaquia es el glaucoma agudo de ángulo estrecho. Nuestra paciente presentó 2 picos tensionales (25 y 30 mmHg) por lo que se realizaron iridotomías YAG en AO. Tras las mismas la tensión se estabilizó, aunque la atrofia del iris ha seguido progresando. Tras 2 años de seguimiento, la paciente mantiene una AV estable (con -17 D en AO en lentes de contacto). La extracción del cristalino e implantación de una lente intraocular disminuye el riesgo de cierre angular. Debido al alto riesgo quirúrgico se optó por un tratamiento conservador.
Caso Clínico: Niña de 6 años diagnosticada de microesferofaquia a raíz de una miopía progresiva. No presentaba antecedentes sistémicos ni oftalmológicos de interés. Estudio genético negativo. Agudeza visual (AV) 0,6 con -15 D en ambos ojos (AO) (binocular 0,7), presión intraocular (PIO) de 18mmHg AO, cámaras estrechas (2,12 mm en ojo derecho (OD) y 2,20 mm en ojo izquierdo (OI), longitud axial muy levemente aumentada para su edad (22,93 OD y 23,32 D OI) y atrofia generalizada del iris bilateral por el roce con el cristalino.
Conclusiones: Una complicación frecuente de la esferofaquia es el glaucoma agudo de ángulo estrecho. Nuestra paciente presentó 2 picos tensionales (25 y 30 mmHg) por lo que se realizaron iridotomías YAG en AO. Tras las mismas la tensión se estabilizó, aunque la atrofia del iris ha seguido progresando. Tras 2 años de seguimiento, la paciente mantiene una AV estable (con -17 D en AO en lentes de contacto). La extracción del cristalino e implantación de una lente intraocular disminuye el riesgo de cierre angular. Debido al alto riesgo quirúrgico se optó por un tratamiento conservador.
PCC-18 Diagnóstico de hipoplasia foveal, algo más que una imagen
Dras.: María García Zamora, Hortensia Sánchez Tocino, Ana Villanueva Gómez
Valladolid
Dras.: María García Zamora, Hortensia Sánchez Tocino, Ana Villanueva Gómez
Valladolid
Objetivo: Estudiar la utilidad de la tomografía de coherencia óptica (OCT) cirrus en el estudio de la hipoplasia foveal congénita en niños.
Método: Se describen 20 ojos de 10 niños con hipoplasia foveal de distintas causas. 2 niñas con aniridia congénita, 3 niños con albinismo, 5 niños sin otra patología aparente causante. Se estratifica el grado de hipoplasia, el grosor macular central, la existencia o no de nistagmus y estrabismo y la correlación de estas variables con la agudeza visual.
Resultados: En un ojo se encuentra una hipoplasia grado 2, todos los demás ojos se englobaron en hipoplasias de grados 3 y 4. El grosor macular no se correlaciona con la agudeza visual, aunque si existe una relación significativa con el grado de hipoplasia. La menor agudeza visual se evidencia en los niños con aniridia, seguido de los niños con albinismo. La existencia de nistagmus se relaciona con una menor agudeza visual. Se encuentra un porcentaje de estrabismo del 90%.
Conclusiones: La llegada del OCT ha puesto de manifiesto la existencia de hipoplasias foveales en niños sin una patología ocular sensorial clara, si bien en estos niños es más frecuente la presencia de nistagmus y estrabismo. No existe una relación entre el grosor macular y la agudeza visual, porque niños con muy baja visión tienen menor grosor retiniano central. La agudeza visual disminuye cuanto mayor sea el grado de hipoplasia y así la alteración anatómica a nivel macular.
Método: Se describen 20 ojos de 10 niños con hipoplasia foveal de distintas causas. 2 niñas con aniridia congénita, 3 niños con albinismo, 5 niños sin otra patología aparente causante. Se estratifica el grado de hipoplasia, el grosor macular central, la existencia o no de nistagmus y estrabismo y la correlación de estas variables con la agudeza visual.
Resultados: En un ojo se encuentra una hipoplasia grado 2, todos los demás ojos se englobaron en hipoplasias de grados 3 y 4. El grosor macular no se correlaciona con la agudeza visual, aunque si existe una relación significativa con el grado de hipoplasia. La menor agudeza visual se evidencia en los niños con aniridia, seguido de los niños con albinismo. La existencia de nistagmus se relaciona con una menor agudeza visual. Se encuentra un porcentaje de estrabismo del 90%.
Conclusiones: La llegada del OCT ha puesto de manifiesto la existencia de hipoplasias foveales en niños sin una patología ocular sensorial clara, si bien en estos niños es más frecuente la presencia de nistagmus y estrabismo. No existe una relación entre el grosor macular y la agudeza visual, porque niños con muy baja visión tienen menor grosor retiniano central. La agudeza visual disminuye cuanto mayor sea el grado de hipoplasia y así la alteración anatómica a nivel macular.
PCC-19 Síndrome de CFN mielinizadas, miopía elevada, estrabismo y ambliopía
Dres.: Carlos Jesús Doncel Fernández, Tirsa Elvira López Arroquia, Diego Cuevas Santamaria
Alicante
Dres.: Carlos Jesús Doncel Fernández, Tirsa Elvira López Arroquia, Diego Cuevas Santamaria
Alicante
Se han comunicado casos de capa de fibras nerviosas mielinizadas asociada a miopia elevada, ambliopia con /sin estrabismo asociado. En la mayoria de los casos se ha tratado con correccion y oclusiones con mala agudeza visual final (0.4 en el mejor de los casos). Presentamos un varon de 5 años en seguimiento desde hace 2 en nuestra Unidad. Desde hace 2 años, por esotropia de ojo izquierdo de menos de 5º con visión de menos de 0.1. En fondo de ojo bajo anestesia general se observa extensa mielinizacion de capa de fibras nerviosas. Refraccion con ciclo OD: + 1.00 – 0.50 180º OI: – 8.75 – 3.00 180º. Se inició tratamiento con oclusiones, sin mejoria en la agudeza visual, y posteriormente tratamiento con oclusiones y lente de contacto en ojo izquierdo. En seguimiento actual.
PCC-20 Hallazgos biomicroscópicos en cistinosis nefropática. A propósito de dos casos
Dres.: Marta Diez Sotelo, Juan García Campos, M.ª Teresa Rodríguez Ares, M.ª del Rosario Touriño Peralba
La Coruña
Dres.: Marta Diez Sotelo, Juan García Campos, M.ª Teresa Rodríguez Ares, M.ª del Rosario Touriño Peralba
La Coruña
Introducción: La cistinosis es una rara enfermedad metabólica de origen genético autosómico dominante, que afecta a 3.5/100.0000 recién nacidos vivos. Se caracteriza por la acumulación de cistina en lisosomas de diferentes órganos, principalmente el riñón, pero también en conjuntiva, córnea, úvea y retina. Los pacientes presentan fotofobia, epífora, sensación de cuerpo extraño y disminución de agudeza visual.
Caso Clínico: Presentamos los casos clínicos de dos niños de 5 y 3 años de edad, diagnosticados de cistinosis nefropática, con síndrome de Fanconi y raquitismo secundarios. El nivel de cistina intraleucocitaria era de 1,1 y 3,9 nmol/mg prot respectivamente. En el estudio genético se confirmó la homocigosis para la delección 57 Kb en el gen CTNS. Se inició tratamiento con cisteamina oral y colirio de cisteamina 2 y 3 veces/día respectivamente. La biomicroscopía mediante lámpara de hendidura mostró cristales policromáticos refractivos en el estroma corneal anterior 1,5 y 2 años tras el diagnóstico. A los 4 años del debut de la enfermedad en el primer caso, y a los 2 años en el segundo, ambos presentan un aumento de depósitos estromales corneales y fotofobia, a pesar de haber intensificado el tratamiento con cisteamina tópica a 5 y 4 veces/día respectivamente.
Conclusiones: La cistinosis en su forma infantil o nefropática se diagnostica de media al año de edad del paciente. La confirmación diagnóstica viene dada por los niveles intraleucocitarios de cistina, y es apoyada por otras pruebas como el estudio genético y la clínica. La biomicroscopía óptica supone un instrumento de exploración imprescindible, ya que evidencia el acúmulo de cristales preferentemente en el estroma anterior corneal, de forma centrípeta. En nuestro caso, el tratamiento con cisteamina tópica no ha demostrado eficacia en la disolución de los cristales corneales, si bien podría haber ralentizado el acúmulo de estos.
Caso Clínico: Presentamos los casos clínicos de dos niños de 5 y 3 años de edad, diagnosticados de cistinosis nefropática, con síndrome de Fanconi y raquitismo secundarios. El nivel de cistina intraleucocitaria era de 1,1 y 3,9 nmol/mg prot respectivamente. En el estudio genético se confirmó la homocigosis para la delección 57 Kb en el gen CTNS. Se inició tratamiento con cisteamina oral y colirio de cisteamina 2 y 3 veces/día respectivamente. La biomicroscopía mediante lámpara de hendidura mostró cristales policromáticos refractivos en el estroma corneal anterior 1,5 y 2 años tras el diagnóstico. A los 4 años del debut de la enfermedad en el primer caso, y a los 2 años en el segundo, ambos presentan un aumento de depósitos estromales corneales y fotofobia, a pesar de haber intensificado el tratamiento con cisteamina tópica a 5 y 4 veces/día respectivamente.
Conclusiones: La cistinosis en su forma infantil o nefropática se diagnostica de media al año de edad del paciente. La confirmación diagnóstica viene dada por los niveles intraleucocitarios de cistina, y es apoyada por otras pruebas como el estudio genético y la clínica. La biomicroscopía óptica supone un instrumento de exploración imprescindible, ya que evidencia el acúmulo de cristales preferentemente en el estroma anterior corneal, de forma centrípeta. En nuestro caso, el tratamiento con cisteamina tópica no ha demostrado eficacia en la disolución de los cristales corneales, si bien podría haber ralentizado el acúmulo de estos.
PCC-21 Síndrome de Alagille, transplante multiorgánico y embriotoxon
Dres.: Marta Echeverría Palacios, Marta Bové Gurí, M.ª Antonia Ardanaz Aldabe, José Andonegui Navarro
Navarra
Dres.: Marta Echeverría Palacios, Marta Bové Gurí, M.ª Antonia Ardanaz Aldabe, José Andonegui Navarro
Navarra
Introducción: El síndrome de Alagille es una entidad rara y multiorgánica que consiste principalmente en atresia de las vias bilares, estenosis pulmonar periférica, embriotoxon y retinosis pigmentaria.
Caso Clínico: Presentamos el caso de una niña con síndrome de Alagille por mutación del cromosoma JAG1, con estenosis pulmonar periférica y síndrome de intestino corto. Ha sido necesario proceder a un transplante multivisceral sin bazo. En la exploración oftalmoscópica presenta un embriotoxon posterior bilateral, presentando una buena agudeza visual y siendo el fondo de ojo anodino.
Conclusiones: Ante una paciente que padezca un síndrome, hay que realizar una exploración completa pero dirigida, sin olvidarnos de priorizar las necesidadas vitales de la misma para no condicionar a tratamientos innecesarios.
Caso Clínico: Presentamos el caso de una niña con síndrome de Alagille por mutación del cromosoma JAG1, con estenosis pulmonar periférica y síndrome de intestino corto. Ha sido necesario proceder a un transplante multivisceral sin bazo. En la exploración oftalmoscópica presenta un embriotoxon posterior bilateral, presentando una buena agudeza visual y siendo el fondo de ojo anodino.
Conclusiones: Ante una paciente que padezca un síndrome, hay que realizar una exploración completa pero dirigida, sin olvidarnos de priorizar las necesidadas vitales de la misma para no condicionar a tratamientos innecesarios.
PCC-22 Síndrome GAPO (Growth retardation, Alopecia, Pseudoanodontia, Optic athophy). A propósito de un caso
Dras.: Clara M.ª Córcoles Martínez, Mercedes Méndez Llatas, Paula M.ª Pozo Martos, M.ª Carmen Carrascosa Romero
Albacete
Dras.: Clara M.ª Córcoles Martínez, Mercedes Méndez Llatas, Paula M.ª Pozo Martos, M.ª Carmen Carrascosa Romero
Albacete
Introducción: El síndrome GAPO es un trastorno cuyo acrónimo significa retraso del crecimiento, alopecia, pseudoanodoncia y atrofia óptica. Su causa es una mutación en el gen ANTXR1, encargado de regular la matriz extracelular. Esto condiciona su acumulación en múltiples órganos y tejidos, entre ellos, los ojos, dando lugar a alteraciones de la motilidad extraocular, corneales, retinianas y del nervio óptico, entre otras. Se han descrito menos de cuarenta casos en todo el mundo y, a continuación, presentamos el primer caso comunicado en nuestro país.
Caso Clínico: Niña de 5 años que presenta talla baja, alopecia, anodoncia y facies característica, con desarrollo psicomotor normal. Sus padres son primos hermanos. En la exploración oftalmológica, se observó edema palpebral, obstrucción parcial de la vía lagrimal, endotropia, hipermetropía, astigmatismo, glaucoma, con inserción alta del iris, y atrofia óptica. Debido a los hallazgos, se diagnosticó síndrome GAPO y se solicitó confirmación genética.
Conclusiones: El síndrome GAPO es una enfermedad extremadamente rara. A parte de estar presente en nuestro caso la atrofia óptica, característica pero inconstante en esta entidad, se observan muchas otras alteraciones oculares. Es por ello que la “O” de GAPO debería aludir a «ocular anomalies» en lugar de «optic atrophy». La obstrucción de la vía lagrimal es la primera vez que se describe. Presumiblemente, se debe a infiltración de los tejidos, junto con alteración en la morfología de la nariz. Debido a la naturaleza y gran desconocimiento de este síndrome, el manejo de muchas de estas alteraciones oftalmológicas puede resultar complicado.
Caso Clínico: Niña de 5 años que presenta talla baja, alopecia, anodoncia y facies característica, con desarrollo psicomotor normal. Sus padres son primos hermanos. En la exploración oftalmológica, se observó edema palpebral, obstrucción parcial de la vía lagrimal, endotropia, hipermetropía, astigmatismo, glaucoma, con inserción alta del iris, y atrofia óptica. Debido a los hallazgos, se diagnosticó síndrome GAPO y se solicitó confirmación genética.
Conclusiones: El síndrome GAPO es una enfermedad extremadamente rara. A parte de estar presente en nuestro caso la atrofia óptica, característica pero inconstante en esta entidad, se observan muchas otras alteraciones oculares. Es por ello que la “O” de GAPO debería aludir a «ocular anomalies» en lugar de «optic atrophy». La obstrucción de la vía lagrimal es la primera vez que se describe. Presumiblemente, se debe a infiltración de los tejidos, junto con alteración en la morfología de la nariz. Debido a la naturaleza y gran desconocimiento de este síndrome, el manejo de muchas de estas alteraciones oftalmológicas puede resultar complicado.
PCC-23 Síndrome de Stickler
Dres.: M.ª José Blanco Teijeiro, Marta Diez Sotelo, Juan García Campos
La Coruña
Dres.: M.ª José Blanco Teijeiro, Marta Diez Sotelo, Juan García Campos
La Coruña
Introducción: El síndrome de Stickler es una colagenopatía de origen genético autosómico dominante, caracterizada por hipoplasia facial media, sordera, paladar hendido, secuencia de Pierre Robin y artropatía progresiva. La manifestación oftalmológica más frecuente es la miopía magna, con gran incidencia de desprendimiento de retina regmatógeno, degeneración en empalizada y vitreorretinopatía proliferativa. También se puede asociar a glaucoma, ectopia lentis, catarata, ptosis y estrabismo.
Caso Clínico: Niño de 3 años de edad, diagnosticado de síndrome de Stickler, que presenta al nacimiento un cuadro polimalformativo consistente en microretrognatia, paladar hendido, craneosinostosis, pectus carinatum, hiperlaxitud articular, ductus arterioso persistente e hipoacusia mixta bilateral. El estudio genético confirmó la presencia de una mutación de novo en heterocigosis en el gen COL11A1. A la exploración oftalmológica se evidencia miopía de -10 dioptrías en ambos ojos e hipertropia del ojo derecho. La PIO fue normal en ambos ojos. El diámetro corneal bilateral era de 12,5 mm. Sin hallazgos significativos en polo anterior. La fundoscopía muestra un fondo tigroide pigmentado, con papila normal y desestructuración vítrea. Degeneración en empalizada en perifería retiniana de ambos ojos, que se fotocoagula mediante láser diodo.
Conclusiones: El síndrome de Stickler se ha descrito en relación con mutaciones de genes que controlan la síntesis el colágeno II, IX y XI, presentando un fenotipo muy variable. La clínica sistémica característica, así como una historia familiar de desprendimiento de retina a edades tempranas, debe hacernos sospechar este síndrome. Es importante una valoración oftalmológica precoz y un seguimiento periódico de los pacientes, debido al elevado riesgo de complicaciones graves como el desprendimiento de retina bilateral, con el fin de establecer de forma precoz las medidas profilácticas necesarias.
Caso Clínico: Niño de 3 años de edad, diagnosticado de síndrome de Stickler, que presenta al nacimiento un cuadro polimalformativo consistente en microretrognatia, paladar hendido, craneosinostosis, pectus carinatum, hiperlaxitud articular, ductus arterioso persistente e hipoacusia mixta bilateral. El estudio genético confirmó la presencia de una mutación de novo en heterocigosis en el gen COL11A1. A la exploración oftalmológica se evidencia miopía de -10 dioptrías en ambos ojos e hipertropia del ojo derecho. La PIO fue normal en ambos ojos. El diámetro corneal bilateral era de 12,5 mm. Sin hallazgos significativos en polo anterior. La fundoscopía muestra un fondo tigroide pigmentado, con papila normal y desestructuración vítrea. Degeneración en empalizada en perifería retiniana de ambos ojos, que se fotocoagula mediante láser diodo.
Conclusiones: El síndrome de Stickler se ha descrito en relación con mutaciones de genes que controlan la síntesis el colágeno II, IX y XI, presentando un fenotipo muy variable. La clínica sistémica característica, así como una historia familiar de desprendimiento de retina a edades tempranas, debe hacernos sospechar este síndrome. Es importante una valoración oftalmológica precoz y un seguimiento periódico de los pacientes, debido al elevado riesgo de complicaciones graves como el desprendimiento de retina bilateral, con el fin de establecer de forma precoz las medidas profilácticas necesarias.
PCC-24 Atrofia óptica dominante. A propósito de un caso
Dras.: Jessica Blasco Vergara, Paula M.ª Pozo Martos, Mercedes Méndez Llatas, Clara Córcoles Martínez
Albacete
Dras.: Jessica Blasco Vergara, Paula M.ª Pozo Martos, Mercedes Méndez Llatas, Clara Córcoles Martínez
Albacete
Introducción: La Atrofia Óptica Dominante (AOD) es la forma más frecuente de neuropatía óptica hereditaria. Es debida a la degeneración de células ganglionares de la retina, como consecuencia de mutaciones en el gen OPA1, que codifica una proteína mitocondrial.
Caso Clínico: Niña de 6 años, sin antecedentes personales de interés, remitida para valoración de baja visión que no mejora con graduación. Su madre y abuela materna presentan afectación papilar sin estudio previo. En la exploración sólo resalta que la agudeza visual es de 0,2 bilateral, y que en el fondo de ojo hay una sutil palidez papilar temporal; siendo normal la prueba de visión cromática. Las pruebas complementarias de imagen son normales; en los PEV se objetiva una disminución bilateral de la amplitud. No se realiza Campo Visual (CV) por falta de colaboración; pero se ve un adelgazamiento temporal de capa de fibras nerviosas en ambos ojos mediante OCT. Finalmente, el Estudio Genético (EG) presenta una deleción en el gen OPA1, que también apareció en la madre.
Conclusiones: Ante los sutiles hallazgos en la fundoscopia y la afectación familiar del nervio óptico en tres generaciones consecutivas, sospechamos una neuropatía óptica hereditaria. La AOD se manifiesta con una pérdida visual central lenta y bilateral de inicio en la infancia (escotoma central en CV), una palidez papilar temporal y una discromatopsia tritán. El diagnóstico se apoya en las pruebas complementarias y se confirma mediante EG. El consejo genético es importante; pero las opciones de diagnóstico prenatal y tratamiento preimplantacional son polémicas.
Caso Clínico: Niña de 6 años, sin antecedentes personales de interés, remitida para valoración de baja visión que no mejora con graduación. Su madre y abuela materna presentan afectación papilar sin estudio previo. En la exploración sólo resalta que la agudeza visual es de 0,2 bilateral, y que en el fondo de ojo hay una sutil palidez papilar temporal; siendo normal la prueba de visión cromática. Las pruebas complementarias de imagen son normales; en los PEV se objetiva una disminución bilateral de la amplitud. No se realiza Campo Visual (CV) por falta de colaboración; pero se ve un adelgazamiento temporal de capa de fibras nerviosas en ambos ojos mediante OCT. Finalmente, el Estudio Genético (EG) presenta una deleción en el gen OPA1, que también apareció en la madre.
Conclusiones: Ante los sutiles hallazgos en la fundoscopia y la afectación familiar del nervio óptico en tres generaciones consecutivas, sospechamos una neuropatía óptica hereditaria. La AOD se manifiesta con una pérdida visual central lenta y bilateral de inicio en la infancia (escotoma central en CV), una palidez papilar temporal y una discromatopsia tritán. El diagnóstico se apoya en las pruebas complementarias y se confirma mediante EG. El consejo genético es importante; pero las opciones de diagnóstico prenatal y tratamiento preimplantacional son polémicas.
PCC-25 Distrofia polimorfa posterior unilateral
Dras.: Marta Echeverría Palacios, Marta Bové Gurí, M.ª Antonia Ardanaz Aldabe, Araceli Alcaine Soler
Navarra
Dras.: Marta Echeverría Palacios, Marta Bové Gurí, M.ª Antonia Ardanaz Aldabe, Araceli Alcaine Soler
Navarra
Introducción: Dentro de las distrofias endoteliales corneales, nos encontramos con la distrofia polimorfa posterior, una entidad rara y normalmente bilateral asimétrica, pero que en algunos casos o estadíos puede ser unilateral.
Caso Clínico: Se presenta el caso de una niña de seis años de edad que acude por alteraciones visuales. En la biomicroscopia se observa unas alteraciones endoteliales en el ojo izquierdo sugestivas de distrofia endotelial polimorfa.
Conclusiones: Las distrofias corneales representan un reto para el oftalmólogo en su consulta diaria, debido al elevado número y características similares de las mismas. Por ello es importante establecer el nivel de afectación y su morfología.
Caso Clínico: Se presenta el caso de una niña de seis años de edad que acude por alteraciones visuales. En la biomicroscopia se observa unas alteraciones endoteliales en el ojo izquierdo sugestivas de distrofia endotelial polimorfa.
Conclusiones: Las distrofias corneales representan un reto para el oftalmólogo en su consulta diaria, debido al elevado número y características similares de las mismas. Por ello es importante establecer el nivel de afectación y su morfología.
PCC-26 ¿Y si es una enfermedad mitocondrial?
Dres.: M.ª Eugenia de las Heras Gómez de Liaño, Inmaculada Alonso Alonso, Carmen Gordón Bolaños, Francisco Javier Jiménez Benito
Burgos
Dres.: M.ª Eugenia de las Heras Gómez de Liaño, Inmaculada Alonso Alonso, Carmen Gordón Bolaños, Francisco Javier Jiménez Benito
Burgos
Las mitocondrias son las organelas celulares encargadas de la producción de energia. Una alteración en dichas estructuras se va a traducir en una disfunción muscular, cerebral, cardiaco y/o retinianas (ya que son los tejidos con mayor demanda energética). Se describen los principales síntomas neuro-oftalmológicos de las enfermedades mitocondriales a través de una serie de 5 casos. El diagnóstico es dificil por la gran variedad de síntomas y su presentación en el tiempo. Se han descrito más de 200 mutaciones asociadas a un amplio espectro de enfermedades mitocondriales. Se realiza una revisión bibliográfica para conocer las indicaciones de los métodos diagnósticos disponibles (biopsia muscular y genética molecular). Actualmente no hay tratamiento curativo, pero es importante el diagnóstico correcto para evitar tratamientos erroneos y dar consejo genético.
PCC-27 Drusas del nervio óptico en niños
Dra.: Esther Santos Blanco
Tarragona
Dra.: Esther Santos Blanco
Tarragona
Introducción: Las drusas son un problema congénito del nervio óptico y hasta el momento su detección no requería de estudios ulteriores. Se pueden presentar como concreciones brillantes en la cabeza el nervio óptico o ser ocultas y aparecer como un disco congestivo sin otros signos de sospecha, en este último caso se plantea el diagnóstico diferencial con el papiledema y otras neuropatías.
Material y métodos: Se presenta una serie de 9 casos de pacientes con drusas del nervio óptico diagnosticados en las consultas de oftalmología pediátrica del HSJR. La sospecha fue clínica a partir del examen funduscópico y se confirmó mediante ecografía ocular, posteriormente se les realizó una campimetría 24.2 y un OCT.
Resultados: La muestra de los pacientes recogidos con drusas del nervio óptico está formada por 6 mujeres y 3 varones con un rango de edad de 6 a 17 años, siendo la edad media de 11 años. El motivo de consulta más frecuente fue cefalea y ambliopía. En 3 de ellos se realizaron pruebas de imagen, por sospecha de papiledema. La AVcc fue de 1 en todos ellos excepto los casos que consultaron por ambliopía. De los 9 casos 3 fueron unilaterales y 6 bilaterales. Sólo en uno de los casos se detectó la presencia de drusas en superficie con autofluorescencia +. En 1 de los 6 casos en los que se pudo realizar campimetría se observó la presencia de defectos campimétricos. Se les realizó OCT a 7 pacientes de los cuales en 1 de ellos se encontraron defectos en la capa de fibras.
Conclusiones: La frecuencia de drusas en la edad pediátrica y sus posibles consecuencias en el adulto son desconcidos. Las drusas del nervio óptico se han considerado habitualmente como un hallazgo clínico sin relevancia, sin embargo su presencia puede implicar defectos campimétricos y de la capa de fibras que pueden estar presentes desde edades muy tempranas. Por ello sería recomendable realizar seguimiento con campimetría y OCT en estos pacientes para determinar si existe progresión de estos defectos.
Material y métodos: Se presenta una serie de 9 casos de pacientes con drusas del nervio óptico diagnosticados en las consultas de oftalmología pediátrica del HSJR. La sospecha fue clínica a partir del examen funduscópico y se confirmó mediante ecografía ocular, posteriormente se les realizó una campimetría 24.2 y un OCT.
Resultados: La muestra de los pacientes recogidos con drusas del nervio óptico está formada por 6 mujeres y 3 varones con un rango de edad de 6 a 17 años, siendo la edad media de 11 años. El motivo de consulta más frecuente fue cefalea y ambliopía. En 3 de ellos se realizaron pruebas de imagen, por sospecha de papiledema. La AVcc fue de 1 en todos ellos excepto los casos que consultaron por ambliopía. De los 9 casos 3 fueron unilaterales y 6 bilaterales. Sólo en uno de los casos se detectó la presencia de drusas en superficie con autofluorescencia +. En 1 de los 6 casos en los que se pudo realizar campimetría se observó la presencia de defectos campimétricos. Se les realizó OCT a 7 pacientes de los cuales en 1 de ellos se encontraron defectos en la capa de fibras.
Conclusiones: La frecuencia de drusas en la edad pediátrica y sus posibles consecuencias en el adulto son desconcidos. Las drusas del nervio óptico se han considerado habitualmente como un hallazgo clínico sin relevancia, sin embargo su presencia puede implicar defectos campimétricos y de la capa de fibras que pueden estar presentes desde edades muy tempranas. Por ello sería recomendable realizar seguimiento con campimetría y OCT en estos pacientes para determinar si existe progresión de estos defectos.
PCC-28 Síndrome de Morsier
Dra.: Esther Santos Blanco
Tarragona
Dra.: Esther Santos Blanco
Tarragona
Introducción: El síndrome de Morsier se caracteriza por la presencia de hipoplasia o agenesia del nervio óptico, displasia septooptica e hipopituitarsmo. Esta tríada completa se presenta en aproximadamente un 30% de los casos y en el resto de casos una de las dos últimas características no está presente.
Caso Clínico: Paciente de 9 años con antecedente de hipopituitarismo (diabetes insipida+hipotiroidismo+ insuficiencia suprarrenal) y displasia septoóptica desde el nacimiento que acude para control. La AV con corrección es de PL en OD y 0.5 en OI, con nystagmus horizontal, ETD y DPAR en OD. En el fondo de ojo se aprecia una hipoplasia de ambos nervios ópticos.
Conclusión: Las complicaciones derivadas del síndrome de Morsier son consecuencia del déficit hormonal y de la afectación cerebral y del nervio óptico. A nivel oftalmológico puede presentarse en forma de nystagmus, estrabismo, baja visión y en el fondo de ojo se pueden apreciar una hipoplasia (lo más frecuente) o agenesia del nervio óptico. Aunque el pronóstico de la enfermedad depende sobre todo del grado de afectación de las estructuras cerebrales, la detección precoz puede evitar los daños derivados del déficit hormonal que pueden afectar al neurodesarrollo y emprender medidas tempranas para favorecer la estimulación y el aprendizaje en estos niños. La hipolasia del nervio óptico siempre está presente por lo que en muchas ocasiones son los signos oftalmológicos los que pueden orientar el diagnóstico, por ello el médico oftalmólogo debe conocer este síndrome y los déficits hormonales y neurológicos asociados.
Caso Clínico: Paciente de 9 años con antecedente de hipopituitarismo (diabetes insipida+hipotiroidismo+ insuficiencia suprarrenal) y displasia septoóptica desde el nacimiento que acude para control. La AV con corrección es de PL en OD y 0.5 en OI, con nystagmus horizontal, ETD y DPAR en OD. En el fondo de ojo se aprecia una hipoplasia de ambos nervios ópticos.
Conclusión: Las complicaciones derivadas del síndrome de Morsier son consecuencia del déficit hormonal y de la afectación cerebral y del nervio óptico. A nivel oftalmológico puede presentarse en forma de nystagmus, estrabismo, baja visión y en el fondo de ojo se pueden apreciar una hipoplasia (lo más frecuente) o agenesia del nervio óptico. Aunque el pronóstico de la enfermedad depende sobre todo del grado de afectación de las estructuras cerebrales, la detección precoz puede evitar los daños derivados del déficit hormonal que pueden afectar al neurodesarrollo y emprender medidas tempranas para favorecer la estimulación y el aprendizaje en estos niños. La hipolasia del nervio óptico siempre está presente por lo que en muchas ocasiones son los signos oftalmológicos los que pueden orientar el diagnóstico, por ello el médico oftalmólogo debe conocer este síndrome y los déficits hormonales y neurológicos asociados.
PCC-29 Síndrome de DeMorsier asociado a Síndrome de Duane tipo I
Dras.: Elena Jarrín Hernández, Laura Díez Álvarez
Madrid
Dras.: Elena Jarrín Hernández, Laura Díez Álvarez
Madrid
Introducción: La displasia septo-óptica o Síndrome de DeMorsier consiste en la asociación de hipoplasia de los nervios ópticos y agenesia del septum pellucidum. El síndrome de Duane se produce por una agenesia del núcleo del VI par craneal.
Caso Clínico: Varón de de 4 años diagnosticado de endotropía congénita y ambliopía, había estado en tratamiento con oclusiones y atropina sin mejoría. Presentaba una agudeza visual mejor corregida (AV) Cardiff a 1m de 0,8 en OD y movimiento de manos por su ojo izquierdo (OI). Al explorar las pupilas, se observa un DPAR 4+/4 en OI. En la exploración de la motilidad se diagnostica un síndrome de Duane tipo I izquierdo con downshoot. En la funduscopia se observa una hipoplasia papilar izquierda, siendo el OD normal. Se solicita una resonancia magnética nuclear (RMN) descubriendo una agenesia del septum pellucidum. Es valorado por endocrino para estudio hormonal que de momento es normal. Se realiza retroinserción del recto medio izquierdo a 6 mm + Split de recto lateral izquierdo con retroinserción a 4mm. En el postoperatorio no se aprecia downshoot y está en ortotropia.
Conclusion: Una alteración en la embriogénesis entre la cuarta y la décima semana pudo conducir a la asociación de estas dos síndromes. En nuestro caso, no existen antecedentes tóxicos, prematuridad ni baja edad maternal, si bien fue una primera gestación. Existe otro caso publicado de asociación de DeMorsier y Duane con hipoplasia bilateral de los nervios ópticos y déficit de GH. Es fundamental tener presente esta entidad y su asociación con alteraciones endocrinas tratables.
Caso Clínico: Varón de de 4 años diagnosticado de endotropía congénita y ambliopía, había estado en tratamiento con oclusiones y atropina sin mejoría. Presentaba una agudeza visual mejor corregida (AV) Cardiff a 1m de 0,8 en OD y movimiento de manos por su ojo izquierdo (OI). Al explorar las pupilas, se observa un DPAR 4+/4 en OI. En la exploración de la motilidad se diagnostica un síndrome de Duane tipo I izquierdo con downshoot. En la funduscopia se observa una hipoplasia papilar izquierda, siendo el OD normal. Se solicita una resonancia magnética nuclear (RMN) descubriendo una agenesia del septum pellucidum. Es valorado por endocrino para estudio hormonal que de momento es normal. Se realiza retroinserción del recto medio izquierdo a 6 mm + Split de recto lateral izquierdo con retroinserción a 4mm. En el postoperatorio no se aprecia downshoot y está en ortotropia.
Conclusion: Una alteración en la embriogénesis entre la cuarta y la décima semana pudo conducir a la asociación de estas dos síndromes. En nuestro caso, no existen antecedentes tóxicos, prematuridad ni baja edad maternal, si bien fue una primera gestación. Existe otro caso publicado de asociación de DeMorsier y Duane con hipoplasia bilateral de los nervios ópticos y déficit de GH. Es fundamental tener presente esta entidad y su asociación con alteraciones endocrinas tratables.
PCC-30 Diplopía ocasional como presentación de la malformación de Arnold-Chiari tipo 1
Dra.: Esther Santos Blanco
Tarragona
Dra.: Esther Santos Blanco
Tarragona
Introducción: La malformación de Arnold-chiari consiste en la herniación de parte del contenido del cerebelo y del tallo cerebral a través del foramen magno. Según las estructuras implicadas se clasifican del 1 al 5 siendo las más frecuentes las 2 primeras. El diagnóstico inicial es de sospecha a partir de la clínica, la forma de presentación más habitual es la cefalea, los transtornos sensitivos, vértigo, hipoacusia, parálisis pares craneales… A nivel oftalmológico los síntomas más frecuentes son el nistagmus y la diplopía (sobre todo horizontal).
Caso Clínico: Paciente de 13 años con diplopia binocular vertical ocasional de 2 semanas de evolución. En la exploración presentaba una HTD de 5-10º, el TC fue normal pero la RMN demostró un descenso de las amígadalas cerebelosas (Malformación de Arnold-Chiari tipo1).
Conclusiones: Dada la heterogeineidad de la clínica es importante tener en cuenta el diagnóstico de Arnold-Chiari ante un paciente con cefalea, nistagmus o diplopía, sobre todo en los niños en los que las lesiones vasculares son muy infrecuentes. Característicamente la diplopía puede ser inconstante y aunque la forma más frecuente es la diplopía horizontal hay descritos casos de diplopía vertical. Cabe destacar que la malformación de Arnold Chiari puede pasar desapercibida en el TC y es necesario completar el estudio con RMN para el diagnóstico.
Caso Clínico: Paciente de 13 años con diplopia binocular vertical ocasional de 2 semanas de evolución. En la exploración presentaba una HTD de 5-10º, el TC fue normal pero la RMN demostró un descenso de las amígadalas cerebelosas (Malformación de Arnold-Chiari tipo1).
Conclusiones: Dada la heterogeineidad de la clínica es importante tener en cuenta el diagnóstico de Arnold-Chiari ante un paciente con cefalea, nistagmus o diplopía, sobre todo en los niños en los que las lesiones vasculares son muy infrecuentes. Característicamente la diplopía puede ser inconstante y aunque la forma más frecuente es la diplopía horizontal hay descritos casos de diplopía vertical. Cabe destacar que la malformación de Arnold Chiari puede pasar desapercibida en el TC y es necesario completar el estudio con RMN para el diagnóstico.
PCC-31 Glioma óptico en un paciente con neurofibromatosis tipo 1: un caso clínico
Dres.: Luis Violante, Sónia Campos, Fausto Carvalheira, Joao Paulo Castro Sousa
Portugal
Dres.: Luis Violante, Sónia Campos, Fausto Carvalheira, Joao Paulo Castro Sousa
Portugal
Introducción: La neurofibromatosis-1 es una enfermedad hereditaria autosomial dominante en el 50-70% de los casos. Se produce una alteración del crecimiento de tejido derivado del neuroectodermo debido a la mutación de un gen supresor de tumor.
Caso Clínico: Se presenta el caso de un paciente de catorce años de edad com neurofibromatosis tipo 1. La exploración oftalmológica reveló, mediante resonancia nuclear magnética, la presencia de un glioma de curso silente en el nervio óptico del ojo izquierdo.
Conclusiones: La neurofibromatosis-1 produce múltiples manifestaciones en el campo oftalmológico, siendo los gliomas de la vía óptica los tumores del sistema nervioso central más frecuentes en la enfermedad. Por lo general suelen afectar al quiasma y su curso suele ser indolente, aceptándose un tratamento conservador con seguimiento estrecho hasta que se detecte progresión.
Caso Clínico: Se presenta el caso de un paciente de catorce años de edad com neurofibromatosis tipo 1. La exploración oftalmológica reveló, mediante resonancia nuclear magnética, la presencia de un glioma de curso silente en el nervio óptico del ojo izquierdo.
Conclusiones: La neurofibromatosis-1 produce múltiples manifestaciones en el campo oftalmológico, siendo los gliomas de la vía óptica los tumores del sistema nervioso central más frecuentes en la enfermedad. Por lo general suelen afectar al quiasma y su curso suele ser indolente, aceptándose un tratamento conservador con seguimiento estrecho hasta que se detecte progresión.
PCC-32 Parálisis de la mirada conjugada como debut de enfermedad desmielinizante
Dras.: Silvia Vírseda Moreno, Mar González Manrique, Mercedes Milner Bañón, Sonsoles Lafuente Ortiz
Madrid
Dras.: Silvia Vírseda Moreno, Mar González Manrique, Mercedes Milner Bañón, Sonsoles Lafuente Ortiz
Madrid
Introducción: La presencia de una parálisis de la mirada conjugada suele deberse a una lesión del núcleo abducens ipsilateral. Las lesiones que afectan a esta área son relativamente raras y las causas incluyen infartos, tumores, enfermedad desmielinizante y traumatismos.
Caso Clínico: Paciente de 25 años de edad sin antecedentes médicos de interés que acudió a urgencias por visión borrosa. En la exploración oftalmológica presentaba una parálisis de la mirada conjugada izquierda con nistagmus horizontal en dextroversión que se transformaba en vertical en supraducción. La agudeza visual era de 1 en ambos ojos. No presentaba exotropia ni endotropia, ni tampoco alteración en la exploración de la motilidad ocular intrínseca. En el examen neurológico destacaba una parálisis facial periférica izquierda junto con un Romberg ligeramente inestable. El hemograma, bioquímica y serologías resultaron normales y en el estudio del líquido cefalorraquídeo se observó una cantidad moderada de células inflamatorias. Se realizó estudio mediante resonancia magnética en el que aparecían varias lesiones infra y supratentoriales, algunas de ellas en hemiprotuberancia izquierda y derecha y en el suelo del cuarto ventrículo, compatibles con enfermedad desmielinizante. La evolución fue satisfactoria, pues se normalizaron las alteraciones de la motilidad ocular extrínseca y se resolvió la parálisis facial, sin requerir ningún tratamiento. Actualmente el paciente está en seguimiento por el servicio de Neurología.
Conclusión: Las parálisis oculomotoras en pacientes jóvenes, asociadas o no a otros signos neurológicos, están con frecuencia asociadas a patología desmielinizante y habitualmente tienen una recuperación espontánea. Un examen neuro-oftalmológico detallado a menudo ofrece un diagnóstico neuroanatómico altamente específico.
Caso Clínico: Paciente de 25 años de edad sin antecedentes médicos de interés que acudió a urgencias por visión borrosa. En la exploración oftalmológica presentaba una parálisis de la mirada conjugada izquierda con nistagmus horizontal en dextroversión que se transformaba en vertical en supraducción. La agudeza visual era de 1 en ambos ojos. No presentaba exotropia ni endotropia, ni tampoco alteración en la exploración de la motilidad ocular intrínseca. En el examen neurológico destacaba una parálisis facial periférica izquierda junto con un Romberg ligeramente inestable. El hemograma, bioquímica y serologías resultaron normales y en el estudio del líquido cefalorraquídeo se observó una cantidad moderada de células inflamatorias. Se realizó estudio mediante resonancia magnética en el que aparecían varias lesiones infra y supratentoriales, algunas de ellas en hemiprotuberancia izquierda y derecha y en el suelo del cuarto ventrículo, compatibles con enfermedad desmielinizante. La evolución fue satisfactoria, pues se normalizaron las alteraciones de la motilidad ocular extrínseca y se resolvió la parálisis facial, sin requerir ningún tratamiento. Actualmente el paciente está en seguimiento por el servicio de Neurología.
Conclusión: Las parálisis oculomotoras en pacientes jóvenes, asociadas o no a otros signos neurológicos, están con frecuencia asociadas a patología desmielinizante y habitualmente tienen una recuperación espontánea. Un examen neuro-oftalmológico detallado a menudo ofrece un diagnóstico neuroanatómico altamente específico.
PCC-33 ¿Neuropatía óptica tóxica, nutricional o glaucomatosa? a propósito de un caso
Dres.: Susana Perucho Martínez, Elena Martín Giral, Javier San Román Llorens, Nicolás Toledano Fernández
Madrid
Dres.: Susana Perucho Martínez, Elena Martín Giral, Javier San Román Llorens, Nicolás Toledano Fernández
Madrid
Introduccion: En muchas ocasiones el diagnóstico diferencial de las neuropatías ópticas puede llegar a ser complejo. Una adecuada y completa historia clínica puede acercarnos al diagnóstico clínico correcto. Fármacos como el interferón alfa (TNF α) para el tratamiento de las hepatitis así como otras enfermedades sistémicas pueden ser responsables de neuropatías ópticas.
Caso Clínico: Varón de 50 años miope magno con hepatitis C que recibió tratamiento con interferón alfa durante 6 meses. Como antecedentes presentaba una gastritis crónica, anemia perniciosa y cirrosis hepática. Estaba diagnosticado de glaucoma crónico de ángulo abierto moderado en tratamiento con hipotensores. Campos visuales (CV) tubulares. Presiones intraoculares (PIO) de 10/11 mmHg y excavación papilar (E/P) de 0.9 y 0.7. Agudeza visual (AV) de movimiento de mano (MM) y 0.5 En 2010 comienza a mejorar espectacularmente la agudeza visual (AV) y el CV llegando en 2014 a AV de 0.4/0.9 y CV 10-2 casi normales. Interrogando al paciente refiere incorporación en su medicación habitual vitamina B12 como tratamiento de su anemia perniciosa.
Conclusion: Probablemente estemos ante una neuropatía óptica nutricional superpuesta a otra neuropatía de probable etiología glaucomatosa y/o tóxica por el uso del TNF ?. Es necesario conocer la PIO basal antes de hacer un diagnóstico de glaucoma y poner especial atención a los casos de CV atípicos en pacientes jóvenes que progresan a pesar del correcto control de la PIO. Asimismo especial atención a la historia clínica del paciente incluyendo su medicación habitual. Todo ello nos ayudará a hacer un correcto diagnóstico diferencial en patologías de manejo etiologíco complejo para acercarnos en lo posible al tratamiento correcto.
Caso Clínico: Varón de 50 años miope magno con hepatitis C que recibió tratamiento con interferón alfa durante 6 meses. Como antecedentes presentaba una gastritis crónica, anemia perniciosa y cirrosis hepática. Estaba diagnosticado de glaucoma crónico de ángulo abierto moderado en tratamiento con hipotensores. Campos visuales (CV) tubulares. Presiones intraoculares (PIO) de 10/11 mmHg y excavación papilar (E/P) de 0.9 y 0.7. Agudeza visual (AV) de movimiento de mano (MM) y 0.5 En 2010 comienza a mejorar espectacularmente la agudeza visual (AV) y el CV llegando en 2014 a AV de 0.4/0.9 y CV 10-2 casi normales. Interrogando al paciente refiere incorporación en su medicación habitual vitamina B12 como tratamiento de su anemia perniciosa.
Conclusion: Probablemente estemos ante una neuropatía óptica nutricional superpuesta a otra neuropatía de probable etiología glaucomatosa y/o tóxica por el uso del TNF ?. Es necesario conocer la PIO basal antes de hacer un diagnóstico de glaucoma y poner especial atención a los casos de CV atípicos en pacientes jóvenes que progresan a pesar del correcto control de la PIO. Asimismo especial atención a la historia clínica del paciente incluyendo su medicación habitual. Todo ello nos ayudará a hacer un correcto diagnóstico diferencial en patologías de manejo etiologíco complejo para acercarnos en lo posible al tratamiento correcto.
PCC-34 Neurosífilis, papiledema bilateral
Dras.: Laura Monje Fernández, M.ª Elena Galán Risueño, Amancia Mateos Hernández, M.ª del Carmen Riveira Rodríguez
León
Dras.: Laura Monje Fernández, M.ª Elena Galán Risueño, Amancia Mateos Hernández, M.ª del Carmen Riveira Rodríguez
León
La prevalencia de la enfermedad luetica ha disminuido en las últimas décadas, siendo muy infrecuente la detención en países desarrollados de casos evolucionados. Clínicamente la sífilis podemos clasificarla en varias etapas: primaria, secundaria, tercera y cuaternaria. Su principal forma de presentación es con afectación cutánea, en casos de sífilis secundaria puede encontrarse afectación del sistema nervioso central e incluso ocular. Las manifestaciones oculares representan un ínfimo porcentaje, siendo la neuritis óptica poco frecuente en este grupo. Las graves consecuencias del retraso de tratamiento y la buena respuesta terapéutica si se actúa a tiempo, obligan a los clínicos a tener presente este diagnostico y una actitud de sospecha clínica. Varón de 46 años que acude a urgencias por disminución de agudeza visual en OI de 2-3 días de evolución sin dolor ocular, ni cefalea la exploración AV en OD:1 y OI:0,6 y edema de papila bilateral mayor en OI. Se realiza campo visual con escotoma paracecal y TAC craneal en el que no se detecta patología. Se solicita analítica con serología que es positiva para Lues en suero y en LCR, diagnosticándose al paciente de neuritis óptica luetica iniciándose tratamiento antibiótico con penicilina sódica intravenosa con resolución del cuadro. A los 6 meses campo visual sin alteraciones. Es importante una búsqueda activa y precoz en cuadro clínicos sospechosos, puesto que un diagnostico temprano y un tratamiento oportuno consiguen una buena respuesta clínica sin secuelas en muchos casos.
PCC-35 Meningioma de la vaina del nervio óptico
Dres.: M.ª Elena Galán Risueño, Laura Monje Fernández, Javier Fernández Fernández, Belén Clavera de la Gándara
León
Dres.: M.ª Elena Galán Risueño, Laura Monje Fernández, Javier Fernández Fernández, Belén Clavera de la Gándara
León
Los meningiomas de la vaina del nervio óptico (MVNO) son una entidad poco frecuente que constituye alrededor del 1-2% de todos los meningiomas. Su localización en el NO puedo producir disminución de la visión, proptosis, edema de papila y defectos del campo visual entre otros. Su tratamiento a día de hoy controvertido. Mujer de 64 años vista en consulta de neuroftalmología por episodios repetidos de amaurosis fugax. A la exploración agudeza visual (AV) de 1, y edema de papila en OI, por lo que se comienza tratamiento con corticoides hasta la remisión del cuadro y se solicita resonancia magnética (RM) que fue informada como engrosamiento crónico de la vaina del nervio óptico retrobulbar. A los 3 años acude por nuevo episodio de disminución de AV, encontrándose a la exploración edema de papila en OI y con un campo visual alterado por lo que se comienza tratamiento con corticoides y se solicita nueva RM que es informada como MVNO. Actualmente la paciente se encuentra pendiente de tratamiento. El diagnóstico de MVNO se establece por una clínica sospechosa y hallazgos característicos en pruebas de imagen y funcionales. El desarrollo en los últimos años de la Tomografía Computerizada (TC) y la Resonancia Magnética (RM) han facilitado el diagnostico de estos tumores en estadios mas precoces en los que es posible tratamientos menos agresivos. Las imágenes son típicas, destacando un engrosamiento del nervio óptico que puede acompañarse de calcificaciones intratumorales rodeando al nervio óptico.
PCC-36 Alteraciones neuro-oftalmológicas en una romboencefalitis por VHS. Cómo llegar al diagnóstico
Dras.: Laura Blanca Alfaya Muñoz, Sonia López-Romero Moraleda, Ángela Barrajón Rodríguez, Edgar Javier Infantes Molina
Ciudad Real
Dras.: Laura Blanca Alfaya Muñoz, Sonia López-Romero Moraleda, Ángela Barrajón Rodríguez, Edgar Javier Infantes Molina
Ciudad Real
Introducción: La encefalitis es un proceso inflamatorio agudo del parénquima cerebral. Su prevalencia por virus del herpes simple (VHS) es de un 10-20% de todos los casos de encefalitis virales en Estados Unidos. Los signos clínicos característicos son fiebre y focalidad neurológica que puede afectar a los pares craneales y al sistema vestibular, ambos de comienzo agudo y con preferencia por el lóbulo temporal.
Caso Clínico: Presentamos el caso clínico de una mujer de 66 años con diplopía binocular y mareo por afectación de los pares craneales III, IV y VI del OD causada por romboencefalitis secundaria a un foco infeccioso ótico derecho y parálisis facial del mismo lado sin otros signos de focalidad neurológica, cuyo causante probable fue un virus herpes simple. La paciente presentaba agudeza visual de la unidad en ambos ojos, endotropía e hipotropía de OD, limitación de la supradución del mismo ojo, tortícolis cabeza-hombro izquierdo y nistagmus horizonto-rotatorio. En la biomicroscopía el polo anterior y el fondo de ojo eran estrictamente normales. Tras tratamiento de su encefalitis desaparece la parálisis facial y la diplopia en posición primaria de la mirada se compensa con prisma.
Conclusiones: La encefalitis herpética puede acompañarse de afectación del sistema nervioso periférico (parálisis de Bell) o de una polineuritis craneal, siendo la hipoestesia transitoria del trigémino y la disfunción vestibular los signos predominantes de esta enfermedad. La diplopia es variable, puede recuperarse espontáneamente o plantear un prisma en un primer tiempo a la espera de una posible cirugía.
Caso Clínico: Presentamos el caso clínico de una mujer de 66 años con diplopía binocular y mareo por afectación de los pares craneales III, IV y VI del OD causada por romboencefalitis secundaria a un foco infeccioso ótico derecho y parálisis facial del mismo lado sin otros signos de focalidad neurológica, cuyo causante probable fue un virus herpes simple. La paciente presentaba agudeza visual de la unidad en ambos ojos, endotropía e hipotropía de OD, limitación de la supradución del mismo ojo, tortícolis cabeza-hombro izquierdo y nistagmus horizonto-rotatorio. En la biomicroscopía el polo anterior y el fondo de ojo eran estrictamente normales. Tras tratamiento de su encefalitis desaparece la parálisis facial y la diplopia en posición primaria de la mirada se compensa con prisma.
Conclusiones: La encefalitis herpética puede acompañarse de afectación del sistema nervioso periférico (parálisis de Bell) o de una polineuritis craneal, siendo la hipoestesia transitoria del trigémino y la disfunción vestibular los signos predominantes de esta enfermedad. La diplopia es variable, puede recuperarse espontáneamente o plantear un prisma en un primer tiempo a la espera de una posible cirugía.
PCC-37 ¿Papiledema o pseudopapiledema? Uso de la OCT-SD como prueba diagnóstica en las drusas del nervio óptico
Dres.: Raquel Lapuente Monjas, José Alberto Reche Sainz, Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, José Javier San Román Llorens
Madrid
Dres.: Raquel Lapuente Monjas, José Alberto Reche Sainz, Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, José Javier San Román Llorens
Madrid
Objetivo: Evaluar la tomografía de coherencia óptica de dominio espectral (SD-OCT) como herramienta para el diagnóstico diferencial del pseudopapiledema secundario a drusas ocultas del nervio óptico.
Método: Estudio descriptivo de una serie de 12 pacientes pediátricos afectos de drusas ocultas del nervio óptico en el que se analizan imágenes obtenidas por SD-OCT (Topcon 3D-OCT 2000). Se hizo una valoración cuantitativa mediante el análisis del grosor de la capa de fibras nerviosas de la retina (CFNR) y cualitativa mediante estudio de las características morfológicas en cortes transversales de la cabeza del nervio óptico.Resultados: Todos los casos presentaron drusas ocultas. Solo en 3 pacientes fueron unilaterales. La edad media de los pacientes incluidos en el estudio fue de 12,3 años. La agudeza visual mejor corregida fue de 1 en todos ellos. En el análisis de la CFNR el 68,4% mostraba un engrosamiento siendo los sectores temporal y el superior los más aumentados; solo en un paciente se objetivó una disminución de la CFNR. Uno de los pacientes presentó un patrón mixto con sectores normales, engrosados y adelgazados en cada ojo. Se realizaron ecografías en 10 pacientes las cuales confirmaron en 8 de ellos el diagnóstico de drusas de nervio óptico. No se recogieron defectos campimétricos en los pacientes a los que se les realizó el estudio funcional del nervio óptico mediante campimetría ni complicaciones asociadas.
Conclusiones: En nuestro estudio podemos observar cómo la mayoría de los pacientes en edad pediátrica presentan drusas del tipo ocultas causando un aumento de grosor en el análisis de la RNFL por OCT-SD. Para hacer un buen diagnóstico diferencial en estos casos con el papiledema es de gran utilidad el uso de las nuevas versiones de OCT de dominio espectral ya que gracias a su mayor resolución facilitan la visualización directa de drusas ocultas.
Método: Estudio descriptivo de una serie de 12 pacientes pediátricos afectos de drusas ocultas del nervio óptico en el que se analizan imágenes obtenidas por SD-OCT (Topcon 3D-OCT 2000). Se hizo una valoración cuantitativa mediante el análisis del grosor de la capa de fibras nerviosas de la retina (CFNR) y cualitativa mediante estudio de las características morfológicas en cortes transversales de la cabeza del nervio óptico.Resultados: Todos los casos presentaron drusas ocultas. Solo en 3 pacientes fueron unilaterales. La edad media de los pacientes incluidos en el estudio fue de 12,3 años. La agudeza visual mejor corregida fue de 1 en todos ellos. En el análisis de la CFNR el 68,4% mostraba un engrosamiento siendo los sectores temporal y el superior los más aumentados; solo en un paciente se objetivó una disminución de la CFNR. Uno de los pacientes presentó un patrón mixto con sectores normales, engrosados y adelgazados en cada ojo. Se realizaron ecografías en 10 pacientes las cuales confirmaron en 8 de ellos el diagnóstico de drusas de nervio óptico. No se recogieron defectos campimétricos en los pacientes a los que se les realizó el estudio funcional del nervio óptico mediante campimetría ni complicaciones asociadas.
Conclusiones: En nuestro estudio podemos observar cómo la mayoría de los pacientes en edad pediátrica presentan drusas del tipo ocultas causando un aumento de grosor en el análisis de la RNFL por OCT-SD. Para hacer un buen diagnóstico diferencial en estos casos con el papiledema es de gran utilidad el uso de las nuevas versiones de OCT de dominio espectral ya que gracias a su mayor resolución facilitan la visualización directa de drusas ocultas.
PCC-38 Validación de una prueba diagnóstica para neuritis ópticas desmielinizantes basado en la saturación del color
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, Beatriz Villarrubia Torcal, Susana Perucho Martínez, José Alberto Reche Sainz
Madrid
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, Beatriz Villarrubia Torcal, Susana Perucho Martínez, José Alberto Reche Sainz
Madrid
Objetivo: Validación de una prueba diagnóstica para neuritis ópticas (NO) desmielinizantes basada en la saturación del color.
Material y Métodos: Estudio observacional, prospectivo, de casos y controles. Los casos son pacientes con al menos un episodio de NO unilateral. Los controles personas sin patología oftalmológica excepto ametropías. Se seleccionarán todos los pacientes diagnosticados de NO unilateral en nuestro servicio y un control por cada caso, emparejados por edad y sexo. La variable independiente es el episodio previo de NO, la dependiente la puntuación obtenida en la prueba de saturación del color en neuritis ópticas (SCNO). Se evalúa la saturación del color a nivel macular, perimacular y postimagen tras saturación de fotorreceptores.
Resultados: La muestra se compone de 26 casos y 26 controles, 63% son mujeres. El rango de edad es desde 18 a 48 con una edad media de 33 años. Los casos mostraron significativamente mayor número de errores en la prueba SCNO (p<0,05), especialmente la saturación al color macular y postimagen tras saturación de fotorreceptores. El ojo afectado presenta mayor número de errores que el no afectado en los casos (p<0,05). La puntación del SCNO mostró correlación con el daño estructural y funcional del NO (p<0,05).
Conclusiones: Los pacientes con al menos un episodio de NO unilateral presentan una menor discriminación de la saturación y el matiz del color con la prueba desarrollada ex profeso. La prueba SCNO es útil para el diagnóstico de NO en pacientes con enfermedades desmielinizantes.
Material y Métodos: Estudio observacional, prospectivo, de casos y controles. Los casos son pacientes con al menos un episodio de NO unilateral. Los controles personas sin patología oftalmológica excepto ametropías. Se seleccionarán todos los pacientes diagnosticados de NO unilateral en nuestro servicio y un control por cada caso, emparejados por edad y sexo. La variable independiente es el episodio previo de NO, la dependiente la puntuación obtenida en la prueba de saturación del color en neuritis ópticas (SCNO). Se evalúa la saturación del color a nivel macular, perimacular y postimagen tras saturación de fotorreceptores.
Resultados: La muestra se compone de 26 casos y 26 controles, 63% son mujeres. El rango de edad es desde 18 a 48 con una edad media de 33 años. Los casos mostraron significativamente mayor número de errores en la prueba SCNO (p<0,05), especialmente la saturación al color macular y postimagen tras saturación de fotorreceptores. El ojo afectado presenta mayor número de errores que el no afectado en los casos (p<0,05). La puntación del SCNO mostró correlación con el daño estructural y funcional del NO (p<0,05).
Conclusiones: Los pacientes con al menos un episodio de NO unilateral presentan una menor discriminación de la saturación y el matiz del color con la prueba desarrollada ex profeso. La prueba SCNO es útil para el diagnóstico de NO en pacientes con enfermedades desmielinizantes.
PCC-39 Ceguera estacionaria nocturna congénita asociada con nistagmus y endotropíia parcialmente acomodativa
Dres.: M.ª del Carmen González Gallardo, José Antonio Sáez Moreno, M.ª Adela Medrano Contreras, M.ª Vanesa Ramírez Garrido
Granada
Dres.: M.ª del Carmen González Gallardo, José Antonio Sáez Moreno, M.ª Adela Medrano Contreras, M.ª Vanesa Ramírez Garrido
Granada
Caso Clínico: Presentamos el caso de un paciente de 31 años con disminución de agudeza visual al atardecer y con los cambios bruscos de luminosidad. Entre sus antecedentes personales destacan: Astigmatismo hipermetrópico compuesto, Endotropía parcialmente acomodativa y nistagmus intervenidos en la niñez (Rece-reseccion RM-RL+fadden), Hemeralopia (finales 1.ª decada) y alteraciones funduscópicas catalogadas de distrofia retiniana interna. AF: sin interés. EXPLORACIÓN: AV: OD: + 5´5 ~ +2´5 x 95º= 1 /OI: + 5~ +3 x 85º= 1. PINLA. MOEC. No nistagmo. BMC: normal. CV: AO: normal. ADAPTOMETRÍA: tº prolongado. TEST FANRSWORTH: normal. FO: AO: Papila y árbol vascular de aspecto normal. Múltiples puntos blancos en retina periférica que respectan área macular y peripapilar. Tenue color amarillento a nivel de macula. OCT: AO: normal. ERG: Se realizó uno en la niñez que resultó normal. En la última revisión se le volvió a repetir con los siguientes resultados: – Leve aumento latencia de P100 como secuela del estrabismo
– Asimetría entre ambos ojos (Diagnóstico: Se realiza diagnóstico diferencial entre Retinitis pigmentosa (albescens), fundus flavimaculatus y fundus albipunctatus (ceguera estacionaria nocturna). Con los datos aportados se diagnostica de Ceguera nocturna estacionaria congénita (Fundus albipunctatus). Es peculiar en este caso la existencia de agudeza visual y visión de color normal y la ausencia de antecedentes familiares.
Tratamiento: no existe. Es importante por ello el consejo genético.
– Asimetría entre ambos ojos (Diagnóstico: Se realiza diagnóstico diferencial entre Retinitis pigmentosa (albescens), fundus flavimaculatus y fundus albipunctatus (ceguera estacionaria nocturna). Con los datos aportados se diagnostica de Ceguera nocturna estacionaria congénita (Fundus albipunctatus). Es peculiar en este caso la existencia de agudeza visual y visión de color normal y la ausencia de antecedentes familiares.
Tratamiento: no existe. Es importante por ello el consejo genético.
PCC-40 Síndrome de Duane bilateral: a propósito de un caso clínico
Dras.: Rosa Martin Carribero, María Alarcón Tomás, Marta Romero Domínguez
Madrid
Dras.: Rosa Martin Carribero, María Alarcón Tomás, Marta Romero Domínguez
Madrid
Introducción: Se presenta el caso clínico de una paciente de 9 años que acude a nuestra consulta para valoración y tratamiento de su estrabismo.
Caso Clínico: Niña de 9 años que acude a nuestra consulta por presentar estrabismo, tratada previamente en otro centro con Toxina Botulínica en dos ocasiones con diagnóstico de endotropía congénita. AP: TDHA. APOFT: Refracción actual: OD +2,50 -050 a 90º; OI +3,00 y dos inyecciones de BOTOX en RRMM. En la exploración presentaba: AV OD csc 0,8; OI csc 0,9 dif. MOIs: PCNR; MOEs: al COVER csc presentaba endotropia de 8-10 dp de base temporal de cerca y de lejos con dominancia del OD. Limitación de la abducción en grado -3 en ambos ojos. Enoftalmos y Upshoot en la aducción en ambos ojos, más acusado em OI. PPC 4 cm. Test de Worth no suprime de lejos ni de cerca. No presentaba estereopsis. Polo anterior normal. ARF con cicloplejia: OD +2,75 -0,75 a 89º; OI +3,12 -0,50 a 75º. FO AO normal. Se pidió IC a Neuropediatría y RMN cerebral. La RMN confirmó la ausencia del núcleo del VI PC bilateral. La paciente fue diagnosticada de Síndrome de Duane tipo I bilateral. Dado que el ángulo de desviación es pequeño, no presenta tortícolis y los upshoot no son antiestéticos, se decide actitud conservadora, manteniendo su refracción actual.
Discusión: En el Síndrome de Duane cualquier abordaje quirúrgico produce como mucho una mejoría parcial. Debido a esto, la cirugía se reserva para casos con desviaciones en ppm, tortícolis compensador, una retracción acentuada del globo ocular o movimientos verticales anómalos antiestéticos.
Caso Clínico: Niña de 9 años que acude a nuestra consulta por presentar estrabismo, tratada previamente en otro centro con Toxina Botulínica en dos ocasiones con diagnóstico de endotropía congénita. AP: TDHA. APOFT: Refracción actual: OD +2,50 -050 a 90º; OI +3,00 y dos inyecciones de BOTOX en RRMM. En la exploración presentaba: AV OD csc 0,8; OI csc 0,9 dif. MOIs: PCNR; MOEs: al COVER csc presentaba endotropia de 8-10 dp de base temporal de cerca y de lejos con dominancia del OD. Limitación de la abducción en grado -3 en ambos ojos. Enoftalmos y Upshoot en la aducción en ambos ojos, más acusado em OI. PPC 4 cm. Test de Worth no suprime de lejos ni de cerca. No presentaba estereopsis. Polo anterior normal. ARF con cicloplejia: OD +2,75 -0,75 a 89º; OI +3,12 -0,50 a 75º. FO AO normal. Se pidió IC a Neuropediatría y RMN cerebral. La RMN confirmó la ausencia del núcleo del VI PC bilateral. La paciente fue diagnosticada de Síndrome de Duane tipo I bilateral. Dado que el ángulo de desviación es pequeño, no presenta tortícolis y los upshoot no son antiestéticos, se decide actitud conservadora, manteniendo su refracción actual.
Discusión: En el Síndrome de Duane cualquier abordaje quirúrgico produce como mucho una mejoría parcial. Debido a esto, la cirugía se reserva para casos con desviaciones en ppm, tortícolis compensador, una retracción acentuada del globo ocular o movimientos verticales anómalos antiestéticos.
PCC-41 Parálisis congénita del VI o síndrome de Duane
Dres.: Mauro Dupré Peláez, Paula Bañeros Rojas, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Dres.: Mauro Dupré Peláez, Paula Bañeros Rojas, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
La parálisis del VI congénita es extremadamente rara, siendo la mayoría cuadros de síndrome de Duane. El diagnóstico diferencial es fundamentalmente clínico siendo los signos de cocontracción ocular y fenómenos de upshoot y dowshoot, sin embargo en pacientes por debajo de los 6-12 meses estos muchas veces no están presentes lo que dificulta el diagnóstico así como la actitud terapéutica. Presentamos un niño remitido con una endotropía asociada a un síndrome de Duane cuyo diagnostico definitivo fue parálisis del VI. La marcada endotropia asociada a signos minimos de cocontracción, las pruebas de imagen así como registro amplio de fotografias del paciente nos ayudaron al diagnostico. Tras la inyección de toxina botulinica mejoro la abducción y se compenso la desviación en posición primaria.
PCC-42 Resección del recto lateral en la ET restrictiva tiroidea residual
Dras.: Alejandra Acebal Montero, Lucía Perucho González, Blanca Domingo Gordo, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Dras.: Alejandra Acebal Montero, Lucía Perucho González, Blanca Domingo Gordo, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Cirugía del Estrabismo es compleja requiriéndose con frecuencia más de una intervención. La cirugía muscular habitual es la retroinserción de los músculos fibróticos. Para muchos autores la resección muscular esta contraindicada debido a la posibilidad de exacerbar el proceso inflamatorio o bien a generar nuevas restricciones. Presentamos el caso de una paciente a la cual se le había realizado una retroinserción bilaretal de los rectos mediales y en un segundo tiempo se realiza un procedimiento de resección muscular con buena evolución y sin complicaciones.
PCC-43 Corrección parálisis sexto par crónica secundaria a fístula carótida cavernosa mediante transposición rectos verticales
Dres.: Bárbara Acosta Acosta, Gloria Rubio Rodríguez, José Luis Delgado Miranda, Ruymán Rodríguez Gil
Santa Cruz de Tenerife
Dres.: Bárbara Acosta Acosta, Gloria Rubio Rodríguez, José Luis Delgado Miranda, Ruymán Rodríguez Gil
Santa Cruz de Tenerife
Presentamos el caso clínico de una paciente mujer de 40 años de edad con parálisis crónica del sexto par derecho diagnosticada de fístula carótida cavernosa derecha directa de alto flujo (embolizada en dos ocasiones) tras presentar una parálisis del par derecho con diplopía e ingurgitación vascular de vasos conjuntivales como signos de presentación. A la exploración oftalmológica encontramos: una agudeza visual ojo derecho (OD)/ ojo izquierdo (OI) 1.0/0.8, tortícolis cara derecha y leve mentón arriba fijando con ojo derecho. En la motilidad ocular extrínseca presenta endotropía OI de 60 dioptrias prismáticas (DP) en posición primaria de la mirada con parálisis total de la abducción del ojo derecho (-4). En la exploración del polo anterior destaca ingurgitación vascular conjuntival con valsalva levemente positivo. No se objetiva congestión vascular en el fondo de ojo. Se realiza inyección de 7,5U toxina botulínica en ambos rectos medios. A la semana presenta endotropía OI de 40 DP y refiere menor sensación de diplopía, pero persiste la limitación total de abducción. Tres meses después persiste la diplopía en posición primaria de la mirada, tortícolis cara a la derecha y endotropía de 40 DP. Dada la clínica de diplopía, así como tortícolis con afectación psicológica en la paciente, se decide intervención quirúrgica mediante transposición muscular del recto inferior y superior al recto lateral de OD según la técnica descrita por Knapp asociada a inyección de toxina botulínica en recto medio de OD. En post-operatorio inmediato la paciente está en ortoforia en posición primaria, no presenta diplopía y ha desparecido la tortícolis. Un mes tras la cirugía de transposición la paciente sigue estando en ortoforia, sin diplopía ni tortícolis, aunque persiste la limitación de la abducción de OD. Consideramos la técnica de transposición de rectos verticales la técnica más adecuada a realizar en aquellos pacientes con parálisis del sexto par con ausencia total de abducción.
PCC-44 Transposición de los rectos verticales frente a técnica de retroinserción resección en la parálisis completa del VI nervio
Dres.: Clara Berrozpe Villabona, Mauro Dupré Peláez, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Dres.: Clara Berrozpe Villabona, Mauro Dupré Peláez, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Objetivo: Evaluar la eficacia de la Transposición de los rectos verticales (TRV) al RL frente a la Retroinserción – Resección en la parálisis completa del VI Nervio.
Métodos: Estudio retrospectivo observacional de 35 pacientes consecutivos con parálisis completa del VI nervio (12 bilaterales). 19 pacientes se les realizó TRV (G1) y a 16 Retroinserción – Resección (G2). La desviación inicial era de 57.13 ± 23. 25 DP en el G1 y 49.35 ± 18.44DP en el G2.
Resultados: Un 78,94% de los pacientes del G1 (15/19) y un 62,5% (10/16) del G2 quedaron alineados. El rango de movimiento rotacional fue superior en el G1 que en el G2. 2 Pacientes del G1 tuvieron un estrabismo vertical residual al procedimiento de transposición. Un paciente presentó un síndrome de isquemia anterior leve (G1).
Conclusiones: La TRV es una técnica más compleja y con mayor riesgo de complicaciones pero que ofrece mejores resultados que la retroinserción- resección en la parálisis completa del VI nervio.
Métodos: Estudio retrospectivo observacional de 35 pacientes consecutivos con parálisis completa del VI nervio (12 bilaterales). 19 pacientes se les realizó TRV (G1) y a 16 Retroinserción – Resección (G2). La desviación inicial era de 57.13 ± 23. 25 DP en el G1 y 49.35 ± 18.44DP en el G2.
Resultados: Un 78,94% de los pacientes del G1 (15/19) y un 62,5% (10/16) del G2 quedaron alineados. El rango de movimiento rotacional fue superior en el G1 que en el G2. 2 Pacientes del G1 tuvieron un estrabismo vertical residual al procedimiento de transposición. Un paciente presentó un síndrome de isquemia anterior leve (G1).
Conclusiones: La TRV es una técnica más compleja y con mayor riesgo de complicaciones pero que ofrece mejores resultados que la retroinserción- resección en la parálisis completa del VI nervio.
PCC-45 Diplopía intermitente: neuomiotonía ocular
Dres.: Elisabet de Dompablo Ventura, Laura Díez Álvarez, Miguel Ruiz Guerrero, Cristina Márquez González
Madrid
Dres.: Elisabet de Dompablo Ventura, Laura Díez Álvarez, Miguel Ruiz Guerrero, Cristina Márquez González
Madrid
Introducción: La neuromiotonía ocular (NMO) es una enfermedad poco frecuente de la motilidad ocular caracterizada por la contracción paroxística involuntaria de uno o varios músculos extraoculares inervados por un mismo par craneal. La contracción muscular se debe a activaciones espontáneas periféricas de los nervios motores por inestabilidad de las membranas debido a desórdenes en los canales de potasio. Se han descrito diversas causas, predominando el tratamiento radioterápico previo.
Caso Clínico: Mujer de 60 años con antecedentes de radioterapia craneal que presentaba diplopia paroxística de meses de evolución con incremento de la frecuencia en el último mes impidiéndole realizar su vida cotidiana. Durante los episodios se observa hipertropia del ojo izquierdo con diplopía vertical asociada, acompañada de dolor periorbitario y retracción palpebral ipsilateral. La exploración intercrisis no presentaba alteraciones, desencadenándose los episodios en levoversión y supralevoversión (mayor con luz). Tras realizar diagnóstico diferencial con otras patologías entre las que destacan la miastenia gravis y la mioquimia del oblícuo superior, es diagnosticada de NMO iniciándose tratamiento con Gabapentina con escasa mejoría clínica. Tras inyección de toxina botulínica periocular mejoró el dolor periorbitario persistiendo la frecuencia de los episodios. Finalmente, se instauró tratamiento con Carbamazepina 100mg diarios consiguiéndose gran control sintomático que se mantiene tras disminución progresiva de la dosis. Actualmente estable con 50 mg diarios.
Conclusiones: La NMO es una enfermedad poco frecuente que debe incluirse en el diagnóstico diferencial de cuadros de diplopía paroxística, especialmente en pacientes con antecedentes de radioterapia, presentando generalmente buena respuesta a fármacos estabilizadores de membrana.
Caso Clínico: Mujer de 60 años con antecedentes de radioterapia craneal que presentaba diplopia paroxística de meses de evolución con incremento de la frecuencia en el último mes impidiéndole realizar su vida cotidiana. Durante los episodios se observa hipertropia del ojo izquierdo con diplopía vertical asociada, acompañada de dolor periorbitario y retracción palpebral ipsilateral. La exploración intercrisis no presentaba alteraciones, desencadenándose los episodios en levoversión y supralevoversión (mayor con luz). Tras realizar diagnóstico diferencial con otras patologías entre las que destacan la miastenia gravis y la mioquimia del oblícuo superior, es diagnosticada de NMO iniciándose tratamiento con Gabapentina con escasa mejoría clínica. Tras inyección de toxina botulínica periocular mejoró el dolor periorbitario persistiendo la frecuencia de los episodios. Finalmente, se instauró tratamiento con Carbamazepina 100mg diarios consiguiéndose gran control sintomático que se mantiene tras disminución progresiva de la dosis. Actualmente estable con 50 mg diarios.
Conclusiones: La NMO es una enfermedad poco frecuente que debe incluirse en el diagnóstico diferencial de cuadros de diplopía paroxística, especialmente en pacientes con antecedentes de radioterapia, presentando generalmente buena respuesta a fármacos estabilizadores de membrana.
PCC-46 Otitis agudas y afectación múltiple de pares craneales: presentación de un caso
Dras.: Lilia J. Fernández Cherkasova, Rocío Rodríguez Rivera, Ariadne Sánchez Ramón, Inmaculada Alonso Alonso
Burgos
Dras.: Lilia J. Fernández Cherkasova, Rocío Rodríguez Rivera, Ariadne Sánchez Ramón, Inmaculada Alonso Alonso
Burgos
Introducción: La afectación de múltiples pares craneales es comúnmente un signo alarmante en la evaluación de las enfermedades neurológicas.
Caso Clínico: Presentamos el caso de un niño de 3 años de edad, con una limitación bilateral de la función de los terceros pares craneales, y del séptimo y sexto pares craneales izquierdos, en el curso de una meningitis neumocóccica con una hidrocefalia obstructiva y consecuentes signos de focalidad neurológica, desarrollados 48 horas después del debut de una otitis media aguda. La paresia del sexto par craneal secundaria a una petrositis apical mastoidea, asociada o no a la afectación simultánea del séptimo par, constituye el conocido síndrome de Gradenigo, que es considerado muy infrecuente en la actualidad. La disfunción bilateral de origen central del tercer par también es rara. A pesar de la gran disponibilidad de antibióticos de amplio espectro, las otitis agudas no deben ser etiquetadas como procesos sencillos o banales. Sus complicaciones otológicas e intracraneales son cada vez más frecuentes. El Streptococcus pneumoniae es el germen principal causante de estos problemas. El tratamiento precoz y adecuado, médico y quirúrgico, permite una evolución favorable y una recuperación neurológica total, sin secuelas.
Conclusiones: Es importante la coordinación multidisciplinaria de los pediatras, neurocirujanos, otorrinolaringólogos, y oftalmólogos para la óptima evolución de los casos.
Caso Clínico: Presentamos el caso de un niño de 3 años de edad, con una limitación bilateral de la función de los terceros pares craneales, y del séptimo y sexto pares craneales izquierdos, en el curso de una meningitis neumocóccica con una hidrocefalia obstructiva y consecuentes signos de focalidad neurológica, desarrollados 48 horas después del debut de una otitis media aguda. La paresia del sexto par craneal secundaria a una petrositis apical mastoidea, asociada o no a la afectación simultánea del séptimo par, constituye el conocido síndrome de Gradenigo, que es considerado muy infrecuente en la actualidad. La disfunción bilateral de origen central del tercer par también es rara. A pesar de la gran disponibilidad de antibióticos de amplio espectro, las otitis agudas no deben ser etiquetadas como procesos sencillos o banales. Sus complicaciones otológicas e intracraneales son cada vez más frecuentes. El Streptococcus pneumoniae es el germen principal causante de estos problemas. El tratamiento precoz y adecuado, médico y quirúrgico, permite una evolución favorable y una recuperación neurológica total, sin secuelas.
Conclusiones: Es importante la coordinación multidisciplinaria de los pediatras, neurocirujanos, otorrinolaringólogos, y oftalmólogos para la óptima evolución de los casos.
PCC-47 Tortícolis congénito versus parálisis del IV par. A propósito de un caso
Dras.: Susana Redondo Torres, Belén del Río Carrero
Barcelona
Dras.: Susana Redondo Torres, Belén del Río Carrero
Barcelona
Presentamos el caso de un niño de catorce años que acude a consulta de oftalmología por desvío hacia arriba del ojo derecho. A la exploración presenta: AV sc 0.9/1.0. Hipertropía del ojo derecho de 17 Dp prismáticas, con up-shoot a la aducción. Test de Bielschowsky positivo sobre hombro derecho. Tortícolis sobre hombro izquierdo. Antecedentes personales refiere dos cirugías del músculo esternocleidomastoideo (ECM) izquierdo a los 2 y a los 4 años de edad, por tortícolis congénito, sin mejoría del mismo. Se realizan pruebas de imagen (Ecografía y RMN) que muestran gran adelgazamiento del músculo ECM izuierdo. El paciente está programado para cirugía de debilitamiento del musculo oblicuo inferior del ojo derecho, en los próximos días. El tortícolis muscular congénito es una anomalía de la postura de la cabeza, debida a una retracción del músculo ECM, y que se resuelve espontaneamente en la mayoría de los casos. En los casos infrecuentes, en que el tortícolis persiste después de los 12-18 meses de vida, se realiza tratamiento quirúrgico. Ante la presencia de tortícolis en niños de corta edad, hay que tener siempre presente , que pueda tratarse de un tortícolis de origen ocular.
PCC-48 Cirugía de estrabismo en parálisis del III par craneal
Dres.: Mercedes Rivera Zori, Belén Gutiérrez Partida, Isabel Valls Ferrán, Diego Puertas Bordallo
Madrid
Dres.: Mercedes Rivera Zori, Belén Gutiérrez Partida, Isabel Valls Ferrán, Diego Puertas Bordallo
Madrid
Objetivo: Valorar el efecto y los resultados de la cirugía de estrabismo en pacientes pediátricos con parálisis del III par craneal.
Método: Se realizó un estudio retrospectivo observacional con pacientes con parálisis del III par craneal intervenidas quirúrgicamente en los últimos dos años con un seguimiento mínimo de un año. Se evaluaron datos demográficos, agudeza visual, exploración oftalmológica, intervenciones, resultado final y posibles complicaciones.
Resultados: Se incluyeron 11 pacientes con una media de edad de 6,6 años, afectación del ojo derecho en un 63,6% y del ojo izquierdo en un 36.4%. Las etiologías fueron congénita (45,5%), tumoral y traumática (27,3%). El ángulo de desviación en posición primaria previo a cirugía fue de -14.91º con una desviación típica de 6.09º, en todos ellos se realizó inyección de toxina botulínica en la fase aguda en el recto lateral del ojo afectado (7.5UI), y retroinserción de recto medio + resección del recto lateral del ojo enfermo, con un ángulo de desviación en posición primaria al mes del procedimiento de -1.00º desviación típica de 1.61º; a los 6 meses de -5.00º con una desviación típica de 3.00º; y al año de la cirugía de -6.36º con una desviación típica de 4.29º. Encontrándose que el procedimiento quirúrgico es eficaz mediante una prueba de W de Wilcoxon para muestras relacionadas (z=2.950; p<0,005).
Conclusiones: Sabemos que los procedimientos quirúrgicos en la parálisis del III par craneal cuentan con limitaciones importantes, generalmente son necesarios múltiples procedimientos para conseguir una estética aceptable.
Método: Se realizó un estudio retrospectivo observacional con pacientes con parálisis del III par craneal intervenidas quirúrgicamente en los últimos dos años con un seguimiento mínimo de un año. Se evaluaron datos demográficos, agudeza visual, exploración oftalmológica, intervenciones, resultado final y posibles complicaciones.
Resultados: Se incluyeron 11 pacientes con una media de edad de 6,6 años, afectación del ojo derecho en un 63,6% y del ojo izquierdo en un 36.4%. Las etiologías fueron congénita (45,5%), tumoral y traumática (27,3%). El ángulo de desviación en posición primaria previo a cirugía fue de -14.91º con una desviación típica de 6.09º, en todos ellos se realizó inyección de toxina botulínica en la fase aguda en el recto lateral del ojo afectado (7.5UI), y retroinserción de recto medio + resección del recto lateral del ojo enfermo, con un ángulo de desviación en posición primaria al mes del procedimiento de -1.00º desviación típica de 1.61º; a los 6 meses de -5.00º con una desviación típica de 3.00º; y al año de la cirugía de -6.36º con una desviación típica de 4.29º. Encontrándose que el procedimiento quirúrgico es eficaz mediante una prueba de W de Wilcoxon para muestras relacionadas (z=2.950; p<0,005).
Conclusiones: Sabemos que los procedimientos quirúrgicos en la parálisis del III par craneal cuentan con limitaciones importantes, generalmente son necesarios múltiples procedimientos para conseguir una estética aceptable.
PCC-49 Isquemia de segmento anterior tras transposición de rectos verticales con punto de Foster en parálisis de VI nervio craneal
Dras.: Yoon Ah Kim, Diana Fuentes Ventura, Pilar Gómez de Liaño Sánchez, Pilar Merino Sanz
Madrid
Dras.: Yoon Ah Kim, Diana Fuentes Ventura, Pilar Gómez de Liaño Sánchez, Pilar Merino Sanz
Madrid
Introducción: La isquemia del segmento anterior (ISA) es una complicación rara, pero potencialmente grave de la cirugía de estrabismo. Por razones anatómicas, es mayor su incidencia en las cirugías de los rectos verticales (RV) que los horizontales.
Casos Clínicos: Presentamos las historias clínicas de 2 pacientes varón de 43 y 50 años de edad con parálisis casi total de VI nervio craneal (N.C) izquierdo de origen traumático y congénito respectivamente. Se les realizó la transposición de RV con punto de fijación escleral posterior de Foster combinada a inyección de toxina botulínica en el recto medial ipsilateral. En el posoperatorio el primer paciente presentó midriasis leve con pupila poco reactiva sin tyndall, por lo que se inició tratamiento con corticoide tópico y ciclopléjico, con recuperación funcional completa. En el segundo paciente se encontró midriasis leve y deformidad pupilar con tyndall ++ y edema corneal temporosuperior. Se le pautó tanto corticoide tópico como oral. Presenta como secuela permanente leve corectopia pupilar y atrofia sectorial del iris sin afectación de agudeza visual ni otro compromiso funcional.
Conclusiones: El punto de fijación posterior de Foster potencialmente puede comprometer el flujo de la arteria ciliar posterior y aumentar la posibilidad de ISA. En este contexto, las suturas intermusculares descritas por Hong et al (2005) podrían ser alternativas igualmente eficaces, pero más seguras. La baja incidencia de ISA dificulta definir la ventaja de cirugías con disección y preservación de arterias ciliares, y la utilidad de corticoides en el tratamiento.
Casos Clínicos: Presentamos las historias clínicas de 2 pacientes varón de 43 y 50 años de edad con parálisis casi total de VI nervio craneal (N.C) izquierdo de origen traumático y congénito respectivamente. Se les realizó la transposición de RV con punto de fijación escleral posterior de Foster combinada a inyección de toxina botulínica en el recto medial ipsilateral. En el posoperatorio el primer paciente presentó midriasis leve con pupila poco reactiva sin tyndall, por lo que se inició tratamiento con corticoide tópico y ciclopléjico, con recuperación funcional completa. En el segundo paciente se encontró midriasis leve y deformidad pupilar con tyndall ++ y edema corneal temporosuperior. Se le pautó tanto corticoide tópico como oral. Presenta como secuela permanente leve corectopia pupilar y atrofia sectorial del iris sin afectación de agudeza visual ni otro compromiso funcional.
Conclusiones: El punto de fijación posterior de Foster potencialmente puede comprometer el flujo de la arteria ciliar posterior y aumentar la posibilidad de ISA. En este contexto, las suturas intermusculares descritas por Hong et al (2005) podrían ser alternativas igualmente eficaces, pero más seguras. La baja incidencia de ISA dificulta definir la ventaja de cirugías con disección y preservación de arterias ciliares, y la utilidad de corticoides en el tratamiento.
PCC-50 Estrabismo restrictivo tras cirugía de párpado inferior
Dres.: Raquel Lapuente Monjas, José Alberto Reche Sainz, Susana Perucho Martínez, Elena Martín Giral
Madrid
Dres.: Raquel Lapuente Monjas, José Alberto Reche Sainz, Susana Perucho Martínez, Elena Martín Giral
Madrid
Introducción: Se presenta un caso clínico de estrabismo restrictivo secundario a cirugía de párpado inferior.
Caso Clínico: Varón de 80 años, intervenido de cirugía de entropión involutivo del ojo izquierdo (OI) mediante reaplicación de los retractores del párpado inferior vía subciliar y tira tarsal lateral externa. Tuvo que reintervenirse por hipercorrección realizando un abordaje externo con liberación de retractores y realizando una resuspensión cantal lateral. Refirió diplopía binocular vertical en el postoperatorio inmediato de la reintervención en la posición primaria de la mirada (PPM) que incrementaba en la infraversión. En la exploración oftalmológica, presentaba restricción en la infraducción del OI siendo mayor en el campo de acción del recto inferior (RI). En la posición primaria de la mirada presentaba ortotropia. El resto de exploración fue normal, con agudeza visual de 1.0 en ambos ojos. Se realizó un TAC orbitario el cual no mostró alteraciones en la anatomía y posición del recto inferior. Se decidió realizar disección quirúrgica del tejido fibroso cicatricial que englobaba el RI, la fascia capsulopalpebral y borde inferior del tarso separándolo del reborde orbitario inferior con posterior reconstrucción del fórnix inferior con mucosa oral. Al mes de la cirugía, el paciente presentaba mejoría de la diplopía en la mirada inferior persistiendo una pequeña limitación en la infraducción del OI.
Conclusiones: La cirugía del párpado inferior implica la disección de los retractores inferiores y bandas de tejido conectivo que se extienden desde el reborde orbitario inferior y la región conjunta del recto inferior y oblicuo inferior. Una cicatrización extensa en esta región involucrando al recto inferior podría ser causa de la aparición de un estrabismo restrictivo como sucede en nuestro caso creándose un obstáculo en el normal movimiento del músculo impidiendo así que este pueda ejercer su acción y de esta forma creando una limitación de la infraducción en el ojo afectado.
Caso Clínico: Varón de 80 años, intervenido de cirugía de entropión involutivo del ojo izquierdo (OI) mediante reaplicación de los retractores del párpado inferior vía subciliar y tira tarsal lateral externa. Tuvo que reintervenirse por hipercorrección realizando un abordaje externo con liberación de retractores y realizando una resuspensión cantal lateral. Refirió diplopía binocular vertical en el postoperatorio inmediato de la reintervención en la posición primaria de la mirada (PPM) que incrementaba en la infraversión. En la exploración oftalmológica, presentaba restricción en la infraducción del OI siendo mayor en el campo de acción del recto inferior (RI). En la posición primaria de la mirada presentaba ortotropia. El resto de exploración fue normal, con agudeza visual de 1.0 en ambos ojos. Se realizó un TAC orbitario el cual no mostró alteraciones en la anatomía y posición del recto inferior. Se decidió realizar disección quirúrgica del tejido fibroso cicatricial que englobaba el RI, la fascia capsulopalpebral y borde inferior del tarso separándolo del reborde orbitario inferior con posterior reconstrucción del fórnix inferior con mucosa oral. Al mes de la cirugía, el paciente presentaba mejoría de la diplopía en la mirada inferior persistiendo una pequeña limitación en la infraducción del OI.
Conclusiones: La cirugía del párpado inferior implica la disección de los retractores inferiores y bandas de tejido conectivo que se extienden desde el reborde orbitario inferior y la región conjunta del recto inferior y oblicuo inferior. Una cicatrización extensa en esta región involucrando al recto inferior podría ser causa de la aparición de un estrabismo restrictivo como sucede en nuestro caso creándose un obstáculo en el normal movimiento del músculo impidiendo así que este pueda ejercer su acción y de esta forma creando una limitación de la infraducción en el ojo afectado.
PCC-51 Tratamiento quirúrgico de la oftalmoplejía internuclear
Dras.: Lucía Perucho González, Laura Morales Fernández, Blanca Domingo Gordo, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Dras.: Lucía Perucho González, Laura Morales Fernández, Blanca Domingo Gordo, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
El manejo de la exotropía asociada a la Oftalmoplejía es controvertido por evolucion incierta y sus resultados. Paciente de 52 edad con una oftalmolplejía internuclear bilateral en un cuadro de Esclerosis Múltiple. Presentaba una exotropía de 30 DP. La limitación de la addución del OD era grado -3 y del OI grado -2. En primer lugar fue tratada con inyección de toxina botulinica y ante la mejoria subjetiva se practicó cirugía muscular. Realizamos retroinseción + resección unilateral. Discutimos las opciones quirúrgicas así como la mejoria parcial del cuadro.
PCC-52 Nueva técnica de transposición de los rectos verticales para la parálisis del VI nervio para pacientes con riesgo de isquemia del segmento anterior
Dras.: Lucía Perucho González, Alejandra Acebal Montero, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Dras.: Lucía Perucho González, Alejandra Acebal Montero, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Se presenta una nueva técnica de transposición de los rectos verticales que evita la desinserción de los rectos verticales, mantiene la vascularización aportada por los rectos verticales y permite realizar simultáneamente la retroinserción del recto medial ipsilateral.
Caso Clínico: Paciente de 76 años que tenia una parálisis completa del VI nervio izquierdo y parcial del III izquierdo de 3 años de evolución secundario a un aneurisma. La ET era de 65 dp. La limitación del RL izquierda era de grado -4. Y la del RM de grado -1. En el intraoperatorio, la ducción pasiva procedente del RMI estaba muy tenso, Se procedió al anclaje de los rectos verticales mediante sutura no reabsorbibles uniendolos bajo el recto lateral. Consideramos que es una técnica aparentemente menos iatrogénica que las trasposiciones descritas precedentemente, se obtuvo un buen alineamiento en posición primaria, sin alteración vertical residual y sin compromiso del segmento anterior.
Caso Clínico: Paciente de 76 años que tenia una parálisis completa del VI nervio izquierdo y parcial del III izquierdo de 3 años de evolución secundario a un aneurisma. La ET era de 65 dp. La limitación del RL izquierda era de grado -4. Y la del RM de grado -1. En el intraoperatorio, la ducción pasiva procedente del RMI estaba muy tenso, Se procedió al anclaje de los rectos verticales mediante sutura no reabsorbibles uniendolos bajo el recto lateral. Consideramos que es una técnica aparentemente menos iatrogénica que las trasposiciones descritas precedentemente, se obtuvo un buen alineamiento en posición primaria, sin alteración vertical residual y sin compromiso del segmento anterior.
PCC-53 Reconsiderando la importancia del estrabismo paralítico en el paciente diabético
Dras.: Rocío Rodríguez Rivera, Silvia Moguel Ancheíta
Barcelona
Dras.: Rocío Rodríguez Rivera, Silvia Moguel Ancheíta
Barcelona
Objetivo: El estudio analiza el estrabismo paralítico en pacientes diabéticos, comorbilidad, repercusiones y las alternativas de tratamiento.
Métodos: Estudio retrospectivo, descriptivo y transversal de pacientes con estrabismo paralítico asociado a Diabetes mellitus tipo II, del 1/08/2012 al 1/08/2013, en un hospital de concentración nacional. Se realizó estudio estrabológico completo y neurológico. El estrabismo se clasificó en: pequeño: 10-20 dioptrías prismáticas (dp); mediano: 21-35 dp; grande: mayor de 36 dp. El resultado al tratamiento del estrabismo se consideró: «Excelente» a la recuperación completa del estrabismo (90-100%); «Buena» a la recuperación del 50 al 89%; y «Regular» a la mejoría menor del 50%, «Mala» ante respuesta nula al tratamiento.
Resultados: 24 pacientes. Edad promedio 70 ± 9 años, 22% mujeres, 9,9% hombres. Tiempo de evolución de DM: 22.8 ± 9,9 años. Comorbilidad: Hipertensión arterial sistémica 41,6%; Hiperlipemia 20,8%; Nefropatía 16.6%; Neuropatía periférica 8,3%; adenoma hipofisiario 4%. Retinopatía diabética leve-moderada no proliferativa 20%; Retinopatía Proliferativa 4,16%. Alteraciones estrabológicas: Lesión de III nervio craneal (nc) 50%; VI nc 42%; IV nc: 4%; lesiones mixtas III+VI 21%; VI+VII 12%. Síndrome de Parinaud: 4%. Los estrabismos: pequeños 17%; medianos: 35%; grandes: 48%. Se indicó Toxina botulínica en todos los casos, con respuesta: Excelente: 25%; buena: 63%; regular: 12%. Se demostró que el tiempo de la enfermedad metabólica no tiene relacion con la presencia del estrabismo paralítico. (p = 0,01).
Conclusiones: La incidencia de complicaciones de la diabetes no tiene relación con el grado de desviación que presentan los pacientes por lo tanto puede aparecer como primera manifestación de la enfermedad. Y que la toxina botulínica aplicada en las primeras fases de la desviación ayuda a una mejoría más rápida evitando la contracción de los músculos yunta.
Métodos: Estudio retrospectivo, descriptivo y transversal de pacientes con estrabismo paralítico asociado a Diabetes mellitus tipo II, del 1/08/2012 al 1/08/2013, en un hospital de concentración nacional. Se realizó estudio estrabológico completo y neurológico. El estrabismo se clasificó en: pequeño: 10-20 dioptrías prismáticas (dp); mediano: 21-35 dp; grande: mayor de 36 dp. El resultado al tratamiento del estrabismo se consideró: «Excelente» a la recuperación completa del estrabismo (90-100%); «Buena» a la recuperación del 50 al 89%; y «Regular» a la mejoría menor del 50%, «Mala» ante respuesta nula al tratamiento.
Resultados: 24 pacientes. Edad promedio 70 ± 9 años, 22% mujeres, 9,9% hombres. Tiempo de evolución de DM: 22.8 ± 9,9 años. Comorbilidad: Hipertensión arterial sistémica 41,6%; Hiperlipemia 20,8%; Nefropatía 16.6%; Neuropatía periférica 8,3%; adenoma hipofisiario 4%. Retinopatía diabética leve-moderada no proliferativa 20%; Retinopatía Proliferativa 4,16%. Alteraciones estrabológicas: Lesión de III nervio craneal (nc) 50%; VI nc 42%; IV nc: 4%; lesiones mixtas III+VI 21%; VI+VII 12%. Síndrome de Parinaud: 4%. Los estrabismos: pequeños 17%; medianos: 35%; grandes: 48%. Se indicó Toxina botulínica en todos los casos, con respuesta: Excelente: 25%; buena: 63%; regular: 12%. Se demostró que el tiempo de la enfermedad metabólica no tiene relacion con la presencia del estrabismo paralítico. (p = 0,01).
Conclusiones: La incidencia de complicaciones de la diabetes no tiene relación con el grado de desviación que presentan los pacientes por lo tanto puede aparecer como primera manifestación de la enfermedad. Y que la toxina botulínica aplicada en las primeras fases de la desviación ayuda a una mejoría más rápida evitando la contracción de los músculos yunta.
PCC-54 Oftalmoplejía por herpes zoster. A propósito de un caso
Dres.: Carmen Gloria Rubio Rodríguez, Ruymán Rodríguez Gil, Bárbara Isabel Acosta Acosta, José Luis Delgado Miranda
Santa Cruz de Tenerife
Dres.: Carmen Gloria Rubio Rodríguez, Ruymán Rodríguez Gil, Bárbara Isabel Acosta Acosta, José Luis Delgado Miranda
Santa Cruz de Tenerife
Caso Clínico: Varón de 68 años que acude a urgencias por dolor y fotofobia en ojo derecho tres días después del inicio de herpes zoster oftálmico en región de la primera rama del N. Trigémico. A la exploración física presenta AV OD 0.4 y OI 0.7. En polo anterior se aprecian datos de querato-conjuntivitis herpética con PIO normal. El FO fue normal. Se pauta tratamiento tópico y sistémico antiherpético así como tratamiento tópico antibiótico y lubricación ocular. Una semana después debuta con neuralgia severa y caída de agudeza visual. A la exploración se objetiva AV OD 0.1, afectación del III PC con ptosis palpebral y limitación de supra, infra y levoversión. La pupila no presentó alteraciones. En polo anterior se objetiva edema corneal central con bullas y PIO 28 mmHg. Se diagnostica de endotelitis herpética y oftalmoplejía del III PC. Con dichos datos se añadió colirio antiedema, colirio prednisona y cicloplejía así como prednisona oral a dosis bajas. Diez días después se evidencia mejoría clínica presentando AV 0.6, ortotropía en PPM y mejoría de la ptosis. En polo anterior se evidenció desaparición del edema corneal con normalización de la PIO.
Discusión: La afectación de los pares craneales secundaria a infección por el virus Varicela-Zoster es rara apareciendo en el 11-29% de los pacientes afectados de enfermedad herpética con distribución en primera rama del N. Trigémino. Hasta el 2014 solo hay reportados 20 casos de síndrome de ápex orbitario (afectación NO, III, IV, VI y V1). Afecta sobre todo a pacientes mayores de 50 años y suele manifestarse como complicación tardía a los 2 meses de la infección ocular aunque en algunos casos se puede manifestar en el contexto de la afectación ocular herpética aguda. El par craneal más frecuentemente afectado es el III PC seguido del IV. El tratamiento consiste en antivíricos y corticoides sistémicos siendo su pronóstico bueno con resolución del cuadro entre los 2-18 meses.
Discusión: La afectación de los pares craneales secundaria a infección por el virus Varicela-Zoster es rara apareciendo en el 11-29% de los pacientes afectados de enfermedad herpética con distribución en primera rama del N. Trigémino. Hasta el 2014 solo hay reportados 20 casos de síndrome de ápex orbitario (afectación NO, III, IV, VI y V1). Afecta sobre todo a pacientes mayores de 50 años y suele manifestarse como complicación tardía a los 2 meses de la infección ocular aunque en algunos casos se puede manifestar en el contexto de la afectación ocular herpética aguda. El par craneal más frecuentemente afectado es el III PC seguido del IV. El tratamiento consiste en antivíricos y corticoides sistémicos siendo su pronóstico bueno con resolución del cuadro entre los 2-18 meses.
PCC-55 Toxina botulínica como alternativa al tratamiento del espasmo de punto próximo
Dres.: M.ª Luisa Merino Suárez, Carlos Laria Ochaíta, David Pablo Piñero Llorens, Arantxa Gómez-Hurtado Cubillana
Alicante
Dres.: M.ª Luisa Merino Suárez, Carlos Laria Ochaíta, David Pablo Piñero Llorens, Arantxa Gómez-Hurtado Cubillana
Alicante
El espasmo del punto próximo es una condición caracterizada por la aparición de pseudomiopía, endotropia de ángulo variable y miosis. Los pacientes que padecen esta condición normalmente refieren visión borrosa de lejos y cerca, diplopía intermitente, cefaleas y síntomas astenópicos. La refracción objetiva muestra una rápida conversión hacia altos defectos miópicos, especialmente durante los períodos de hiperconvergencia. La refracción cicloplégica es significativamente menos negativa, lo que confirma el espasmo de la acomodación, y la agudeza visual mejora bajo el efecto del fármaco. La miosis puede ser útil para descartar la presencia de una parálisis completa del III par craneal. Describimos el caso de una niña de 8 años con sintomatología de cefaleas y visión borrosa (agudeza visual monocular sin corrección de 0.1). La exploración reveló miosis, pseudomiopía, ausencia de restricciones de la motilidad y de alteraciones neurológicas. Tras un tratamiento inicial con colirio cicloplégico, persistió una pseudomiopía y endotropia intermitente y de ángulo variable. Fue posteriormente tratada con atropina y corrección refractiva positiva. La condición mejoró y se mantuvo estable durante unas semanas hasta que reaparecieron la pseudomiopía y la endotropia. Finalmente fue tratada con toxina botulínica (2.5 iu Botox®) inyectada en el recto medio en dos ocasiones. Este tratamiento fue complementado con una leve y limitada en el tiempo atropinización y con la ejecución a partir de este momento de un programa de terapia visual basado en basado en la estimulación de la divergencia fusional, haciendo especial hincapié en la conciencia de diplopía y estereopsis. Tres meses después se obtuvo ortotropia estable con una agudeza visual corregida de 1.0.
Conclusiones: La evolución y resultados clínicos de este caso clínico sugieren que la toxina botulínica a bajas dosis en combinación con otras alternativas terapéuticas puede ser útil en el tratamiento de esta condición.
Conclusiones: La evolución y resultados clínicos de este caso clínico sugieren que la toxina botulínica a bajas dosis en combinación con otras alternativas terapéuticas puede ser útil en el tratamiento de esta condición.
PCC-56 Microexotropía consecutiva espontánea como causa de diplopía en el adulto joven diagnosticado por video-oculografía (VOG-Perea)
Dres.: Sofía Navarro Corcuera, María Rojo Arnao, Juan José Navarro Esteban, José Perea García
Toledo
Dres.: Sofía Navarro Corcuera, María Rojo Arnao, Juan José Navarro Esteban, José Perea García
Toledo
La Exotropía Consecutiva es el resultado, en la mayoría de los casos, de la corrección quirúrgica excesiva de una esotropia previa. Sin embargo, en un porcentaje pequeño de casos puede ocurrir de forma primaria: Exotropia Consecutiva Espontánea. Dada su baja incidencia (entre el 0,4% y el 7% de todas las formas consecutivas) existe poca literatura al respecto, desconociéndose los factores desencadenantes de esta evolución. Se ha postulado la existencia de una esotropía de inicio precoz así como de una elevada hipermetropía. Presentamos el caso de un varón de 27 años de edad que refiere episodios de visión doble intermitente en la visión lejana . En su historia consta una endotropía no acomodativa de pequeño ángulo con hipermetropía de +2 esf. Ambliopía moderada de OD y ausencia de intervención quirúrgica. En la exploración encontramos AV OD 0,5 y 1 en OI. Ducciones y versiones normales. Al cover test microexotropía de OD con OI fijador que explica la diplopía cruzada. La exploración con VOG-Perea resulta determinante para establecer el diagnóstico y cuantificar la Exotropia Consecutiva Espontánea de nuestro paciente.
PCC-57 Parálisis aguda del recto medio en probable relación con traumatismo en paciente pediátrico
Dres.: Carmen Gloria Rubio Rodríguez, Bárbara Acosta Acosta, Alberto Afonso Rodríguez
Santa Cruz de Tenerife
Dres.: Carmen Gloria Rubio Rodríguez, Bárbara Acosta Acosta, Alberto Afonso Rodríguez
Santa Cruz de Tenerife
Paciente varón de 11 años de edad que acude por mareos y diplopía de inicio brusco en la levo versión de 48 horas de evolución. A la anamnesis dirigida encontramos traumatismo leve en zona derecha de la cara 48 horas antes del inicio del cuadro clínico, mientras saltaba en un castillo hinchable. A la exploración oftalmológica destaca AV o.9 OD, 1.0 OI. Torticolis cara izquierda. Exotropía en PPM 6DP OD con limitación de la aducción OD. La exploración con biomicroscopía y el fondo de ojos fueron normales. Se realiza refracción objetivándose leve miopía de -0.75 D del OD y OI emétrope. El estudio de imagen realizado de urgencias con TAC fue normal y la RMN realizada 3 días después mostró discreta disminución de la dimensión del vientre muscular del músculo recto medio derecho sin alteraciones significativas de señal con respecto al contralateral así como ocupación de ambas fosas nasales y senos maxilares. En el control de la semana se aprecia mejoría significativa con ortoforia lejos y cerca y leve limitación de -1 a la aducción OD. En el control del mes el paciente seguía en ortoforia con completa recuperación de la aducción del OD. En nuestro caso no estamos seguros de que la paresia aislada del recto medio del ojo derecho fuese causada por un traumatismo aislado de la rama externa del recto medio o del propio musculo o por una afectación concomitante a un proceso inflamatorio de los senos adyacentes y que ocurriera de forma paralela al traumatismo facial. En cualquier caso la evolución fue buena con recuperación espontánea del proceso a la semana de evolución y sin necesidad de tratamiento.
PCC-58 Síndrome de Brown invertido
Dres.: Lilian Margot Peralta Díaz, Francisco Pérez Bartolomé, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Dres.: Lilian Margot Peralta Díaz, Francisco Pérez Bartolomé, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
El síndrome de Brown invertido puede presentarse en pacientes con parálisis del IV con o sin cirugía previa del oblicuo inferior o postraumático. El Oblicuo inferior tenso puede enmascarar la hipoaccion del oblicuo superior. Presentamos el cuadro clinico de una parálisis del IV con mayor defecto en infraversión y ducción pasiva positiva para el oblicuo inferior en la cual la cirugía amplia de este músculo inferior permitió corregir este cuadro.
PCC-59 Síndrome de ápex orbitario secundario a descompresión de pared medial y lateral en la orbitopatía de Graves
Dres.: José Javier San Román Llorens, José Alberto Reche Sainz, Borja Maroto Rodríguez, Nicolás Toledano Fernández
Madrid
Dres.: José Javier San Román Llorens, José Alberto Reche Sainz, Borja Maroto Rodríguez, Nicolás Toledano Fernández
Madrid
Introducción: El síndróme del ápex orbitario (SAO) se define como el conjunto de signos y síntomas que involucran un daño causado a las estructuras nerviosas que emergen del vértice de la órbita (nervios craneales II, III, IV, V y VI) presentándose con oftalmoplejía, arreflexia pupilar, disminución catastrófica de la agudeza visual y en ocasiones alteraciones de la sensibilidad facial. La etiología es variada destacando la traumática, infecciosa, inflamatoria, vascular y iatrogénica.
Caso clínico: Paciente mujer de 53 años presenta oftalmoplejía completa, arreflexia pupilar y disminución de la sensibilidad orbitaria en el postoperatorio temprano tras descomprensión orbitaria de pared medial y lateral por orbitopatía de Graves de larga evolución. Se realizan pruebas de neuroimagen de manera urgente sin evidenciarse hematomas ni lesiones compresivas del nervio óptico y se procede a la administración de bolos de metilprednisolona. A los dos años la paciente presenta una agudeza visual de percepción de luz con limitación en la supraducción y abducción del ojo intervenido.
Conclusiones: El SAO es un complicación excepcional en la cirugía de la orbitopatía de Graves debido al aumento de la presión que se ejerce retrógradamente en el vértice orbitario durante el acto quirúrgico. El pronóstico de la enfermedad una vez establecido es malo incluso con un rápido tratamiento y soporte adecuado.
Caso clínico: Paciente mujer de 53 años presenta oftalmoplejía completa, arreflexia pupilar y disminución de la sensibilidad orbitaria en el postoperatorio temprano tras descomprensión orbitaria de pared medial y lateral por orbitopatía de Graves de larga evolución. Se realizan pruebas de neuroimagen de manera urgente sin evidenciarse hematomas ni lesiones compresivas del nervio óptico y se procede a la administración de bolos de metilprednisolona. A los dos años la paciente presenta una agudeza visual de percepción de luz con limitación en la supraducción y abducción del ojo intervenido.
Conclusiones: El SAO es un complicación excepcional en la cirugía de la orbitopatía de Graves debido al aumento de la presión que se ejerce retrógradamente en el vértice orbitario durante el acto quirúrgico. El pronóstico de la enfermedad una vez establecido es malo incluso con un rápido tratamiento y soporte adecuado.
PCC-60 Diplopía tras anestesia epidural: a propósito de un caso
Dras.: Laura López Soriano, Encarnación Mengual Verdú, Elsa Font Juliá, Paz Orts Vila
Alicante
Dras.: Laura López Soriano, Encarnación Mengual Verdú, Elsa Font Juliá, Paz Orts Vila
Alicante
Introducción: El sexto par craneal recorre una larga distancia desde su origen en el tronco del encéfalo, hasta llegar a los músculos oculomotores en la órbita, siendo muy sensible a cualquier patología que implique compresión local y a los cambios de la presión intracraneal.
Caso Clínico: Mujer de 26 años, sin antecedentes de interés, que acude a Urgencias por diplopia y cefalea de 24 horas de evolución, ocho días después de una anestesia epidural por su primer parto, que transcurrió sin complicaciones. La exploración general fue normal y en la oftalmológica se detectó una limitación de la abducción del ojo izquierdo, compatible con una paresia del VI par craneal izquierdo, confirmándose en el test de Hess. La agudeza visual era de la unidad en ambos ojos, la presión intraocular se encontraba dentro de la normalidad y en la exploración del polo anterior y posterior no se objetivaron hallazgos patológicos. Los estudios analíticos, el electrocardiograma y el TAC craneal resultaron dentro de la normalidad. Ante la sospecha de un síndrome de hipotensión intracraneal tras punción lumbar, se decidió tratamiento conservador con hidratación y oclusiones oculares alternas y cuatro semanas después del inicio del cuadro, la diplopía se había resuelto.
Conclusiones: La hipotensión del líquido cefalorraquídeo tras un procedimiento de anestesia epidural, es una posible causa de diplopía a tener en cuenta ante una paresia oculomotora, especialmente si se trata del VI par.
Caso Clínico: Mujer de 26 años, sin antecedentes de interés, que acude a Urgencias por diplopia y cefalea de 24 horas de evolución, ocho días después de una anestesia epidural por su primer parto, que transcurrió sin complicaciones. La exploración general fue normal y en la oftalmológica se detectó una limitación de la abducción del ojo izquierdo, compatible con una paresia del VI par craneal izquierdo, confirmándose en el test de Hess. La agudeza visual era de la unidad en ambos ojos, la presión intraocular se encontraba dentro de la normalidad y en la exploración del polo anterior y posterior no se objetivaron hallazgos patológicos. Los estudios analíticos, el electrocardiograma y el TAC craneal resultaron dentro de la normalidad. Ante la sospecha de un síndrome de hipotensión intracraneal tras punción lumbar, se decidió tratamiento conservador con hidratación y oclusiones oculares alternas y cuatro semanas después del inicio del cuadro, la diplopía se había resuelto.
Conclusiones: La hipotensión del líquido cefalorraquídeo tras un procedimiento de anestesia epidural, es una posible causa de diplopía a tener en cuenta ante una paresia oculomotora, especialmente si se trata del VI par.
PCC-61 Endotropía cíclica asociada a alteraciones cíclicas de la función visual
Dres.: Francisco Pérez Bartolomé, Lilian Margot Peralta Díaz, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Dres.: Francisco Pérez Bartolomé, Lilian Margot Peralta Díaz, Laura Morales Fernández, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Madrid
Paciente de 64 años con ET asociada a Miopía Magna. Es intervenida mediante una técnica de retroinserción RM y Resección del RL OI. Tras la cirugía la paciente refiere episodios de 36 horas de ortoposición y episodos de diplopia con una Et de 4 DP. En los episodios de ET la paciente refiere además mayor metamorfopsia en monocular. Dos años después la paciente persiste en sus ciclos de alteración funcional de la motilidad ocular y visual. Presentamos la situación motora y retiniana.
PCC-62 Estudio de correlación de la medida de la distancia al limbo de los músculos rectos horizontales mediante tomografía de coherencia óptica y la longitud axial del globo ocular
Dres.: Lucía de Pablo Gómez de Liaño, José Fernández-Vigo, Néstor Ventura Abreu, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Avila
Dres.: Lucía de Pablo Gómez de Liaño, José Fernández-Vigo, Néstor Ventura Abreu, Rosario Gómez de Liaño Sánchez
Avila
Propósito: Estudiar la correlación existente entre la distancia de la inserción muscular de los rectos horizontales al limbo esclerocorneal, medido mediante tomografía de coherencia óptica (OCT), y la longitud axial (L.A) del globo ocular.
Método: Estudio transversal realizado en 60 ojos de 30 sujetos sanos. Se empleó la OCT Spectralis (Heidelberg engineering Inc.) con la cual se identificaron los músculos rectos horizontales realizándose la medida desde la inserción al limbo esclerocorneal. Se empleó el biómetro óptico Lenstar (Bloss) para calcular la L.A del globo ocular. Se calculó la correlación de Pearson mediante el programa SPSS.
Resultados: La edad media fue de 51 años (rango 25-75) siendo un 65% mujeres. Se pudo identificar y medir la distancia en el 88% de los casos. El recto lateral se observó a una distancia media de 6,4 mm del limbo (rango 5,9-7,1), mientras que el recto medio se observó a 5,2 mm del limbo (rango 4,1-5,9). Se obtuvo una alta reproducibilidad de las medidas tanto intra como interobservador (CCI≥0,90). Se observó un coeficiente de correlación R=0,065; (p>0,05) entre el recto lateral y la L.A, siendo R= 0,045; (p>0,05) entre el recto medial y la L.A.
Conclusiones: No se observó correlación entre la distancia de la inserción muscular de los rectos horizontales al limbo medida mediante OCT y la longitud axial del globo ocular.
Método: Estudio transversal realizado en 60 ojos de 30 sujetos sanos. Se empleó la OCT Spectralis (Heidelberg engineering Inc.) con la cual se identificaron los músculos rectos horizontales realizándose la medida desde la inserción al limbo esclerocorneal. Se empleó el biómetro óptico Lenstar (Bloss) para calcular la L.A del globo ocular. Se calculó la correlación de Pearson mediante el programa SPSS.
Resultados: La edad media fue de 51 años (rango 25-75) siendo un 65% mujeres. Se pudo identificar y medir la distancia en el 88% de los casos. El recto lateral se observó a una distancia media de 6,4 mm del limbo (rango 5,9-7,1), mientras que el recto medio se observó a 5,2 mm del limbo (rango 4,1-5,9). Se obtuvo una alta reproducibilidad de las medidas tanto intra como interobservador (CCI≥0,90). Se observó un coeficiente de correlación R=0,065; (p>0,05) entre el recto lateral y la L.A, siendo R= 0,045; (p>0,05) entre el recto medial y la L.A.
Conclusiones: No se observó correlación entre la distancia de la inserción muscular de los rectos horizontales al limbo medida mediante OCT y la longitud axial del globo ocular.
PCC-63 Tocilizumab en la miopatía restrictiva distiroidea
Dres.: Patricia Ibáñez Ayuso, M.ª Elena Galán Risueño, José M.ª García Ruiz de Morales, Elena Pérez Díez
Burgos
Dres.: Patricia Ibáñez Ayuso, M.ª Elena Galán Risueño, José M.ª García Ruiz de Morales, Elena Pérez Díez
Burgos
La orbitopatía tiroidea (OT) es una enfermedad inflamatoria orbitaria con un posible origen autoinmune que suele asociarse a trastornos metabólicos de la glándula tiroidea. A nivel de los músculos extraoculares produce engrosamiento muscular. Cuando esta miositis se hace crónica produce fibrosis del músculo, originando una miopatía restrictiva que cursa con limitación de la motilidad, dolor y diplopía. Mujer de 46 años con alteración tiroidea conocida que comienza con episodio de diplopía vertical sin disminución de la agudeza visual. A la exploración hipotropia de ojo izquierdo de 8 dioptrias y limitación de la supraduccion. Se comienza tratamiento con bolos de corticoides con escasa mejoría teniéndose que realizar 9 ciclos hasta lograr remisión clínica. Se solicita resonancia magnética (RM) que es informada como engrosamiento del recto inferior. Al año tras realizar tiroidectomía aparece un nuevo cuadro de diplopía horizontal con endotropía de 10 dioptrias. En la RM alteración de musculo recto medio. Ante la imposibilidad de nuevo tratamiento corticoideo se pauta Tocilizumab con gran mejoría del cuadro clínico. El tratamiento de OT depende del grado de actividad y gravedad de la enfermedad. Los glucocorticoides sistémicos reducen la diplopía logrando un control rápido de la fase inflamatoria, pero existe la probabilidad de pacientes no respondedores, y presentan numerosos efectos secundarios sistémicos. Tocilizumab es un anticuerpo monoclonal recombinante humanizado anti-receptor de IL-6 indicado en OT grave y refractaria a tratamientos convencionales como corticoides y descompresiones orbitarias. En nuestra paciente su uso ha logrado una importante mejoría clínica y subjetiva con gran rapidez de actuación.
PCC-64 Descompresión orbitaria en alta miopía
Dres.: Fredy Ruiz Aimituma, José Alberto Reche Sainz, Ignacio Genol Saavedra, Borja Maroto Rodríguez
Madrid
Dres.: Fredy Ruiz Aimituma, José Alberto Reche Sainz, Ignacio Genol Saavedra, Borja Maroto Rodríguez
Madrid
Introducción: La alta miopía unilateral puede producir estrabismo, ambliopía y pseudoproptosis por incremento de la longitud axial del globo ocular, causando problemas estéticos y funcionales. La cirugía de descompresión orbitaria normalmente se indica en casos de proptosis por orbitopatía tiroidea. Presentamos el manejo de dos casos de alta miopía unilateral tratados con descompresión orbitaria más cirugía de estrabismo, en los que evaluamos el grado de proptosis, estrabismo y calidad de vida.
Casos Clínicos: Caso 1: Se trata de un varón de 53 años, con historia de miopía alta anisometrópica unilateral de ojo izquierdo, MAVC OD: 1 OI: percepción de luz, autorrefracción OD +1.25 -3.25 a 155° OI -26.25 -4 a 178°, longitud axial OD 23.58 OI 33.52, Hertel a 109 OD 19 OI 21, pseudoproptosis, con hipotropia de OI de 16 dioptrías prismáticas (dp). CASO 2: Se trata de una mujer de 52 años, con historia de miopía alta anisometropica a predominio de ojo derecho y pseudofaquia bilateral. MAVC OD 1 (-0.25) OI 0.5 (-1.00 a 140º), autorrefracción OD -24.25 -1.25 a 72° OI -10.75 -1.75 a 152°, longitud axial OD 32.09 OI 27.13. Hertel a 107 OD 23 OI 20, pseudoproptosis, desviación vertical de 10 dp con sensación de diplopía. En ambos casos se practicó una descompresión orbitaria de pared lateral del ojo más miope y en un segundo tiempo corrección del estrabismo con una resección de recto superior más retroinserción del recto inferior. Resultando en los pacientes una reducción de la proptosis (caso 1: Hertel a 109 19/19, caso 2: Hertel a 107 20/20), reducción de la desviación vertical (caso1: a 2 dp, caso 2: sin diplopía ni desviación en ppm) y mejoría de la calidad de vida.
Conclusiones: La descompresión orbitaria asociada a la cirugía de estrabismo es una buena alternativa de tratamiento y técnica quirúrgica novedosa para la corrección de ojos con alta miopía unilateral que presentan proptosis y estrabismo; además de tener buenos resultados estéticos y funcionales.
Casos Clínicos: Caso 1: Se trata de un varón de 53 años, con historia de miopía alta anisometrópica unilateral de ojo izquierdo, MAVC OD: 1 OI: percepción de luz, autorrefracción OD +1.25 -3.25 a 155° OI -26.25 -4 a 178°, longitud axial OD 23.58 OI 33.52, Hertel a 109 OD 19 OI 21, pseudoproptosis, con hipotropia de OI de 16 dioptrías prismáticas (dp). CASO 2: Se trata de una mujer de 52 años, con historia de miopía alta anisometropica a predominio de ojo derecho y pseudofaquia bilateral. MAVC OD 1 (-0.25) OI 0.5 (-1.00 a 140º), autorrefracción OD -24.25 -1.25 a 72° OI -10.75 -1.75 a 152°, longitud axial OD 32.09 OI 27.13. Hertel a 107 OD 23 OI 20, pseudoproptosis, desviación vertical de 10 dp con sensación de diplopía. En ambos casos se practicó una descompresión orbitaria de pared lateral del ojo más miope y en un segundo tiempo corrección del estrabismo con una resección de recto superior más retroinserción del recto inferior. Resultando en los pacientes una reducción de la proptosis (caso 1: Hertel a 109 19/19, caso 2: Hertel a 107 20/20), reducción de la desviación vertical (caso1: a 2 dp, caso 2: sin diplopía ni desviación en ppm) y mejoría de la calidad de vida.
Conclusiones: La descompresión orbitaria asociada a la cirugía de estrabismo es una buena alternativa de tratamiento y técnica quirúrgica novedosa para la corrección de ojos con alta miopía unilateral que presentan proptosis y estrabismo; además de tener buenos resultados estéticos y funcionales.
PCC-65 Síndrome de Smith Magenis
Dres.: Edgar Javier Infantes Molina, Sonia López-Romero Moraleda, Ángela Barrajón Rodríguez, Fernando González del Valle
Ciudad Real
Dres.: Edgar Javier Infantes Molina, Sonia López-Romero Moraleda, Ángela Barrajón Rodríguez, Fernando González del Valle
Ciudad Real
Introducción: El síndrome de Smith Magenis es un cuadro que cursa con anomalías congénitas y retraso mental de gravedad variable. Causado por haploinsuficiencia del gen inducido por ácido retinoico (RAI 1) ubicado en el cromosoma 17p11.2; o por la mutación del gen RAI1. Su prevalencia es de 1 por 25000 recién nacidos. Cursa con braquicefalia, hipoplasia de la cara media, prognatismo, eversión del labio superior, sinofridia y alteraciones orolaringeas. Las anormalidades oculares descritas en asociación a este síndrome son miopía y estrabismo. Nuestra paciente en cambio, presenta hipermetropía y astigmatismo, además de ambliopía leve en OI, que fue corregida solo con el uso de gafas.
Caso Clínico: Presentamos el caso de una niña con síndrome de Smith Magenis. Se realizó una primera exploración oftalmológica a la edad de 20 meses, en la que se observó un polo anterior y posterior normales, ortoforia, motilidad sin alteraciones y una refracción por retinoscopia de +3.00 esf -1.50 cilíndro a 180º en AO. En la última exploración, a la edad de 4 años, la paciente presenta una AV de 0.8 en OD y 0.6 en OI con Pigassou (la niña presenta retraso psicomotor y dificultasd en el lenguaje). Tiene una refracción de +2.50 -2.00 a 170º en OD y de +3.75 -2.75 a 173º. Se encuentra en ortoforia y se prescribe corrección óptica con +1.50 -2.00 a 170º y de +2.50-2.75 a 170º. A los 6 meses se ha adaptado completamente a sus gafas, tiene una AV de 1 en AO con Pigassou, test de estereopsis con TNO negativo. Siguen sin observarse alteraciones en la motilidad extrínseca ocular y está en ortotropia.
Conclusión: El propósito de este caso clínico, identificado en nuestro hospital, es estimular el conocimiento y el diagnóstico oportuno de este trastorno, así como de las posibles manifestaciones oculares asociadas. EL síndrome de Smith Magenis es inusual, pero posible en pacientes con alteraciones oculares y retraso neurológico.
Caso Clínico: Presentamos el caso de una niña con síndrome de Smith Magenis. Se realizó una primera exploración oftalmológica a la edad de 20 meses, en la que se observó un polo anterior y posterior normales, ortoforia, motilidad sin alteraciones y una refracción por retinoscopia de +3.00 esf -1.50 cilíndro a 180º en AO. En la última exploración, a la edad de 4 años, la paciente presenta una AV de 0.8 en OD y 0.6 en OI con Pigassou (la niña presenta retraso psicomotor y dificultasd en el lenguaje). Tiene una refracción de +2.50 -2.00 a 170º en OD y de +3.75 -2.75 a 173º. Se encuentra en ortoforia y se prescribe corrección óptica con +1.50 -2.00 a 170º y de +2.50-2.75 a 170º. A los 6 meses se ha adaptado completamente a sus gafas, tiene una AV de 1 en AO con Pigassou, test de estereopsis con TNO negativo. Siguen sin observarse alteraciones en la motilidad extrínseca ocular y está en ortotropia.
Conclusión: El propósito de este caso clínico, identificado en nuestro hospital, es estimular el conocimiento y el diagnóstico oportuno de este trastorno, así como de las posibles manifestaciones oculares asociadas. EL síndrome de Smith Magenis es inusual, pero posible en pacientes con alteraciones oculares y retraso neurológico.
PCC-66 Filariasis ocular en niños
Dres.: Alejandro Dávila Flores, Cynthia Salinas Guerra, Pablo Plaza Ramos, Marta Bové Gurí
Navarra
Dres.: Alejandro Dávila Flores, Cynthia Salinas Guerra, Pablo Plaza Ramos, Marta Bové Gurí
Navarra
Introducción: La filariasis son un grupo de enfermedades parasitarias en el humano, endémicas de regiones tropicales, que son transmitidos en forma de larva o microfilaria por medio de vectores que son generalmente mosquitos. En España ésta entidad es rara, sin embargo el aumento del flujo migratorio genera la detección de casos.
Caso Clínico: Presentamos un caso de una paciente de 8 años, originaria de Guinea ecuatorial, con antecedente de malaria. Acude a urgencias por molestias inespecíficas en ojo derecho, y leve inflamación palpebral. Ingresada una semana antes por fiebre de origen a determinar e hipereosinofilia en estudio. A la exploración se detecta «gusano móvil subconjuntival» mayor de 20 milimetros en región temporal de ojo derecho. Se sospecha filariasis, se solicita PCR y serologías, y se indica extracción de nematodo. En la exploración en el quirófano no se evidencia presencia del gusano, pero la paciente refiere notar que se mueve en sien derecha. Se inicia tratamiento sistémico con stromectol y atovacuona+proguanil. Actualmente la paciente se encuentra asintomática.
Conclusión: Ante pacientes originarios de zonas endémicas, con hipereosinofilia y síntomas inespecíficos oculares, debemos incluir en el diagnostico diferencial la filariasis. La observación directa de gusanos subconjuntivales o subdérmicos nos confirman el diagnóstico. Los hallazgos analíticos como eosinofilia, IgE, y PCR nos ayudan en casos dudosos, o migración del nematodo como en nuestro caso.
Caso Clínico: Presentamos un caso de una paciente de 8 años, originaria de Guinea ecuatorial, con antecedente de malaria. Acude a urgencias por molestias inespecíficas en ojo derecho, y leve inflamación palpebral. Ingresada una semana antes por fiebre de origen a determinar e hipereosinofilia en estudio. A la exploración se detecta «gusano móvil subconjuntival» mayor de 20 milimetros en región temporal de ojo derecho. Se sospecha filariasis, se solicita PCR y serologías, y se indica extracción de nematodo. En la exploración en el quirófano no se evidencia presencia del gusano, pero la paciente refiere notar que se mueve en sien derecha. Se inicia tratamiento sistémico con stromectol y atovacuona+proguanil. Actualmente la paciente se encuentra asintomática.
Conclusión: Ante pacientes originarios de zonas endémicas, con hipereosinofilia y síntomas inespecíficos oculares, debemos incluir en el diagnostico diferencial la filariasis. La observación directa de gusanos subconjuntivales o subdérmicos nos confirman el diagnóstico. Los hallazgos analíticos como eosinofilia, IgE, y PCR nos ayudan en casos dudosos, o migración del nematodo como en nuestro caso.
Comunicaciones en Vídeo
V-01 Cirugía del estrabismo con el gancho acanalado de Wright
Dres.: José Miguel Hervás Hernandis, Germán Brieba Yungue, Rodrigo Clemente Tomás, Inmaculada Almor Palacios
Valencia
Dres.: José Miguel Hervás Hernandis, Germán Brieba Yungue, Rodrigo Clemente Tomás, Inmaculada Almor Palacios
Valencia
Presentamos en este vídeo dos ejemplos de la utilización del gancho de Wright. Este util instrumento quirúrgico consiste en un gancho de estrabismo con un diseño en su extremo acanalado. Este gancho proporciona un espacio bajo el músculo que facilita al cirujano realizar el paso de la aguja protegiendo al tiempo la esclera. Es de especial utilidad en la cirugía de estrabismos con músculos retraídos y en el aprendizaje de la cirugía de estrabismos por residentes.
V-02 Exploración coordimétrica por vídeo-oculografía
Dr.: José Perea García
Toledo
Dr.: José Perea García
Toledo
Objetivo: Mostrar la exploración coordimétrica mediante video-oculografía, y también el procedimiento específico en existencia de diplopía. Se muestran ejemplos de procedimiento y resultados.
Método: Un estímulo verde es proyectado sobre pantalla en los meridianos de posiciones secundarias y terciarias y, si fuera preciso, en cualquiera de los meridianos contenidos en el Plano de Listing. El paciente porta una gafa con cristal rojo ante un ojo y no coloreado ante el otro. El ojo con el cristal no coloreado sigue el estímulo mientras el otro ojo (con el cristal rojo antepuesto), que no ve el estímulo, realiza el mismo movimiento cumplimentando la Ley de Equivalencia motora de Terrien-Quéré. La cámara capta el movimiento de los dos ojos puesto que el cristal rojo antepuesto se deja atravesar por el infrarrojo haciéndolo visible.
Resultados: Se demuestra la importancia de la video-oculografía, superior a los procedimientos clásicos en cuanto a precisión y rapidez.
Conclusiones: La vídeo-oculografía es procedimiento de exploración que permite ver, analizar y grabar comportamientos motores oculares, desconocidos hasta este momento. En este trabajo no existe interés comercial ni se ha recibido apoyo económico alguno.
Método: Un estímulo verde es proyectado sobre pantalla en los meridianos de posiciones secundarias y terciarias y, si fuera preciso, en cualquiera de los meridianos contenidos en el Plano de Listing. El paciente porta una gafa con cristal rojo ante un ojo y no coloreado ante el otro. El ojo con el cristal no coloreado sigue el estímulo mientras el otro ojo (con el cristal rojo antepuesto), que no ve el estímulo, realiza el mismo movimiento cumplimentando la Ley de Equivalencia motora de Terrien-Quéré. La cámara capta el movimiento de los dos ojos puesto que el cristal rojo antepuesto se deja atravesar por el infrarrojo haciéndolo visible.
Resultados: Se demuestra la importancia de la video-oculografía, superior a los procedimientos clásicos en cuanto a precisión y rapidez.
Conclusiones: La vídeo-oculografía es procedimiento de exploración que permite ver, analizar y grabar comportamientos motores oculares, desconocidos hasta este momento. En este trabajo no existe interés comercial ni se ha recibido apoyo económico alguno.
V-03 ¿Qué aporta la vídeo-oculografía al estudio de las vergencias?
Dr.: José Perea García
Toledo
Dr.: José Perea García
Toledo
Objetivo: Mostrar que el sistema vídeo es el procedimiento más fisiológico que existe para explorar los movimientos de vergencia (convergencia y divergencia) y su patología. También mostrarlo como único método aplicable, no contaminado, para llegar a distinguir el ojo dominante en el conjunto bi-ocular.
Método: Dos procedimientos a emplear: La vergencia de refijación y la vergencia mantenida. La técnica utilizada es la video-oculografía con el dispositivo VOG Perea.
Resultados: Demostraciones prácticas que evidencian: 1. Casos clínicos en pacientes que con insuficiencia de convergencia pasan desapercibidos, tras estudio con video-oculografía se demuestra su patología; 2. Que el acto de convergencia y divergencia es algo más que la colaboración unísona de ambos rectos medios y de ambos rectos laterales respectivamente; 3. La exploración de las vergencias es procedimiento idóneo para determinar la dominancia ocular (patológica o fisiológica).
Conclusiones: La vídeo-oculografía es único y rápido procedimiento, aplicable desde la edad de 4 años, para explorar las vergencias, para conocer la dominancia ocular (muy útil en microtropías) y para mostrar cómo son los desplazamientos oculares al converger y al divergir. En este trabajo no existe interés comercial ni se ha recibido apoyo económico alguno.
Método: Dos procedimientos a emplear: La vergencia de refijación y la vergencia mantenida. La técnica utilizada es la video-oculografía con el dispositivo VOG Perea.
Resultados: Demostraciones prácticas que evidencian: 1. Casos clínicos en pacientes que con insuficiencia de convergencia pasan desapercibidos, tras estudio con video-oculografía se demuestra su patología; 2. Que el acto de convergencia y divergencia es algo más que la colaboración unísona de ambos rectos medios y de ambos rectos laterales respectivamente; 3. La exploración de las vergencias es procedimiento idóneo para determinar la dominancia ocular (patológica o fisiológica).
Conclusiones: La vídeo-oculografía es único y rápido procedimiento, aplicable desde la edad de 4 años, para explorar las vergencias, para conocer la dominancia ocular (muy útil en microtropías) y para mostrar cómo son los desplazamientos oculares al converger y al divergir. En este trabajo no existe interés comercial ni se ha recibido apoyo económico alguno.
V-04 Test de las 4 dioptrías. Exploración por vídeo-oculografía
Dr.: José Perea García
Toledo
Dr.: José Perea García
Toledo
Objetivo: Mostrar por vez primera, mediante comunicación en vídeo, la exploración mediante el test de las 4 dioptrías (Irvine-Jampolsky), practicada por video-oculografía.
Método: El dispositivo de video-oculografía utilizado ha sido VOG Perea. Además de enseñar en vídeo lo que ocurre en la microtropía, sobre la base de una muestra de 150 pacientes normales se realiza una práctica de lo que sucede en fisiología cuando se utiliza el test.
Resultados: Se demuestra la importancia de la video-oculografía referida a su rapidez, precisión y sencillez de ejecución, muy superior a los procedimientos clásicos. Se enseña el acontecer de esta prueba cuando se verifica en personas normales, aportando una clasificación de resultados.
Conclusiones: La vídeo-oculografía es el más novedoso y, sin duda, mejor procedimiento que existe en el momento actual para exploración y análisis mediante el test de las 4 dioptrías, empleado en el diagnóstico de la microtropía.
En este trabajo no existe interés comercial ni se ha recibido apoyo económico alguno.
Método: El dispositivo de video-oculografía utilizado ha sido VOG Perea. Además de enseñar en vídeo lo que ocurre en la microtropía, sobre la base de una muestra de 150 pacientes normales se realiza una práctica de lo que sucede en fisiología cuando se utiliza el test.
Resultados: Se demuestra la importancia de la video-oculografía referida a su rapidez, precisión y sencillez de ejecución, muy superior a los procedimientos clásicos. Se enseña el acontecer de esta prueba cuando se verifica en personas normales, aportando una clasificación de resultados.
Conclusiones: La vídeo-oculografía es el más novedoso y, sin duda, mejor procedimiento que existe en el momento actual para exploración y análisis mediante el test de las 4 dioptrías, empleado en el diagnóstico de la microtropía.
En este trabajo no existe interés comercial ni se ha recibido apoyo económico alguno.
V-05 Aplicaciones de la videooculografía en el estrabismo: 4 casos clínicos distintos
Dres.: Joan Prat Bartomeu, Isabel Ayet Roger
Barcelona
Dres.: Joan Prat Bartomeu, Isabel Ayet Roger
Barcelona
La videooculografía es un nuevo método de exploración del estrabisme ya al alcance de la clínica. Permite estudiar con precisión cualquier tipo de desviación ocular horitzontal y vertical. Dispositivos más avanzados pueden medir torsiones en la maniobra de Bielschowsky y en las posiones centrales y paracentrales de la mirada. Se presenta como se coloca el dispositivo y seguidamente se muestran 4 3 casos clínicos: una endotropía de gran ángulo en pre y postoperatorio, una parálisis de recto lateral, un síndrome Y y una hiperacción de oblicuos.
Comunicaciones en Vídeo Casos Clínicos
VCC-06 Cirugía mínimamente invasiva de rectos horizontales
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, Javier San Román Llorens, José Alberto Reche Sainz, Raquel Lapuente Monjas
Madrid
Dres.: Héctor Fernández Jiménez-Ortiz, Javier San Román Llorens, José Alberto Reche Sainz, Raquel Lapuente Monjas
Madrid
Objetivo: Presentación en vídeo de un caso clínico con cirugía mínimamente invasiva de rectos horizontales.
Introducción: La cirugía mínimamente invasiva de rectos horizontales se presenta como una técnica que mejora en el dolor y sensación de cuerpo extraño en el postoperatorio inmediato por realizarse a través de incisiones más alejadas del limbo y con una incisión conjuntiva de menor tamaño que la cirugía clásica.
Caso Clínico: Presentamos el caso de una niña de 15 años con exotropia de gran ángulo en contexto de paludismo cerebral con deficiencia cognitiva grave secundaria. La paciente resulta inexplotable en consulta por lo que se decide intervenir quirúrgicamente para corregir la exotropia y aprovechar la anestesia para explorar adecuadamente a la paciente. Se presenta en vídeo la exploración en consulta preparatoria, la cirugía de retroinserción de rectos laterales de ambos ojos y el resultado y evolución postoperatorias.
Conclusión: La cirugía mínimamente invasiva de rectos horizontales puede ser la indicada para aquellos casos en que resulta complicado aplicar el tratamiento tópico postoperatorio o controlar la automanipulación del ojo esta cirugía puede permitir un mejor cumplimiento y disminuir el riesgo de infecciones o deshiscencia de suturas postoperatorias.
Introducción: La cirugía mínimamente invasiva de rectos horizontales se presenta como una técnica que mejora en el dolor y sensación de cuerpo extraño en el postoperatorio inmediato por realizarse a través de incisiones más alejadas del limbo y con una incisión conjuntiva de menor tamaño que la cirugía clásica.
Caso Clínico: Presentamos el caso de una niña de 15 años con exotropia de gran ángulo en contexto de paludismo cerebral con deficiencia cognitiva grave secundaria. La paciente resulta inexplotable en consulta por lo que se decide intervenir quirúrgicamente para corregir la exotropia y aprovechar la anestesia para explorar adecuadamente a la paciente. Se presenta en vídeo la exploración en consulta preparatoria, la cirugía de retroinserción de rectos laterales de ambos ojos y el resultado y evolución postoperatorias.
Conclusión: La cirugía mínimamente invasiva de rectos horizontales puede ser la indicada para aquellos casos en que resulta complicado aplicar el tratamiento tópico postoperatorio o controlar la automanipulación del ojo esta cirugía puede permitir un mejor cumplimiento y disminuir el riesgo de infecciones o deshiscencia de suturas postoperatorias.
VCC-07 Cirugía de afilamiento del tendón del oblicuo superior en el Síndrome de Brown y cierre conjuntival con Tissucol
Dra.: Marta Galdós Iztueta
Vizcaya
Dra.: Marta Galdós Iztueta
Vizcaya
Se presenta un vídeo de la cirugía de afilamiento del tendón del oblicuo superior en una niña con Síndrome de Brown en ojo izquierdo
VCC-08 «Heavy Eye» corregido con banda de silicona de cerclaje escleral
Dres.: Edgar Javier Infantes Molina, Ángela Barrajón Rodríguez, Sonia López-Romero Moraleda, Tirsa Elvira López Arroquia
Ciudad Real
Dres.: Edgar Javier Infantes Molina, Ángela Barrajón Rodríguez, Sonia López-Romero Moraleda, Tirsa Elvira López Arroquia
Ciudad Real
Introducción: El síndrome MAPE (esotropía miópica adquirida progresiva) se denomina a la miopía y esotropía que aumentan simultáneamente en el tiempo. Si adicionalmente se observa hipotropía severa en el ojo miope se conoce como síndrome de ojo pesado (heavy eye). La resonancia magnética demuestra que debido al tamaño de los globos oculares miópicos y al estafiloma temporal superior hay desplazamiento inferior del RL y medial de los rectos verticales.
Caso Clínico: Mujer de 68 años que asiste a consulta por presentar diplopía desde cirugía de cristalino de OD por catarata y miopía magna. Tiene antecedente de endotropia infantil y ambliopía del OD. En el examen: la AV de 0.2 en el OD y de 1 en el OI. Tenía una refracción de -0.50-0.75 a 11º en OD y de +1.50-0.25 a 127 en OI corregida. Durante el cover test se observó una endotropía de +30 dioptrías prismáticas (DP) de lejos y cerca, además de una hipertropía del OI/OD de 16 DP de lejos y de 25 DP de cerca, con limitación de la abducción de OD. Presentaba tortícolis cabeza hombro derecho y Bielchowsky + sobre hombro izquierdo. El FO del OD: coroidosis miópica. Se diagnóstica de heavy eye (endotropía + hipotropía), realizando una miopexia del RL y del RS (técnica de Wong) con banda de silicona utilizada para el cerclaje en la cirugía de desprendimiento de retina (DR), colocándose a 12 mm de limbo, uniendo sus extremos con dacron de 5/0. En el postoperatorio se encuentra ortotropia horizontal con una leve hipertropia del OD de 3 DP y leve restricción de la infraversión del OD.
Conclusiones: Wong publicó 2 casos exitosos, siendo su técnica la utilizada por nosotros. Dicha técnica no necesita una sutura a esclera, por lo que eliminamos el riesgo de perforación en una estructura adelgazada por la presencia del estafiloma. Además, en casos fallidos es fácilmente reversible en el postoperatorio. En cuanto al material requerido para la miopexia del RS y RL podemos emplear la banda de silicona utilizada en el cerclaje del DR
Caso Clínico: Mujer de 68 años que asiste a consulta por presentar diplopía desde cirugía de cristalino de OD por catarata y miopía magna. Tiene antecedente de endotropia infantil y ambliopía del OD. En el examen: la AV de 0.2 en el OD y de 1 en el OI. Tenía una refracción de -0.50-0.75 a 11º en OD y de +1.50-0.25 a 127 en OI corregida. Durante el cover test se observó una endotropía de +30 dioptrías prismáticas (DP) de lejos y cerca, además de una hipertropía del OI/OD de 16 DP de lejos y de 25 DP de cerca, con limitación de la abducción de OD. Presentaba tortícolis cabeza hombro derecho y Bielchowsky + sobre hombro izquierdo. El FO del OD: coroidosis miópica. Se diagnóstica de heavy eye (endotropía + hipotropía), realizando una miopexia del RL y del RS (técnica de Wong) con banda de silicona utilizada para el cerclaje en la cirugía de desprendimiento de retina (DR), colocándose a 12 mm de limbo, uniendo sus extremos con dacron de 5/0. En el postoperatorio se encuentra ortotropia horizontal con una leve hipertropia del OD de 3 DP y leve restricción de la infraversión del OD.
Conclusiones: Wong publicó 2 casos exitosos, siendo su técnica la utilizada por nosotros. Dicha técnica no necesita una sutura a esclera, por lo que eliminamos el riesgo de perforación en una estructura adelgazada por la presencia del estafiloma. Además, en casos fallidos es fácilmente reversible en el postoperatorio. En cuanto al material requerido para la miopexia del RS y RL podemos emplear la banda de silicona utilizada en el cerclaje del DR
VCC-09 Extirpación de linfangioma asistida mediante sellador de fibrina (Tissucol®)
Dres.: Elena Jarrín Hernández, Diego Losada Bayo, Elisa Pérez Ramos, Javier García Gil de Bernabé
Madrid
Dres.: Elena Jarrín Hernández, Diego Losada Bayo, Elisa Pérez Ramos, Javier García Gil de Bernabé
Madrid
Introducción: En el tratamiento de los linfangiomas se pueden emplear diversas sustancias esclerosantes o cirugía. El hecho de que los linfangiomas no estén encapsulados, que estén formados por finos vasos endoteliales que se colapsan fácilmente al romperse y que pueden sangrar, hacen de su cirugía un procedimiento difícil.
Caso Clínico: Varón de 3 años de edad que presenta un tumor palpebral superior derecho con componente retroseptal compatible con linfangioma. El tumor induce ambliopía del ojo derecho por ptosis mecánica que afecta al eje visual y por la aparición de 4 dioptrías de astigmatismo. Por ello se decide extirpación. Se abordó el tumor a través de una incisión en surco de piel y orbicular. Para facilitar la cirugía se aspiró el contenido líquido del tumor mediante una aguja de 21G y sin extraer la aguja se inyectó sellador de fibrina (tissucol®) dentro de los friables quistes del linfangioma. Con esta maniobra conseguimos que el tumor se convierta en una estructura sólida, más fácil de disecar y de extirpar, y mejora la hemostasia. Posteriormente se reinsertó la aponeurosis del elevador y se suturó orbicular y piel dejando un drenaje. La evolución posterior ha sido muy favorable con una rápida corrección de la ambliopía.
Conclusiones: Está indicado la cirugía en los tumores orbitarios si producen una ambliopía deprivacional intratable. Gracias a la inyección del tissucol la disección del tumor se llevó a cabo fácilmente y sin complicaciones. Concluimos pues, que la inyección de sellador de fibrina intralesional puede ayudar en la extirpación de linfangiomas orbitarios.
Los autores no tenemos interés comercial ni hemos recibido apoyo económico.
Caso Clínico: Varón de 3 años de edad que presenta un tumor palpebral superior derecho con componente retroseptal compatible con linfangioma. El tumor induce ambliopía del ojo derecho por ptosis mecánica que afecta al eje visual y por la aparición de 4 dioptrías de astigmatismo. Por ello se decide extirpación. Se abordó el tumor a través de una incisión en surco de piel y orbicular. Para facilitar la cirugía se aspiró el contenido líquido del tumor mediante una aguja de 21G y sin extraer la aguja se inyectó sellador de fibrina (tissucol®) dentro de los friables quistes del linfangioma. Con esta maniobra conseguimos que el tumor se convierta en una estructura sólida, más fácil de disecar y de extirpar, y mejora la hemostasia. Posteriormente se reinsertó la aponeurosis del elevador y se suturó orbicular y piel dejando un drenaje. La evolución posterior ha sido muy favorable con una rápida corrección de la ambliopía.
Conclusiones: Está indicado la cirugía en los tumores orbitarios si producen una ambliopía deprivacional intratable. Gracias a la inyección del tissucol la disección del tumor se llevó a cabo fácilmente y sin complicaciones. Concluimos pues, que la inyección de sellador de fibrina intralesional puede ayudar en la extirpación de linfangiomas orbitarios.
Los autores no tenemos interés comercial ni hemos recibido apoyo económico.
VCC-10 Cirugía de catarata en el síndrome de Marfan
Dres.: M.ª Luisa Merino Suárez, Javier Belmonte Martín, José Belmonte Martínez
Alicante
Dres.: M.ª Luisa Merino Suárez, Javier Belmonte Martín, José Belmonte Martínez
Alicante
Introducción: El síndrome de Marfan es un trastorno generalizado del tejido conectivo que afecta al sistema musculoesquelético, ocular y cardiovascular. La ectopia lentis con desplazamiento superotemporal del cristalino es la alteración ocular más frecuente, pudiéndose asociar otras anomalías angulares y retinianas.
Caso Clínico: Se presenta un caso de subluxación del cristalino en un niño de 7 años con Síndrome de Marfan. La cirugía difiere de la intervención convencional de cataratas por la inestabilidad del cristalino requiriendo una técnica minuciosa para lograr un desgarro capsular anterior circular continuo y la necesidad de un emplazamiento alternativo para el implante intraocular. En éste caso, se decidió fijar la lente intraocular mediante sutura transescleral al surco ciliar, resolviéndose la intervención satisfactoriamente.
Conclusión: La cirugía del cristalino subluxado en el Síndrome de Marfan supone un reto quirúrgico por el deficiente soporte capsular. El emplazamiento de una lente intraocular mediante sutura a sulcus, proporciona una situación más fisiológica del implante, minimiza el daño endotelial producido por las lentes de fijación anterior y logra, mediante la sutura, la estabilidad de la que carece el saco capsular.
Caso Clínico: Se presenta un caso de subluxación del cristalino en un niño de 7 años con Síndrome de Marfan. La cirugía difiere de la intervención convencional de cataratas por la inestabilidad del cristalino requiriendo una técnica minuciosa para lograr un desgarro capsular anterior circular continuo y la necesidad de un emplazamiento alternativo para el implante intraocular. En éste caso, se decidió fijar la lente intraocular mediante sutura transescleral al surco ciliar, resolviéndose la intervención satisfactoriamente.
Conclusión: La cirugía del cristalino subluxado en el Síndrome de Marfan supone un reto quirúrgico por el deficiente soporte capsular. El emplazamiento de una lente intraocular mediante sutura a sulcus, proporciona una situación más fisiológica del implante, minimiza el daño endotelial producido por las lentes de fijación anterior y logra, mediante la sutura, la estabilidad de la que carece el saco capsular.
VCC-11 Tortícolis y diplopía vertical por linfoma en el recto inferior
Dres.: León Remón Garijo, Diana Pérez García, Ángel Domínguez Polo
Zaragoza
Dres.: León Remón Garijo, Diana Pérez García, Ángel Domínguez Polo
Zaragoza
Introducción: Los linfomas localizados en los músculos extraoculares son tumores poco frecuentes y su diagnóstico puede demorarse debido a la inespecificidad de su sintomatología.
Caso Clínico: Paciente varón de 64 años, con tortícolis «mentón hacia abajo» y mirada en supraversión para evitar la diplopia vertical por hipofunción de su recto inferior izquierdo (RII). Las imágenes de resonancia magnética demostraban un gran engrosamiento inespecífico del RII con proptosis ocular. Realizamos un acortamiento de 7 mm del RII, con extracción de material para estudio anatomopatológico. El diagnóstico fue Linfoma Linfocítico B de bajo grado. Tras la operación, desaparecieron el tortícolis y la diplopia en posición primaria. Posteriormente fue tratado con quimioterapia (Rituximab + Ciclofosfamida-Vincristina-Prednisona) con curación completa de la enfermedad.
Conclusiones: El linfoma B de este paciente requirió un abordaje multidisciplinar, consiguiendo la curación total de su proceso linfoproliferativo sin quedar secuelas oculomotoras.
Caso Clínico: Paciente varón de 64 años, con tortícolis «mentón hacia abajo» y mirada en supraversión para evitar la diplopia vertical por hipofunción de su recto inferior izquierdo (RII). Las imágenes de resonancia magnética demostraban un gran engrosamiento inespecífico del RII con proptosis ocular. Realizamos un acortamiento de 7 mm del RII, con extracción de material para estudio anatomopatológico. El diagnóstico fue Linfoma Linfocítico B de bajo grado. Tras la operación, desaparecieron el tortícolis y la diplopia en posición primaria. Posteriormente fue tratado con quimioterapia (Rituximab + Ciclofosfamida-Vincristina-Prednisona) con curación completa de la enfermedad.
Conclusiones: El linfoma B de este paciente requirió un abordaje multidisciplinar, consiguiendo la curación total de su proceso linfoproliferativo sin quedar secuelas oculomotoras.
VCC-12 Parálisis de la mirada conjugada horizontal
Dres.: León Remón Garijo, Diana Pérez García
Zaragoza
Dres.: León Remón Garijo, Diana Pérez García
Zaragoza
Introducción: La parálisis aislada de la mirada conjugada horizontal es una entidad poco frecuente.
Caso Clínico: Paciente varón de 11 años que presentaba una imposibilidad real de mirar hacia ambos lados, teniendo que girar el cuello para ello. Estaban conservados los movimientos verticales, el movimiento de convergencia y presentaba una agudeza visual de 10/10 en cada ojo con buena visión estereoscópica. Era imposible desencadenarle el nistagmus optocinético horizontal con un tambor giratorio. Las imágenes de resonancia magnética demostraban múltiples lesiones compatibles con Neurocisticercosis. Instauramos un tratamiento con albendazol asociado a prednisona en pauta descendente con curación del proceso a los pocos días.
Conclusiones: La parálisis aislada de la mirada conjugada horizontal puede ser producida por la Neurocisticercosis y responde bien al tratamiento con antihelmínticos y corticoides.
Caso Clínico: Paciente varón de 11 años que presentaba una imposibilidad real de mirar hacia ambos lados, teniendo que girar el cuello para ello. Estaban conservados los movimientos verticales, el movimiento de convergencia y presentaba una agudeza visual de 10/10 en cada ojo con buena visión estereoscópica. Era imposible desencadenarle el nistagmus optocinético horizontal con un tambor giratorio. Las imágenes de resonancia magnética demostraban múltiples lesiones compatibles con Neurocisticercosis. Instauramos un tratamiento con albendazol asociado a prednisona en pauta descendente con curación del proceso a los pocos días.
Conclusiones: La parálisis aislada de la mirada conjugada horizontal puede ser producida por la Neurocisticercosis y responde bien al tratamiento con antihelmínticos y corticoides.